Capítulo 4

Capítulo 4 - La Culpa de Andrés

Andrés se dejó caer en el sofá, la cabeza entre las manos. Acababa de echar a Sofía de su vida, y el peso de sus acciones le oprimía el pecho como una losa.

Recordó la mirada aterrorizada de Sofía cuando la había sacado a empujones de la casa, sus ojos suplicantes clavados en él, rogándole que la escuchara. Pero Andrés había sido sordo a sus súplicas, cegado por la ira y el dolor que le provocaba la traición.

Ahora, en la soledad de su hogar, Andrés se sentía como un monstruo. ¿Cómo había podido hacerle eso a la mujer que amaba? Sofía había sido su todo, su compañera, su alma gemela. Y él la había despreciado, la había tratado como a una criminal, sin siquiera darle la oportunidad de explicarse.

Andrés se levantó y comenzó a caminar de un lado a otro, sintiendo que la culpa lo carcomía por dentro. ¿Y si todo había sido un malentendido? ¿Y si ese video que le habían enviado era una mentira, una trampa para destruir su relación?

Recordó los años que habían pasado juntos, la forma en que Sofía lo había amado y cuidado, la forma en que habían construido un futuro juntos. ¿Cómo había podido dudar de ella, de la mujer que le había entregado su corazón?

Andrés se detuvo frente a la ventana, observando la oscuridad de la noche. Imaginaba a Sofía sola, sin un techo donde refugiarse, expuesta a los peligros de las calles. Y el remordimiento lo consumía, porque él era el responsable de haberla dejado en esa situación.

Lentamente, se acercó a la puerta principal, con la intención de salir a buscarla. Pero se detuvo, dudando. ¿Y si ella no quería volver a verlo? ¿Y si ya era demasiado tarde para enmendar su error?

Andrés se dejó caer en el suelo, las lágrimas rodando por sus mejillas. Se odiaba a sí mismo por haber sido tan ciego, tan estúpido. Había dejado que la ira y la desesperación nublaran su juicio, y ahora había perdido lo más valioso que tenía.

Pasó horas allí, en la oscuridad, preguntándose dónde estaría Sofía, si estaría a salvo, si alguna vez podría perdonarlo. El miedo y la incertidumbre lo atormentaban, y Andrés se sentía como un completo fracaso.

Finalmente, se puso de pie, con la determinación brillando en sus ojos. No iba a rendirse, no iba a dejar que Sofía se alejara de él sin luchar. Tenía que encontrarla, tenía que explicarle todo y rogarle que le diera una oportunidad de enmendar su error.

Andrés salió a la calle, recorriendo las calles vacías en busca de Sofía. Sabía que sería una tarea difícil, que tal vez ella no quisiera verlo, pero no le importaba. Haría lo que fuera necesario para recuperarla, para probarle que su amor era real y que nunca había dudado de ella.

Mientras caminaba, Andrés se prometió a sí mismo que, si lograba encontrarla, haría todo lo posible por recuperar su confianza. Iba a luchar por su amor, cueste lo que cueste, porque Sofía era la única mujer que había logrado robar su corazón.

Mientras tanto llamaron a sofia en su celular y era su amiga le contó todo lo que le estaba pasando la fue a ver y se la llevó a su departamento, ellas eran amigas desde pequeñas Lucía sabia por todo lo qu abría pasado Sofía en el pasado.

Sofía lloraba mientras Lucía la abrazaba y le decía que ya todo va a pasar. Ella era su único apoyo porque sus padres no vivían en el país donde vive sofia y nose llevaba bien con su familia ellos no saben por todo lo que Sofía sufría que su pasado la atormentaba.