Capítulo 1- Graham

NARRADO POR GRAHAM DOBSON 

Enero 25 

Estaba de pie en un campo lleno de filas y filas de hombres y mujeres que aspiraban convertirse en soldados, aspiraban servir al país.  
Pasamos parados más de 1 hora y nadie se aparecía, algunos cansados se sentaron en el suelo para poder descansar un rato, el calor era insoportable, se habían dado las 12 del mediodía y seguíamos ahí, yo sudaba como loco, en mi fila incluso unos se habían acostado, otros se habían ido, pero muchos idiotas nos quedamos ahí. Se dieron las 4 de la tarde cuando apareció una camioneta.  

- Buenas tardes reclutas... Soy el Teniente Dann Taylor. Le doy la bienvenida a cada uno de ustedes. Están aquí porque quieren convertirse en soldados, servir a su país, pero eso no será nada fácil, un soldado tiene que tener disciplina, compromiso, integridad, responsabilidad, liderazgo, lealtad, honor, patriotismo y subordinación. Pero también debe ser inteligente, capaz de trabajar bajo cualquier situación, y capaz de tomar decisiones con la cabeza fría. 

Les presento al sargento Jadeen Harris, el será su instructor, y les enseñará todo lo necesario para convertirse en buenos soldados, les deseo mucha suerte y que Dios los ampare. Habiendo dicho eso se marchó.  

- Desde hoy seguirán mis órdenes. Como escucharon al Teniente Taylor, ser soldados no es nada fácil, hay 300 reclutas en mis filas pero no todos lograrán convertirse en soldados. 
Disciplina y compromiso: Muchos de ustedes poseen esas cualidades, estuvieron aquí todo el día sin ir a ningún lado. Pero eso no es suficiente para ser soldados. Un soldado tiene que ser resistente sin importar en qué situación se encuentre, los que se sentaron o acostaron tomen sus cosas, no es fácil llevar este uniforme si lo usan tienen que hacer valer todo lo que eso conlleva, si para algunos de ustedes les fue difícil estar parados todo el día, esto solo es el comienzo de un largo camino de entrenamiento sufrido que forjará su carácter y los convertirá en verdaderos soldados. Mañana a las 5:00 horas, inicia su entrenamiento. Pueden retirarse.  

Nos llevaron al comedor para servirnos la cena. 

- Intentas contarlos para ver cuántos quedamos al final-  Escuché que me dijeron por detrás. 
- ¿Tú lo sabes?- pregunté 
- Después que el sargento mandó a casa a los que no estuvieron parados todo el día. Quedamos 200 de los 300 que habíamos. 
- Mi nombre es Eddie Miller 
- Graham Dobson. 
Nos sentamos en una mesa donde estaba ocupada solamente de una persona. 
- Soy Eddie, él es Graham- nos presentó Eddie con el que estaba en la mesa 
- Ethan Conway 

Comimos sin hablar nada más, de hecho no se oía nada en todo el comedor a excepción de los cubiertos chocando con los platos, creo que todos estábamos cansados físicamente después de estar de pie frente al sol todo el día. Pero lo que yo ignoraba era que estar de pie todo el día, era pan comido comparado con lo que tuvimos que pasar el día siguiente.  

1er día de entrenamiento. 

A las 5 estábamos todos formados a espera del sargento Harris.  
- Buenos días, todos los días los quiero a la misma hora para los entrenamientos. Les voy a dar un número que tendrán atado a su brazo, por momentos serán llamados por el número que se les asigne.  
Me tocó ser el número 16.  

- Él es el soldado Luka Smith me ayudará con los entrenamientos. Trabajo con un método que se llama la prueba del enfermante y para los que no saben que es eso, o en que consiste esa prueba, en resumen les diré que mi trabajo es hacerlos renunciar. 
Recibirán el entrenamiento militar más duro y cansado que se pueden imaginar. Los que no logren finalizar cada ejercicio tendrán que irse. 
Para empezar vamos a correr y se van a detener hasta que yo les dé la orden.

 
No esperamos más y empezamos a correr. Llevábamos corriendo alrededor de 2 horas, la camisa la tenía completamente mojada y habían muchos que se quedaban atrás creo que en este poco tiempo corriendo renunciaron 15 personas. Entregaron su número y se fueron, para mí no era complicado correr pero entendía que no todos teníamos la misma capacidad física. 

Mucho, mucho tiempo después se escuchó la voz que tanto quería oír.  
- pueden parar reclutas- gracias a Dios, necesitaba un respiro.  
Son las 10 de la mañana regresaremos a la base y tendrán 15 min para comer y 15 para descansar y después de eso seguiremos corriendo. Hasta que el 15% de ustedes renuncie hoy. 
- Sargento ¿regresaremos corriendo?-      preguntó uno de mis compañeros que si vi bien era el número 133 
- Y que espera 133 que lo lleve cargando, claro que regresarán corriendo, pero si alguien quiere llegar en camioneta a la base me puede dar su número y puede irse. 
Vi que dos le dieron el número eso significaba que ya se habían retirado 17 y el 15% de 200 son 30 así que todavía el Sargento esperaba que 13 de nosotros renunciáramos. 
Regresamos corriendo a la base en el camino renunciaron 7 personas, era una tortura correr tanto tiempo. No sentía mis piernas. 
Fue bueno estar sentado un rato mi cuerpo sin duda me lo pedía.  Tomé mi comida y me fui a sentar, me tocó compartir mesa nuevamente con Eddie y Ethan.  
- Fue una locura-  dijo Eddie mientas comía y movía las piernas. 
- ¿Qué tienes?-  le pregunté 
¿Por qué mueves tanto las piernas? 
- ¿Por qué tú no lo haces?, no te enfríes que todavía nos falta correr después de comer y solo Dios sabe lo que nos espera 
- Él tiene razón-  dijo Ethan uniéndose a la conversación – Si no te quieres ir a casa mueve las piernas- hice lo que me dijo porque tenía un buen punto.  
Comimos lo más rápido que pudimos para poder rebajar la comida lo más antes posible, trataba de mantener en movimiento mis piernas, miraba a mí alrededor y se podía ver de lejos lo cansado que estábamos todos. No habían pasado ni 5 minutos de descanso cuando el sargento entró por la puerta.  
- Arriba, sigamos con el entrenamiento- ordenó  
-  Sargento pensé que había dicho que eran 15 min de descanso-  nuevamente el número 133 se atrevía a decirle algo. 
-  Si se lo que dije, pero si no mal recuerdo también dije que tenían que seguir mis órdenes así que muevan el culo y pónganse a correr ya mismo.