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—¿Gángster? ¿Mi papá fue un Gángster?—Preguntaba de manera incrédula JeonGguk esperando que el chico frente a él le dijera que todo era una mentira. Y es que eran demasiadas las cosas que lo golpeaban.

Primero, saber que su padre estuvo con un chico en su adolescencia, después su cambio de vuelo para Busan y no para Hong Kong. Su vuelo perdido sin noticias de él y ahora saber que él había sido un Gángster. Realmente su cerebro no daba para más.

—Estás sobre reaccionando. Él no luce como un Gangster en esta foto porque fue cuando él ya estaba enamorado.—Dijo el moreno frente a él viendo la fotografía en su mano a la cual JeonGguk también dirigí su mirada.—¿Un Gángster guapo, huh?—Preguntó viendo de manera soñadora aquella fotografía. De pronto se puso de pie y estiró su mano colocando la fotografía al lado del menor.—Como tú.—Dijo mientras veía la fotografía y después a JeonGguk, lo cual le molesto así que le dio un manotazo. Su boca se abrió ofendido y se sentó. 

—Gangster. Eres como tu padre. ¿Sabías que Min YoonGi fue el Gángster más famoso de la escuela en ese entonces? Y Park JiMin fue el único chico que fue capaz de enderezar su rumbo. Porque fue su gran amor.—JeonGguk soltó una risita al escuchar aquello.

—Su gran amor-...—Asintió el menor girando un poco viendo alrededor aquellas plantas que dividían el local de los andadores.—¿Quién te dijo eso?—Cuestionó volviendo su mirada a al moreno. 

—Mi tío.—Respondió dándose aires de grandeza. —¿Y quién es tu tío?—Preguntó curioso.

—Park JiMin. El gran amor de tu padre.—Por un momento, JeonGguk miró al moreno a los ojos sin hacer nada, entonces una furia recorrió su cuerpo sin saber porqué. Se impulse de su silla y se acercó a él estirando su brazo para tomar aquella fotografía y lanzarla a las plantas.

—Gran amor.—Escupió el menor en tono de fastidio poniéndose de pie. Sucelular empezó a sonar indicando una llamada entrante. Por un momento considero el no responder pues sus tíos no dejaban de llamarlo a cada momento por tonterías o decirle que esperara en casa.

—¡Eres muy amable!—Gritó el chico poniéndose de pie rápidamente y buscando la fotografía entre las plantas. 

 Con un suspiro sacó su celular del bolsillo viendo que era un número desconocido, así que respondió con esperanza de que fuera la aerolínea con noticias, buenas noticias.

—¿Hola?—Las palmas de las manos de JeonGguk empezaron a sudar. 

 "Señor Min JeonGguk. Hablamos de Asiana Airline, nos gustaría informarle las últimas noticias. El avión tuvo un aterrizaje de emergencia en Daegu." Escuchar "aterrizaje de emergencia" no era muy alentador.

—¿Aterrizaje de emergencia?—Al menos ahora sabía dónde estaba su padre o eso esperaba. Vio cómo el moreno prestó atención. 

 "Uhm, todavía se está haciendo la investigación. No tenemos noticias de posibles sobrevivientes. Pero sugiero que espere en nuestra para más información."

JeonGguk solo pensaba en lo estúpido que era aquel sujeto si creía que él se iba a quedar ahí esperando por noticias o que se dignaran a hacer algo. Pensaba buscar por su cuenta de ser necesario.

—Bien, gracias, gracias.—Dijo antes de cortar y ver como el moreno daba con la fotografía que antes buscaba. Seguido de eso frenó los pasos de JeonGguk poniéndose frente a él. 

 —Hey, hey, hey ¿Era la aerolínea, cierto?—El menor no quería hablar más con él.

—Aléjate.—El castaño empujo al mayor y emprendió su caminata sin estar seguro de a dónde se dirigía realmente.El chico a su espalda hizo algo de ruido y después se escucharon sus pasos muy cerca del menor.

—Voy contigo. Necesito ver a tu papá. Necesita ver a mi tío.—JeonGguk se detuvo y giró a verlo molesto por lo que acababa de decirle. 

 —¿En serio?—El rostro del moreno de pronto tomó un semblante triste y lo vio a los ojos.

Sus labios se volvieron una línea recta para después separarlos un poco y pasar su lengua por ellos humedeciéndolos.

—Tiene una enfermedad en el corazón. Está muriendo y cada día se debilita más.—JeonGguke no veía eso venir. Cualquier rastro de furia en él se esfumó y pasó a incredulidad. —Volvió a Corea hace pocos días, quiere morir aquí. Y mi misión es darle un final feliz antes de que muera.

El castaño soltó una risa sin humor y posó sus manos en su cadera viendo al moreno como si no creyera lo que acababa de escuchar.

—Otra vez ¿En serio? ¿Estás loco? ¿Quieres que mi mamá se me aparezca por qué ayudé a mi papá a volver con ese chico?—JeonGguk era egoísta al solo pensar en él. 

—Pero él no es solo "ese chico". Él es su gran amor.—Repitió nuevamente el moreno fastidiando por completo al menor.

—Él no es el gran amor de mi papá.—Susurró el menor a unos centímetros de la cara del moreno para después girar e irse de ese lugar. No le importo lo desolado que lucía el chico antes de abandonarlo ahí, solo quería saber que su padre estaba bien.

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—Guk, todos los vuelos están llenos.—Decía YuGyeom en su intento por retener al chico en la casa. 

 —Mark vamos.—Ordenó el castaño ignorando a YuGyeom. 

 —Guk, mi papá está de acuerdo con la Sra. Kim...—Dijo Mark. Entonces JeonGguk supo que estaba solo en eso.

—Sí. Escúchame Gukkie. Quédate aquí y espera por más noticias.—Decía la Sra. Kim intentando hacer que se quedará. Pero JeonGguk tomó de su pequeña maleta haciendo que la Sra. Kim la soltara y salió de la habitación sabiendo que tendría que hacer todo por su cuenta.

— ¡JeonGguk!—Gritaron sus amigos a su espalda cuando lo vieron desaparecer por el marco de la puerta. 

 —Sobre el avión...—Gritó Mark. 

 —¡Guk!—Vociferó en un ultimo intento YuGyeom.

Pero era muy tarde. Estaba decidido a llegar a Busan de cualquier manera. Su padre no había dejado ningún auto y realmente es que solo tenían un auto en casa por el hecho de que le había obsequiado uno y en sus alocadas fiestas lo estrelló contra un muro arruinando el motor.