Hey'carmen

Nueve

Tomé mi café tranquila todavía me sentía triste pero estaba mejor o al menos eso creó. Tobias me bloqueo todas las redes sociales, Lewis Felton me llamó durante toda la noche y la mitad de la mañana. Sólo éramos Tolú y yo él estaba acostado acurrucado en él sofá prendí él parlante y puse música.

dua lipa don't start now

—Voy a cantar qué se pudran—dije en voz alta, empecé a fijarme la comida.

Espagueti con salsa. Apague la salsa y cole los fideos.

—¡Carmen!—golpearon la puerta.

Era la voz de un hombre limpie mis manos y bajé un poco él volúmen.

—¿Señor Felton?—preguntó incrédula,—¿Qué hace aquí?—lo observé, él estaba rojo.

Tomé un trapo y seque mis manos.

—Quiero hablar contigo. ¿Puedo pasar?.—respondió cabizbajo.

Pasó y se quedó parado mirándome fijamente. Tolú se acercó a él.

—Claro Felton.—contestó cortante.

Miré mi móvil y le mande un mensaje a Megan. Lo deje a un costado y me crucé de brazos.

—Carmen quiero disculparme fue muy grosero y estúpido. Te necesito en él buffet no voy a encontrar a nadie cómo tú tan eficiente, inteligente, amable cómo tú.

Estaba sonrojado Lewis Felton rojo suplicandole a una mujer. Jamás lo había visto tan desesperado.

—Tengo varias ofertas de trabajo y pagan más qué usted. Sin contar qué son caballeros y agradecidos. ¿Qué propone usted?—respondí, sabía qué era mentira estoy tan desesperada.

Él suspiro.

—Te daré un aumento del triple porciento, un auto nuevo incluso un departamento en Manhattan para estar cerca del trabajo. Sólo te quiero a ti, dos días sin ti y ya me siento un tonto. No puedo no ver tú sonrisa exagerada, tú café qué haces qué parezca bebida de Dios.

Jamás lo había visto tan ¿triste?. No sólo es mi cabeza jugandome una puta broma.

—Está bien, volveré... Pero con una condición un almuerzo de paz.—respondí sonriente.

Él me sonríe.


—Está bién. Pero soy exigente en especial cuando se trata de pasta.

 

¿Sera verdad lo qué dicen de Lewis Felton, yo le gusto?. ¿ Sentirá algo por mi?.


—Claro Lewis.—lo guiño.

El suspiró y me miro.

—Es la primera vez qué me llamas por mi nombre. Es tan bonito escucharlo salir se tú boca.

Tomé dos platos y lo miré.

—Parece qué estás coqueteandome Lewis. ¿O sólo es mi imaginación?.—pregunto tomando una botella de vino.—Vamos sólo bromeo.

Estába sonrojandose.

—¿Estaria mal si lo hiciera?—se acercó a mi boca.

 



#21822 en Otros
#3325 en Humor
#8523 en Joven Adulto

En el texto hay: humor romence jefe

Editado: 05.03.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.