Y es como si las cosas simplemente pasarán, como si con tan solo una acción o una palabra te haga desistir y dejarte de aferrarte a esto que dicen llamar vida.
Porque a veces no se trata del porque, el cual o el como sino el quién que te ha vaciado dentro, aquel o aquella que te ha hecho perder la esperanza a seguir luchando.
Un simple movimiento en falso será el detonante de una bomba de oscuridad dentro de ti. Una oscuridad que te atrapa cual manos desesperadas buscando lo que anhelan, buscando que por fin te rompas, que las grietas que tengas por fin terminen de abrirse y que cuando noten que te has dado por vencido, te ataquen sin piedad.
Eso es lo que está oscuridad busca. Esta esperando el momento perfecto cuando tu dejes de luchar y dejes que todo te afecte para bañar tus pensamientos con solo una palabra y es SUICIDIO.
Esta tratando de ingresar dentro de ti, para atormentarte y borrar cualquier rastro de cordura porque si ahora tienes miedo de hacerte daño a ti mismo, pronto esta hará que lo pierdas y luego no le importara si saltas del precipicio, si te ahogas con pastillas o simplemente te cortas las venas hasta desangrarte por completo porque cuando de dolor hablamos, especialmente cuando no se trata del físico sino del mental, nos cansamos y buscamos escapar de alguna forma.
¿Es acaso aquella oscuridad algo bueno, entonces? Puede que lo sea, y al mismo tiempo no.
Buscar tan solo una luz, algo que ilumine y haga desvanecer todo este dolor y sufrimiento que te ciega completamente a veces será la mejor opción.
Sin embargo, quien quita que este mundo no es algo horrible... No, el mundo no es horrible, son los humanos, nosotros, lo que lo hacen de tal forma porque ya el mundo en sí es hermoso. Y es aquí donde te preguntas si es mejor seguir la oscuridad e ignorar la luz.
Nadie nos enseñó a enfrentar tal mundo tan cruel. Y es debido a esto que terminamos en un limbo sin salida alguna.
Estamos en un punto en el que empezamos a creer que es mejor dejarnos atrapar por aquellas manos que aguantar todo ese sufrimiento pues ellas no estarían haciendo un gran favor.
¡ALTO!
¡Esto es lo que hace! ¡Miren como nos endulza con cada acción y palabra! ¡Miren como nos incita la oscuridad a hacer parte de ella!
Pero... ya no tengo miedo. Ella lo logro, logró adentrarse por mis grietas, logró hacer que tocará el fondo de la botella. La oscuridad es muy astuta.
Y ahora solo estoy aquí, viendo como las olas del mar azul se mueven con parsimonia desde el barranco. La brisa hace que mi cabello cubra mi rostro totalmente y puedo sentir como soy empujada por aquellas manos hacia la libertad.
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Editado: 15.05.2020