Heredera

TREINTA Y DOS

LA REALIDAD GOLPEA DURO

29 DE DICIEMBRE 8:22AM OFICINAS DE CONFERENCIA ÁREA CENTRAL, CENTRO DE SEGURIDAD

Dolor punzante atraviesa mi brazo derecho que al moverme quemaba por permanecer mucho tiempo en una posición sin moverme, los brazos aun rodean mi cintura con la misma firmeza del principio hago una mueca de dolor es jodidamente doloroso me estiro todo  lo que puedo mientras su agarre es continuo veo sus ojos cerrados con una respiración constante puedo apostar que el está mucho más dolorido que yo dado que soporto todo mi peso en la noche y sus brazos jamás me dejaron un solo segundo lo despierto con pequeños roces de mi nariz es de mañana necesito que me suelte para realizar mi rutina de aseo matutino.

Poco a poco comienzo a tener movilidad con mayor sincronía lo facilita un poco mi trabajo, pero mi maravilloso acompañante no muestra signos de vida me recuesto en su pecho nuevamente me deja lo suficiente para moverme con libertad John es consciente de mis movimientos.

Solo me muevo intentando retirarme de su regazo es de mañana debemos de iniciar con todas nuestras obligaciones no es mi mayor deseo regresar a toda la realidad que me espera, que nos espera saliendo de esta sala el enfrentar tanto a los de la mesa como a Francisco haciéndole saber que me importa muy poco que exista un acuerdo donde yo iba hacer su futura esposa porque eso no pasara, yo solo quiero a una persona y talvez sea con quien me case más adelante que definitivamente no es el rey de Francia.

Paso nuevamente mi nariz en su mandíbula la recorro un par de veces y el solo hace un par de muecas que me dejan saber que está despierto o lo suficientemente consciente para notar mi contacto, pero  no abre los ojos me rio un poco para mí misma, pero esta vez recocerlo un poco más con mi nariz hacia arriba de su cuello antes de llegar a su oreja izquierda y expulso un poco de aire caliente para  hacer que se mueva con el contacto con su piel, no se remueve, bueno sé que su paciencia de fingir que sigue dormido no puede durar mucho, repito mi acción un par de veces pero no funciona y me percato de que no tiene puesta la chaqueta del uniforme solo tiene puesta una camiseta que se pega completamente a su cuerpo dejando sus brazos descubiertos, es la primera vez que lo veo tan relaja ado a tal punto que pareciera en estos precisos instantes que es solo un estudiante más de cualquier carrera.

John pretende que mis contacto  no le afecta pues bien estoy eufórica al demostrarle que está equivocado que su control se desvanecerá en un instante y una idea un tanto malvada se aparece en mi cabeza, le acaricio sus brazos desde sus hombros hasta sus manos disfrutando todo lo que puedo de deslizar mis manos sobre su piel que cubre unos muy definidos músculos que con forme me deslizo sobre ellos se tensan lo cual disfruto, le afecto tanto como me afecta el a mí, la única diferencia es que yo no he podido ocultar mis reacciones ante sus ojos, besos, caricias o palabras.

Deslizo mi nariz en sus labios siento como se mueve, este juego me encanta, pero mi cerebro dice que si en unos momentos no nos presentamos en el comedor seguramente nos enviaran a buscar o mi papá querrá matar a John por quedarnos toda la noche juntos, puede que Cristopher sea muy abierto en ideas y otras cosas, pero no creo que apruebe que su única hija se quedó dormida con su novio cuando solo son eso novios apostaría que su reacción no sería grata para John o para mí.

Colocando mis manos en sus hombro las comienzo a deslizar haciendo una especie de circulo en su pecho por toda su playera disfrutando de solo una separación entre él y yo pero en este punto no sé si el afectadoo es el o yo, con lo que estoy haciendo decido tragar en seco y continuar al llegar al borde donde su playera cae sobre su cinturón lo que pude haber hecho era detenerme pero simplemente quería probar mi y punto, con mucho cuidado de que lo sintiera deslizo mi mano dentro de ella tocando su piel al principio es como si no notara mi caricia lo cual me desinfla un poco porque es doloroeso que no afectes al chico que mte gusta y él dice amarte.

A pesar de ello no me detengo lo sigo haciendo por unos segundos más cuando estoy por rendirme abre los ojos su rostro es de disgusto, he pasado una línea la cual al aparecer ninguno de los dos está muy cómodo al cruzarla por su expresión intento quitar mis manos de donde las tengo pero John la detiene manteniéndolas en el mismo lugar donde las tengo sus ojos encuentra los míos  y hay algo diferente en ellos algo que no estaba ayer en la noche, algo que no estaba incluso cuando discutíamos, intento descifrar lo que sea.

Mi garganta se seca no puedo más necesito hablar decir algo debo decir, ¡lo siento!, ¡no es nada!, o algo mucho más inteligente que elimine lo que sus ojos muestran que me aterran descubrir en sus labios se forma una sonrisa algo burlona, mi cerebro tarda uno segundos en procesar que en cierto punto se está burlado de mi, me hace enojar ¿Cómo se atreve a hacerme eso? Un gruñido sale de mi boca pues no pretendo hablarle en este punto.

Su acercamiento es lento aun con su sonrisa burlona en sus labios hace que me derrita por lo increíblemente sexi y descuidado que se ve con el cabello alborotado y unos muy hermosos ojos azules brillantes, eso es, sus ojos tiene un brillo distinto uno que no estaba ayer uno que hace que mi corazón se derrita completamente, intenta besarme, pero me alejo ese será su castigo por hacerme creer que estaba enojado conmigo pero el castigo es más para mí que al ver esos maravillas ojos azules resplandecientes lo único que quiero es sentir ¿Cómo trasmitiría eso en un beso? Así que después me regaño a mí, por ser tan idiota en rechazar el beso.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.