Capítulo 32. Hasta que tu corazón deje de latir Nessie

Canción: The Only Exception de Paramore

Jacob

La sensación de sentirse pleno es lo mejor que le puede pasar a alguien.

Creo que en la vida tienes pocas oportunidades de enamorarte completamente de otra persona no sólo de la personalidad o de su físico, sino también de su alma.

Tuve muchas novias. No lo negaré.

Me enamoré y me han roto el corazón como cualquier persona. Pero creo en el destino.

Me he equivocado muchas, tantas veces que quizá debí haberme rendido hace mucho, pero no lo he hecho.

Lo que siento por esta chica es demasiado grande es como un globo de helio que crece dentro de mí. La amo. Y cada minuto de esta espera que se me hizo eterna, ha valido la pena.

Verla sonreír, y a mi lado no tiene precio.

-Entonces ¿Qué haremos hoy? -Renesmee me pregunta una vez llego a buscarla a su casa.

Ayer hemos compartido con los muchachos de la reservación, y hoy tengo algo preparado para ella. Quiero disfrutar cada momento a su lado.

Así que sólo me limitó a decir poco. - Es una sorpresa.

-Odio las sorpresas. -Y se que lo hace. -La ultima vez que me ibas a dar una "sorpresa" resultó ser tu boda con una arpía.

Me río -No me digas que estas celosa.

-No lo estoy -refunfuña- menos de ella.

-Que sí -respondo.

-Que no -repite golpeando leve mi pecho.

-Aww, ven aca -extiendo mis brazos para abrazarle, y ella recibe mi abrazo -No tienes porque estar celosa amor, tú eres la que me importa.

Entre mis brazos, ella levanta la cabeza, su mentón conecta con mi pecho. -Te lo dejaré pasar porque me dijiste amor -me sonríe.

-Amor, amor, amor, vida -sonríe más mientras le digo todo eso y se pone toda roja mientras le doy un beso.

-Ya en serio, odio las sorpresas. ¿Porque no me dices que estas planeando y ya? -me cuestiona.

-Porque no -reitero nuevamente. -No tendría chiste, aparte se que esta te gustara.

-Bueno -hace un puchero. -Pero de verdad espero que sea así.

-Sí. Que bueno que te pusiste ropa ligera. Por cierto te ves hermosa-le digo mientras le tomó la mano.

-Gracias.

-Vamos, la sorpresa espera.

***

Tengo planeado algo desde hace unos días. Llevare a Nessie a la playa. Es temprano todavía, aun de mañana, y el rocío se siente en el aire.

Compre un cadillac hace unos meses cuando ella estaba en Londres. Me gusta mucho, pero igual sigo prefiriendo las motos.

Salimos de la casa al porche. Y ella mira el vehículo con sorpresa. -¿Ahora tienes auto? ¿y la moto?

-¿No te gusta? Tengo la moto aun. Pero me pareció más conveniente usar el auto hoy.

-Está genial -dice mientras se acerca y toca la superficie.

-Me alegra que te guste. -Le abro la puerta del vehículo.

-¡Pero que caballeroso estás hoy! -exclama.- Te has ganado un beso. -Me da un beso en la mejilla antes de subirse al auto.

Cierro la puerta y me siento en el asiento del conductor. -Eres tramposa, creí que sería en los labios. -Le digo antes de abrocharme el cinturón.

Ella me sonríe con picardía. -No especifique dónde te daría el beso.

-Touche -enciendo el vehículo y empezamos a movernos. Bajo las ventanas. -¿Pero me darías uno ahora, en la boca?

-No, estas manejando -me dice mientras le hago un puchero -no, cuando termines de conducir...

-Serán dos entonces -le sonrió.

-Bien

-En la boca...

-Creí que no lo especificarías -se que se divierte con todo esto.

-Nunca dos veces -le guiño un ojo y vuelvo mi vista a la carretera.

Quiero poner música y parece que ella tiene la misma idea porque ambos nos tocamos la mano cerca del botón del encendido del radio lo que provoca que la mire y ella también a mí.

Me gusta cuando sonríe, porque siento que solo en ese momento, ella me mira solo a mí.

Como ahora.

-Puedes elegir -le digo.

Ella asiente y va cambiando la emisora. Hasta que se detiene en una. Y va tarearando la canción... -You're are the only exception, so you're are the only exception...

Esta tan concentrada tarareando con los ojos cerrados y a pesar de que tiene puesto el cinturón, se balancea de lado a lado al ritmo de la canción.

Se ve tan bonita, me detengo en un semáforo y le robo un beso en la boca.

Ella abre los ojos y me mira. -¡Oye!

-Lo siento amor -me encojo de hombros- tenía que aprovechar.

-Tengo que ser más dura contigo, pero... -se tapa las manos con la cara mientras sube las piernas en el asiento. -creo que no podré nunca...

-Solo mirate Renesmee, tengo que besarte cada vez que pueda -me excusó mientras dobló a la derecha...

-¡Deja de ponerme colorada! -exige

-Te ves linda, cuando te enojas sin argumento. Me gusta verte colorada.

Ella me mira y me da una media sonrisa mientras entramos en la autopista, y el mar está a nuestra derecha. Es un día soleado, perfecto para lo que quiero hacer.

-Que lindo se ve el mar hoy -comenta ella mientras mira por la ventana.

-Si, se ve muy bien. -Comento.

Unos kilómetros más y llego a los aparcamientos un poco mas arriba de la entrada de la playa.

Apago el motor del vehículo y me bajo para abrirle la puerta a Renesmee.

-En serio, me puedo acostumbrar a eso -dice risueña mientras sale. -Estamos en la calle. ¿A donde vamos?

-Primero -respondo- necesito mis dos besos ahora.

Ella hace una mueca con su boca y se que quiere hacerme sufrir un poco. -Lo prometiste Nessie.

-Está bien...

Y lo hace. Me besa en los labios y se siente tan bien, que no quisiera que parara.

Después se unos segundos se separa y con nuestras frentes conectadas, y su boca a milímetros de la mía le tomo de manos, y la beso de nuevo brevemente antes de enseñarle la sorpresa. -Necesito vendarte los ojos. -le digo

-No Jacob, no me gusta eso... -se cruza de brazos mientras mira alrededor.

-Estás conmigo, tranquila. Te gustará.