Hechizos contra el amor

Capítulo 5 Raquel

Capítulo 5

Raquel

 

No tenía opción, debía contarle a Dilan la verdad, como estaban las cosas no podía confiar en nadie, y él, aunque no lo conocía a fondo me inspiraba buenos sentimientos, espero no haberme equivocado.

La madre de Liorna que de cariño le decíamos Lio, siempre fue mejor que nosotras, estudiamos juntas en la mejor academia de magia, sus dones eran extraordinarios, pero el tiempo paso y tuvimos que crecer, y cada quien tomo su camino, vivimos juntas hasta los 23 años, después cada una hizo su vida, formando una familia, claro excepto yo, siempre me gusto vivir sola, eso de depender de alguien nunca fue de mi agrado, me considere un espíritu libre, viaje por muchos lugares buscando aventuras y adquiriendo más conocimientos sobre magia ;entre las dos compramos la casa en la que actualmente vivo,  me refiero a Lio, el dueño casi nos la regalo, estaba muerto de pánico porque decía que tenía fantasmas, la adecuamos a nuestro gusto y expulsamos los espíritus que ahí Vivian.

vivimos juntas en esa casa durante cinco años, hasta que ella lo conoció a él, la verdad siempre me dio mala espina, pero ella se segó por el amor y no le permitió ver más allá, y la verdad no la culpo él era guapo, rubio, e inteligente y supo envolverla muy bien aprovechándose de cada una de sus debilidades emocionales y haciéndole sentir que él era el hombre de sus sueños; al año de estarse conociendo se casaron y se mudaron al mundo mágico, en donde de vez en cuando iba a visitarla, cada vez que iba notaba como su felicidad se iba mermando como una rosa que ponen en agua y poco a poco su brillo se va, dejando solo lo marchito de su naturaleza.

Una vez tome valor y le pregunte si era feliz, pero en vez de contestarme rompió en llanto, le dije que lo dejara pero dijo que no podía porque estaba embarazada y que por el bien de la criatura tendría que estar con él. En el fondo ella pensaba que él iba cambiar, que triste, si solo me hubiera escuchado, ahora no estaría muerta; atendí el parto pero él no me dejo acercarme más a ellas, me amenazo porque según Jorge le estaba metiendo ideas a su mujer, así que solo nos comunicábamos con cartas que ella lograba enviarme a escondidas con fotos de la pequeña Liorna, que menos mal era idéntica a su madre y no a ese desgraciado.

La última carta que recibí fue un mes antes de su fallecimiento, donde me pedía encarecidamente que cuidara a Liorna y me conto por que debía hacerlo y el peligro que corría ella si alguien se enteraba de esto; fue un golpe muy duro para mi enterarme de su muerte y mas no poder ir a su funeral.

 

Cuando Liorna me llamo no pude negarme, además la petición de su madre antes de morir fue precisamente hacerme cargo de ella cuando faltara, pero cuando murió intente hacer lo que me pidió, pero no fue posible ya que la corte mágica se opuso al no ser yo un pariente cercano, y la adopción no era una opción ya que como su padre seguía vivo legalmente no era huérfana, me sentí muy mal ya que no me dejaron siquiera verla.

Después de tanto molestar a la corte cedieron en mantenerme informada sobre su evolución en ese lugar y cuando cumpliera la edad necesaria podría traerla conmigo, y así sucedió.

Nunca supe más sobre lo que de verdad era Liorna, las cartas de Lio eran tan confusas que muy poco comprendía; como le dije a Dilan, no sabíamos con exactitud a que nos enfrentábamos, pero de lo que  estaba segura era que ella era importante.

Camine por el pasillo lentamente pero con paso firme hacia el cuarto de Liorna resuelta a contarle la verdad, después de todo es sobre su vida de la cual la estamos engañando; llegue toque la puerta que estaba entre abierta y seguí; ella estaba en la cama con su bata de baño; respire profundo y pregunte;

-¿Estas despierta Liorna?

-sí., lo estoy. Respondió con voz cansada- ¿ya se fue él?

-¿quién? ¿Dilan?

-Sí.

-ya se fue. Respondí mientras me sentaba en el piecero de la cama.  -tengo algo que contarte. Añadí en un tono serio que inmediatamente capto su atención.

Seguidamente le dije todo lo que sabía acerca de ella, contándole con detalle lo ocurrido y las sospechas de su madre sobre su verdadero poder; cambio solo recibí un silencio sepulcral.

-yo solo quería que tuvieras una vida un poco normal, no te quería agobiar con todo esto. Añadí buscando alguna reacción de su parte pues ese silencio era inquietante.

-¿Qué más me ocultas? Respondió en un tono de voz más tranquilo de lo que esperaba.

-lo que te acabo de decir es lo único que sé, te lo aseguro.

-ahora entiendo el comportamiento de mi madre, siempre supe que había algo extraño, sus sobre protección y preocupación de que nunca mostrara mis verdaderas habilidades, era evidente que algo me ocultaba.

-ella solo quería protegerte. Añadí con mucha seguridad.

-Lo se Raquel. Respondió con una sonrisa mientras las lágrimas recorrían su rostro.- no voy a juzgar sus actos y mucho menos las decisiones que tomo sobre mi vida, era mi madre y quería lo mejor para mí.



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En el texto hay: romance, brujas, primer amor

Editado: 18.03.2019

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