Capítulo 14. Vacaciones.

Capítulo 14. Vacaciones.

La teniente coronel Moral arrastró a Tom con la capitana Will, donde explicaron la nueva versión de lo sucedido. Tom pidió a las oficiales y a Gary que no le dijeran al coronel Toriello del asunto. Tom no quería meterse en más problemas ni que ellos se metieran en dificultades. Miranda decidió tomarle la palabra al cadete Fields, pero la insistencia y preocupación de Gary por su compañero le hizo interceder, aunque reacia. Y es que, Miranda no podía evitar verse reflejada en la actitud de la capitana Moral y eso no le agradaba. Con todo el profesionalismo que le fue posible, el coronel Toriello le pidió a la capitana Moral atender las indicaciones y ser más flexible en su enseñanza. Aun así, Charles conocía a sus profesores, la hermana menor Moral no se calmaría. Al menos parecía que habían asegurado la estadía de Tom por el resto del año escolar.

Un par de días después, la cadete Xóchitl Pérez terminaba de llenar sus últimos reportes de becaria en la biblioteca. Al ser cadete A y tener beca, parte de las retribuciones a la Academia era ayudar a los profesores.

—Xóchitl… —escuchó la cadete su nombre como murmullo, sacada de su concentración desvió la mirada mientras el cadete que la había llamado se sentó a su lado.

—¡Ash! ¿Ahora que quieres, Francis? —preguntó la cadete mientras seguía tecleando.

—Solo vengo a saludarte. —El cadete acercó a Xóchitl un vaso con café frío.

—Tú sabes que yo sé que no es cierto. Y es obvio por tu soborno —dijo tomando el café.

—¡Oh! Bien, me has atrapado. Pero, es que esto de los juegos del próximo periodo me tiene bastante tenso. Tengo que empezar a ver con qué pelotones nos debemos aliar.

—Fran, falta bastante para eso, deberías relajarte.

—No puedo… —gimió—. Es más, ni dormir de la emoción puedo.

—Eso no es bueno, es necesario dormir las horas calculadas individuales para rendir.

—Entonces, ayúdame a eso. Empieza a cantar, ¿quién tuvo mejor potencial?

Xóchitl no contestó.

—Seguro fui yo, ¿no es así?

La cadete soltó unas risitas.

—Fue Kent, genio. Aunque la brecha entre ustedes no es tan grande. Bien, te diré que otros cadetes estuvieron a la altura.

Xóchitl explicó a Francis el actuar de los cadetes, y quienes habían obtenido los mejores potenciales de expresión durante el periodo.

—Y, por último, quiero agregar a este cadete que de verdad me sorprendió. Para mí, fue el mejor en la prueba, aunque la capitana Moral lo calificó muy bajito. Cuando le pregunté la razón a la capitana se negó a darme motivos, ¡esa vieja me desespera!

—¿De cuál cadete hablas?

—De Alan Thomas Fields.

—¿Y ese quién es?

Xóchitl abrió la ficha del alumno a la que tenía acceso como becaria y se lo mostró a Francis.

—Creo que ya lo ubico —murmuró Francis—. Es ese cadete que dicen que no da una, ¿no es así? El otro cadete A de los Halcones Dorados. ¿Cómo es posible?

—Yo tampoco lo entiendo muy bien, pero presta atención. Este chico inicio con un potencial debajo del cinco, lo subió, se descubrió que tenía un principio e hizo una conversión perfecta al cuarenta porciento durante el examen.

—¿Cuarenta? Pensé que era al treinta.

—Tuvo que hacerlo, de otra forma la capitana no lo dejaría presentar.

Francis analizó las gráficas con las que Xóchitl explicaba la evolución del cadete.

—Esto no es normal. —Xóchitl cruzó los brazos y se recostó en el respaldo de la silla—. De los dos años que he estado como becaria de la capitana Moral nunca he visto algo así. Incluso esculqué en datos pasados y tampoco encontré algo parecido. Y no solo eso, es clara también su mejora física. Al menos para mí no sería una sorpresa si Fields se convirtiera en el número uno con el potencial que tiene. Quizás por eso tiene una beca A como la nuestra. Si lo piensas un poco, de pronto es curioso todo esto, ¿no?

Francis observó a su amiga y preguntó:

—¿Por qué será que nadie habla sobre esto? Más de uno lo vio en el examen.

—También me lo pregunté, así que le puse más atención. Fields es de esos que la gente usa para sentirse bien consigo misma. Ya sabes, ¡no te sientas mal por ti, siempre habrá alguien peor!

—Yo no hago eso.

—La mayoría no son tan maravillosos como tú y yo. —Xóchitl sonrió—. Dales a las personas a alguien como Fields y saciaran su sed de sentirse mejor, como sanguijuelas. Por eso es inaceptable que sea mejor que ellos y lo ignoran. Este cadete me intriga tanto, ¿quién o qué será en realidad? Nada de lo que veo en su ficha es normal.

Francis no respondió, continuó viendo el monitor. En definitiva, debía aliarse con los Halcones Dorados, así ganaría los juegos de guerra y quizás respondería esa duda que Xóchitl le plantó.

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El primer periodo había terminado y Tom se encontraba con el doctor Emils atendiendo a su última consulta del año.