Hey Quitate Enana

Capitulo 42 No me gusta Ryder

¿Por que no?

- claro.

Me despedí de el y me fui a casa. Me encerre en mi habitación y comencé a leer. Y el sueño no tardó mucho en apoderarse de mi.

»Mis ojos estaban cristalizados. Cada lágrima que recorría mi mejilla era el suficiente dolor. Sus ojos comenzaron a cerrarse lentamente hasta cerrarse por completo. Ya no podía mas. Lo estaba perdiendo todo.

- ¡NO! Despierta por favor.

Las palabras quedaban en el aire. Y un silencio se apoderó de todo. Lo único que se escuchaba eran mis sollozos.

- ¡Tu destruyes todo lo que tocas!

- ¡Eres una asesina!

- ¡Tu los mataste!

- ¡Asesina!

- ¡Deberías morir! «

Me desperté sudando. Cogí mi celular. Vi la hora. Eran las ocho de la noche.

Todo había sido una pesadilla. Una pesadilla. Solo una pesadilla. Nada mas que una pesadilla. Una pesadilla que parecía tan real.

Me levante. Puse a cargar mi celular. Me bañe, me coloque mi pijama y comencé a pensar en ese sueño. No quería perderlo. Mi padre era lo único que me quedaba. No soportaría perderlo. Nunca me lo perdonaría.

Días después

El despertador comenzó a sonar. Lo apague y me levante, tendi mi cama, me cambie, me peine y baje a desayunar.

Tome un jugo, me lave los dientes, volví a subir a mi habitación, cogí mi mochila, mis llaves, mis audífonos y mi celular, salí de casa y camine hacia el instituto.

Llegue y me encontré en la entrada a Callan besándo a una rubia plana y sin chiste. Después llego la rubia de la cafetería de la otra vez y comenzaron a discutir no se que cosa y la otra rubia que lo abrazaba se separo de Callan y se fue mientras que la otra rubia se quedo y abrazo a Callan y el la alejo.

Todo un dilema con las rubias.

Respire profundamente. Ya no me sorprendía ver a Callan besándose con cualquier rubia o cualquier chica. Liliana apareció en esos instantes frente a mi.

Debo dejar de decir rubias
Valla que debes
Estaba tan feliz sin ti
Ah ¿si..? Rubias
No funcionara no diré rubias
Lo acabas de decir
Mierda.

Liliana y yo nos fuimos al salón. Se sentó en su lugar y yo me senté en el mio. La maestra aun no llegaba. Mi celular comenzó a sonar. Era el mismo numero de las veces anteriores. El numero desconocido. Me tense y rechace la llamada, apague el celular y lo guarde. Debía tranquilizarme. Minutos después Callan entro y se sentó a mi lado y no dijo nada.

*****

Las clases terminaron. Me fui a casa. Deje mi mochila sobre el sofa. Había quedado con Liliana para ir al cine. Así que volví a coger mi celular. Mis llaves y mis audífonos y un poco de dinero y salí mientras le colocaba los audífonos a mi celular.

Aveces solo desearía que el mundo dejara de girar. Que el tiempo se congelara. O que simplemente pasara lo mas rápido posible.

Me coloque los audífonos y levante la vista. Jason se estaba besando con la hermana de Liliana. Últimamente ya todo me parecía tan normal. Voltee hacia otro lado y seguí mi camino.

Tal vez me hubiera dolido antes pero Jason dejo de importarme desde hace tiempo.

Llegue al centro comercial en donde Liliana me estaba esperando. Me acerque a ella y nos dirigimos a comprar los boletos para ver un espía y medio. Compramos los boletos, las palomitas y los refrescos y entramos. Estuvimos riendo durante toda la película y las personas que estaba detrás de nosotras nos pedían que nos callaramos y valla que hacíamos un esfuerzo. Estábamos tan entretenidas hasta que nos sacaron del cine.

- ni que quisiéramos volver a ese apestoso cine- dije mientras Caminábamos por el centro comercial.

- si. No queremos volver. Ni estaba tan buena la película - nos miramos y nos echamos a reír.

Seguimos caminando por el centro comercial mientras hablábamos de tonterías. Entramos a una tienda de ropa y Liliana se metió a los probadores a probarse muchas cosas. Me senté en una banca para esperarla ya que supuse que tardaría mucho y no me equivoque. Baje mi mirada observando el suelo y los recuerdos no tardaron en invadirme.

Flashback

Me termine de colocar el vestido azul pastel que mi papa me había comprado para mi fiesta de cumpleaños. Me mire en el espejo y sonreí. Era feliz. A pesar de todo yo era feliz.

Baje corriendo esperando ver a todos mis "Amigos" pero no había nadie. Pensé que llegarían mas tarde. Pero no fue así. Nadie llego. Mi cumpleaños numero ocho la pase sola. Llore toda la tarde.

Al siguiente día llegue a la escuela y me dirigí a mis "Amigos"

-¿por que nadie fue a mi fiesta?- estaba decepcionada los consideraba mis "Amigos" y no fueron a pesar de que me habían prometido que irían.

- por que nosotros no vamos a fiestas de asesinas.

Fin del y flashback

Desde ese día no quise volver a celebrar mi cumpleaños. Aunque había otra razón por la cual odiaba mi cumpleaños. Y lo peor de todo era que mi cumpleaños se acercaba.

- Yamileth, Yamileth, Yamileth- salí de mis pensamientos y ví a Liliana frente a mi. - ¿estas bien?

- si. ¿Por que no debería de estarlo?

- por que te quedaste callada por unos minutos y tengo diciéndote que te pruebes esta blusa pero no me haces caso. Y tus ojos están..- me limpie inmediatamente los ojos y las mejillas.

Cogí la blusa y la observe. Era una blusa blanca de encaje que llegaba por encina del ombligo. Entre al probador, me la coloque y salí para que Liliana me viera, ella sonrió y me dijo que estaba genial. Regrese al probador y me la quite. Me volví a colocar mi playera de Dolph ziggler. Salí y le entregue la blusa.

Liliana compro muchas blusas y después me entrego una bolsa en la que venia la blusa blanca que me acababa de probar.

- gracias. Pero no debiste - dije volviendo a guardar la blusa en la bolsa.

- hay no es nada. Además se te veía genial. Esa blusa estaba destinada para ti.



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En el texto hay: humor, romance, amor

Editado: 30.09.2020

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