La gente en la calle celebraba o se divertía arreglando y adornando las calles pero por sobre todo compraba productos para la ocasión pues se trataba del festival más importante del año, donde los nuevos héroes se presentaban y la SDO junto con otras agencias, reclutaban a los héroes del mañana.
Era importante para los estudiantes pero también para las familias pues era un momento de descanso para todos, donde podían divertirse, mientras otros tantos podían vender y consumir productos de colección únicos en su clase.
—Como todos los años, es increíble— Iris no podía dejar de admirar los edificios adornados con las banderas de la escuela o los globos que había colgados por todos lados.
— ¿Para qué nos habrán llamado?— Esmeralda soltó un bostezo mientras caminaba a su lado hacía la escuela— ¿No el torneo es el último día?
—No lo sé— Iris se encogió de hombros.
Esmeralda Lara, su mejor amiga era delgada, más baja que Iris, de tez clara, de nariz respingada, ojos café oscuros, cabellos lacios largos y morenos, además de un lunar bajo sus labios gruesos. Su rostro aún parecía de niña lo que lo hacía popular entre algunos chicos por que la tomaban de inocente.
Ambas llevaban el uniforme escolar, la falda blanca con el bordillo negro, la blusa blanca con corbata y el saco blanco que servía para protegerlas. En realidad ese era el uniforme de gala, o sea, no era para combate, además de sus zapatos escolares y sus calcetas hasta debajo de las rodillas en ambos casos. Iris solía dejar más corta su falda pero por muy poco. Su escudo, una torre de color blanco sobre un fondo negro combinaba bien.
—Hablando de eso ¿Johan y Javier no estaban en el torneo también? ¿Dónde están?— Esmeralda recordó que ambos habían ido con ellas cuando fueron a inscribirse en los juegos.
—Ah, ellos van a tener evento el ultimo día con su banda así que fueron a recibir instrucciones o algo así, no entendí bien a mi hermano— Iris se encogió de hombros— Llegaran allá.
Las dos llegaron a la academia, donde algunas flechas pegadas en la pared señalaban hacía donde había que ir para los inscritos al torneo. Pese a que ellas sabían a donde ir, seguro los de otras escuelas necesitaban esas flechas.
La cantidad de gente era tal que ocupaban todo el auditorio e incluso había gente de pie.
—Mierda, si que se inscribieron este año— Señalo Esmeralda, haciendo una mueca.
—Cierto, tu si te inscribiste el año pasado… ¿De verdad son tantos?
—Claro que si— Esmeralda asintió con la cabeza, aunque eso le recordó que no pudo avanzar de las preliminares, algo que en su momento la frustro mucho— De hecho tampoco hicieron esta junta antes.
—Silencio, queridos alumnos— La voz de alguien las sorprendió, bueno a todos, pues se escuchaba hasta donde estaban ellas— Seguro se preguntan ¿Por qué están aquí casi cinco días antes del gran evento?
Todos estaban cuchicheando con emoción, hasta que ambas se dieron cuenta de que que se trataba del líder de la SDO.
Esmeralda e Iris nunca lo habían visto pero era inevitable querer curiosear, pues se trataba del hombre más fuerte del mundo y muchas veces llamado el Número 0 dentro del Top.
—Bueno, como pueden ver el auditorio está lleno de jóvenes promesas ¡Que emocionante! Pero…— Su tono pareció endurecerse— No podemos tener un torneo con todos ustedes ¡Lo sentimos!
Las chicas y los presentes comenzaron a sentirse inquietos ¿Entonces que va a pasar?
—Tomando en cuenta todo esto y el hecho de que en un futuro ustedes serán nuestra esperanza hemos decidido realizar un par de juegos antes de que lleguemos al evento principal con el fin seleccionarlos— El hombre hablo con fuerza— La fuerza no es lo principal para un héroe o un agente ¡También lo son la inteligencia y el trabajo en equipo!
La inquietud no bajo mucho.
—No puedo decirles que juegos serán hasta que llegue el momento pues le quitara lo divertido a los juegos pero les aseguro que están siendo diseñados para que solo los más fuertes e inteligentes puedan pasar al evento principal— El hombre hablo con confianza— Espero grandes cosas de todos ustedes ¡A darlo todo!
Algunos se mostraron emocionados pero otros pocos parecían decepcionados.
—Bueno, parece que hice lo correcto en solo inscribirme a esta prueba— Iris se sintió aliviada— Johan se inscribió a esta y a las pruebas de fuerza y resistencia ¡La tendrá difícil!
— ¿A qué te refieres?— Johan venia llegando.
—Oh pues veras…—Iris prosiguió a explicarles la situación a sus dos amigos.
—Pues sí que la tienes difícil, hermanito— Le dijo Javier Allende, el mejor amigo de Johan mientras le daba palmaditas en la espalda— Si me enfrento a ti, te lo haré fácil para que te rindas ¿Bien?
Su mejor amigo era un poco más bajo que Johan, de ojos verdes, pestañas castañas, cabellos cortos castaños, labios delgados y nariz respingada. Era atlético y también usaba unos lentes negros.
Ambos llevaban su uniforme escolar que sustituía la falda por un pantalón blanco de vestir.
—No te hagas el listo— Johan no pudo evitar sonreír de lado ante ese comentario— La verdad es que no voy a perder ni ante ti, ni ante nadie así que no se preocupen ¡Esto será pan comido!