Hey Quitate Enana

Capitulo 15 Popular arrogante

Ella me miro y rápidamente se volteo y comenzó a caminar mas rápido, la seguí y un carro rojo se detuvo a su lado y ella se subió, el carro comenzó a avanzar y yo trate de seguirlo pero no lo alcance.

Estoy muy cansada.
Yo también.
¿Pretendes asustarme?
No, pero solo a ti se te ocurre correr detrás de un carro.

Decidí irme a casa y encerrarme en mi habitación hasta que se llego la noche y baje encontrándome con  mi papa en la sala.

— ¿que tal tu día?— pregunto mi papa y recordé lo que paso en el parque.

Sera mejor que no diga nada, tal vez sólo fue mi imaginación.
No fue tu imaginación.
Si fue.

—bien.

—me alegra, mañana vendrá una compañera del trabajo, espero y no te moleste.

—no, esta bien además ¿por que me molestaría?

— tal vez por lo que paso con Mercedes.

— papa... Era una niña, ya crecí.

—¿y lo que paso con Regina?— oh Regina. ¿La recuerdas? Es a la que le tiraste los... ¡Si la recuerdo!

— fue difícil para mi superar.. Eso.

—¿entonces no hay ningún problema en que venga mañana a cenar—Guarde silencio y entro mi tía Georgina.

—¿de que hablan?

— de que mañana vendrá una compañera a cenar.— respondió mi papa.

¿como que una compañera? Squí no puede venir ninguna otra mujer— su tono era de enojo.

— ¿estas bien?— pregunte acercandome a ella.

—estoy bien— respondió rápidamente — pero ¿no te das cuenta de que tu padre ya quiere salir con otra mujer?

— tengo derecho a rehacer mi vida,— dijo mi papa— no se por que eso te incómoda.

—¡Me incomoda por que no puedes salir con otra mujer!— exclamo alterada.

—¿intentas rehacer tu vida con otra mujer?— mis ojos se aguaron.

—... Tengo el derecho de hacerlo.— corrí hacia las escaleras y me fui a mi habitación esperando a que se llegara el siguiente día.

*****

El celular comenzó a sonar y me desperté, lo apague y me levante, me bañe, me cambie, acomode mi cama y baje, tome un jugo y me cepille los dientes, recordé que me tocaba club y volví a subir, me coloque un short y la playera que me regalo Liliana, le mande un mensaje y ella dijo que se pondría la de ella y Layla dijo lo mismo, cogí el celular, los audífonos, las llaves y la mochila y espere a Layla y nos fuimos hasta el instituto.

El timbre sonó y todos comenzaron a meterse a los salones, me despedí de Layla y me fui con Liliana a la clase.

—ya me quiero ir— dije irritada.

—acabamos de llegar.

—aun así ya no aguanto.

—ni siquiera han empezado las clases.— dijo entre risas Liliana.

—¿y? — pregunte y ella me miro —Yo ya me aburrí.— comenzamos a reír y nos sentamos, seguimos hablando de cosas como ¿por que la escuela es tan aburrida? Y otras cosas hasta que alguien entro y todas las miradas se posaron en el. Era un chico castaño y todas lo miraban como si fuera un delicioso postre.

Comenzó a acercarse sonriendo hasta que se sentó frente a mi— hola preciosa tu debes de ser nueva, por que no te había visto.

—hola y digamos que algo así.— dije restándole importancia.

—¿como te llamas?— pregunto sonriendo ¿coquetamente?

—Yamileth... ¿Y tu?—Comenzó a reírse con soberbia.

—todos me conocen— oh miren, otro Callan pero en versión no tan chico malo.

Voltee a ver a Liliana y observe que estaba muy concentrada en ese chico.

—bueno, pues yo no te conozco— y no me interesa conocerte.

— soy Dustin, el mas popular de todo el instituto— dijo soberbiamente.— genial un popular arrogante.

En eso entro Callan y todas lo miraban como si fuera otro postre.

¿¡Enserio!? Ahora resulta.

—muevanse— dijo llegando hasta el lugar en el que estábamos. Dustin y Liliana se levantaron y se fueron a sus lugares, pero Liliana no paraba de ver a Dustin hasta que choco con la banca de alguien y todos comenzaron a reírse.

Idiotas.

—no tienes por que correr a las personas de esa manera— dije mirándolo.

— no tienen que estar en mi lugar— dijo enojado.

— eres demasiado insufrible.

— tus palabras no me hieren.

—idiota.

—gracias— el maestro entro y la clase comenzó.

*****

Al fin se llego la hora de ida y ví a Liliana hablando con Layla y me acerque a ellas.

— ¿de que hablan?

— de que Dustin ya regreso— dijo Liliana con un brillo especial en sus ojos.

—ah el popular arrogante y soberbio— susurré.

— ¿que dijiste?

—nada— sonreí, voltee y vi al popular arrogante, soberbio, presumido y prepotente con una de las asistontas de la zorra.

Creo que debo de dejar de ponerle apodos a las personas.
La vida no seria divertida sin apodos hacia las personas.
Buen punto.

—tengo que irme las veo mañana— dijo Liliana mientras se acomodaba la mochila.

—¿a donde vas?— preguntamos al unisono.

—tengo algo muy importante que hacer.— Liliana comenzó a caminar hasta chocar con Callan, comenzaron a hablar hasta que Liliana siguió caminando y se fue.

Comienzo a creer que esos dos no son primos y tienen algo.
¿Algo como que?
Ya sabes algo como algo...
Nah Liliana te lo hubiera dicho.

—bien, ¿nos vamos?

— claro solo guardare un libro —Layla asintió, Callan comenzó a acercarse hasta que su zorra apareció y lo abrazo y comenzó a comérselo.

Camine hasta mi casillero y metí el libro, lo cerré y vi a el pop... A Dustin.

—te llevo a tu casa— mas que una pregunta sonó como una orden.

— prefiero caminar.

— vamos, no es bueno que una chica tan linda ande sola por la calle.

—no voy sola y además yo preferiría estar sola y caminando.— comencé a caminar hacia donde estaba Layla esperándome.

—¿no te gusta la compañía?— preguntó acercándose. Me aleje y comencé a caminar hasta llegar con Layla y perderlo de vista.

—¿que paso?

— nada ya vámonos.

—pero ¿estas bien?

—si, ahora vámonos— comenzamos a caminar.



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En el texto hay: humor, romance, amor

Editado: 30.09.2020

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