Capitulo 43 Intento de suicidio

Me fui de ahí inmediatamente. No podía creer que Layla pensara eso. Me había tratado como la peor de las amigas cuando ella era mucho peor. Y se decía llamar mi amiga.

Llegue a casa furiosa y me encerré en mi habitación. No podía creerlo. Cogí los tintes y la funda que me había regalado, me dirigí al baño y los tire a la basura. Busque la blusa que decía friends y la medalla que decía forever. Rompí la blusa hasta mas no poder. No quería tener ningún recuerdo de lo que alguna vez dijo ser y mucho menos del recuerdo de lo que alguna vez fuimos. Termine de romper la blusa y la tire al suelo. Rompí la medalla y la deje caer encima de la blusa.

Se decía llamar mi amiga cuando en realidad no lo era. Nunca lo fue. Esas voces tenían razón. Los amigos no existe son solo un relleno a tu soledad. Yo no merecía tener amigos. Viviría toda mi vida sola y sin nada ni nadie. No podía decir que lo estaba perdiendo todo por que en realidad nunca tuve nada.

Mis ojos se cristalizaron y unas cuantas lágrimas comenzaron a recorrer mis mejillas. Me deje caer sobre el piso y no detuve las lágrimas. Durante mucho tiempo llorar era lo que me hacia estar bien.

¿Por que me pasa esto a mi? ¿Hasta cuando voy a seguir sufriendo? ¿Hasta cuando terminara esto? ¿Cuanto tiempo mas va a seguir atormentandome el pasado? Esas preguntas siempre estaban en mi cabeza. Pero nunca obtenía una respuesta.

Nunca debí pensar que podría olvidar el pasado. Al final de cuentas sera algo que siempre me perseguirá. Algo que nunca me dejara en paz. Algo que me seguirá por siempre. Algo que nunca me dejara descansar. Algo que me atormentara de por vida.

Abrí el cajón del mueble de al lado y encontré un pequeño cutter.

Flashback

De nada servía vivir tarde o temprano todo acabaría y si la mejor manera de acabar con todo seria haciéndolo yo misma. Era claro que acabaría con mi dolor.

Cogí la navaja. Mis manos temblaban. Lágrimas recorrían mis mejillas. Las palabras retumbaban en mis oídos y mi cabeza. Las burlas se hacían presentes. Los gritos me inundaban. Mi vida pasaba frente a mis ojos.

Entre al baño. Mis manos temblaban cada vez mas. Acerque la navaja a mi muñeca. No podía mas. Ya no soportaba eso. Ya no aguantaba. Quería acabar con todo. Quería dejar de sufrir. Dejar de llorar. Dejar de vivir.

Termine de acercar la navaja y presione poco a poco hasta dar una fuerte presión.

—¡Yamileth!

Tire la navaja y ella me abrazo, me deje caer sobre el suelo y ella también lo hizo, yo lloraba y ella lloraba.

No lo hice. No termine con mi vida. Y eso fue lo que mas me dolió.

Fin del flashback

Si ella pudiera estar aquí. Mi vida seria diferente. Pero siempre he perdido a las personas que me rodean. A las personas buenas. Y Ana era una de ellas.

Acerque el cutter a mi muñeca sin hacer presión.

Toda mi vida he estado sola. No tengo a nadie. No tengo amigos. Mi familia no me quiere. Mi papa se va a volver a casar. Ya no soy feliz.

¿Les darás el gusto de verte muerta?
Ya no hay nada que pueda hacer.
No les des ese gusto. Es lo que ellos quieren.

Mi conciencia al fin me decía algo coherente. Pero la vida acabara tarde o temprano. Todos moriremos. Todos estamos aquí con el objetivo de sufrir.

Cerré los ojos fuertemente mientras todos los recuerdos venían a mi cabeza. Todos aquellos recuerdos que me hicieron derramar lágrimas. Todos aquellos recuerdos que me hicieron sufrir.

¿Por que me paso eso a mi? ¿Por que no solo podía borrar el pasado? ¿Hasta cuando seguiría eso? Esas preguntas seguían inundando mi cabeza.

No quería seguir. No quería vivir. No podía seguir. No podía vivir. No podía aguantar eso. Ya no lo soportaba. Necesitaba acabar con todo.

Un fuerte dolor apareció en mi estómago. Presione el cutter sobre mi muñeca y recorrí lentamente. El maldito dolor en mi estomago se hacia cada vez mas fuerte ¿por que? Pensé que yo misma me estaba inventando ese dolor. Seguí presionando y recorriendo lentamente hasta llegar a la vena y la sangre comenzó a salir por mi muñeca hasta caer al piso. En ese instante la puerta se abrió.

—oye que te parece... ¡Yamileth—corrio hacia a mi y solté el cutter—¿¡Que hiciste!? ¡Augusto!—su voz se escuchaba preocupada.— ¡Augusto ven rápido!—¿por que se preocupaba por mi?

— ¿que pasa?—pregunto desde afuera. Entro a la habitación e inmediatamente corrió hacia nosotras —¿¡Que hiciste!? ¡NO! ¡NO!—el dolor en mi estómago cada vez era mas fuerte. Comenzaba a sentirme muy débil — ¡Llama a una ambulancia! Tranquila hija todo va a estar bien.

Comenzaba a sentirme cada vez mas débil. Después todo comenzó a volverse obscuro.

*****

Comencé a abrir los ojos lentamente. Parpadee varias veces gracias a la luz. Termine de abrir los ojos. Estaba en un lugar completamente blanco. Un sonido se emitía, voltee y vi un aparato al cual estaba conectada. Regrese mi vista y vi a Regina sentada en una silla de la cual inmediatamente se levanto y se acerco a mi.

— despertaste. Iré a avisarle a tu papa.—se alejo y salió la habitación.

¿Donde estaba? ¿Que había pasado? ¿Por que no recordaba lo que había pasado?

Intente hacer memoria pero no recordaba nada.

Regina volvió a entrar con mi papa y un señor que traía una bata blanca.

— ¿como te sientes?— preguntó colocando algo liquido en una bolsa que estaba al lado del aparato al cual estaba conectada.

—bien. ¿Que fue lo que paso? ¿Donde estoy?

—estas en el hospital. Intentaste suicidarte. Tienes una cortada en tu vena que ya fue sanada. Y al parecer consumiste algún veneno que fue directo a tu estomago —¿veneno? ¿De que hablaba? ¿Que veneno?

El doctor termino de colocar el liquido que al parecer era suero y se retiro de la habitación seguido de mi papa.

—¿estas mejor?—pregunto Regina.

—eso creo. —comencé a recordar todo. Guarde silencio mientras asimilaba todo— ¿por que me ayudaste?—la respuesta le llego por sorpresa y no dijo nada. —Regina... ¿Por que me ayudaste?