Capitulo dos.

Al otro día desperté un poco antes de que sonara mi alarma ya que no podía seguir durmiendo, así que como tenía tiempo de sobra decidí prepararme la bañera para darme un largo baño. Después de terminar mi rutina de la mañana baje a desayunar, pero extrañamente solo encontré a mamá y a Derek desayunando.

- ¿Y papá? - Pregunto.

- Lo llamaron urgente de la oficina cariño, no alcanzo a desayunar con nosotros pero me pidió decirles que los quiere mucho y que se cuiden camino a la escuela - Dice mamá.

- Oh, está bien. Vamos a llegar tarde si no salimos ahora, Te quiero - Le digo a mi madre para luego salir de la cocina con Derek en busca de nuestras mochilas y los cascos.

El día en la escuela pasa rápido y sin novedades, con Rachel nos la pasamos juntas todo el día hablando de moda, porristas, etc. La mayoría de los profesores ya nos dejaron tareas para la próxima semana, y como esta escuela va un poco más adelantada que la antigua mía, quedamos de juntarnos mañana para hacer las tareas entre Rachel, Adam, Derek y yo.

- Hola mamá - Hablo entrando a la casa -. ¿Qué hay de cenar?

- Hola chicos, su padre preparó su famoso pastel de papa - Dice.

- Mmm... Que delicia - Dice Derek.

- Ya está casi listo así que vayan a dejar las mochilas y vuelven para poner la mesa- Dice papá saliendo de la cocina.

Después de dejar las mochilas y poner la mesa nos sentamos todos a cenar.

- Madre, mañana yo y Derek vamos a llegar tarde porque vamos a hacer la tarea con mi amiga y Adam en casa de Rachel - Aviso.

- Está bien, pero lleguen antes de las nueve - Dice.

- Gracias mamá - Dice mi hermano.

- Bueno yo me voy a descansar, la cena estaba muy rica - Digo y me levanto camino a mi cuarto.

- Oye brujita - Escucho que dice Derek detrás de mí cuando ya voy subiendo las escaleras.

- Ya quisiera ser una bruja para convertirte en sapo - Respondo riendo.

- Si si, que graciosa - Responde serio.

- Era una broma, no seas gruñón - Digo.

- Ya, ¿Te puedo preguntar algo? - Pregunta.

- Lo acabas de hacer - Respondo mientras río, pero él no se ríe así que prefiero tomarme en serio esto -. Pero claro puedes hacer otra ahora.

- Mmm.. ya pero que sea en un lugar más privado - Dice y empieza a caminar a mi cuarto mientras lo sigo.

- Bueno, creo que esto se puede considerar un lugar privado ¿Qué era lo que necesitas preguntarme? - Hablo mientras me tiro a mi cama y espero que él se siente.

- ¿Cómo supiste que Rachel me atrae? Digo, estoy seguro que no lo demostré en ningún momento - Pregunta.

- Primero que nada hermano no eres tan bueno disimulando, además soy tu hermana y te conozco, diría que cuando se ofreció a llevarnos a la oficina del director tu respondiste un rápido y entusiasta que si, cualquiera diría que fue solo porque estabas muy perdido pero me di cuenta de cómo la miraste - Respondo mintiendo.

- ¿Segura que fue por eso y que no aprendiste un poder nuevo del que debería estar enterado? - Pregunta y yo no puedo mentirle, siempre nos hemos contado todo.

- Está bien, mi respuesta anterior la acabo de inventar, no soy buena leyendo el lenguaje corporal de la gente - Me río.

- ¿Entonces?

- Resulta que ahora puedo leer la mente cuando me concentro - Respondo.

- Haber, ¿En qué número estoy pensando ahora? - Pregunta.

- Emm.. 3 - Digo.

- ¿Y ahora?

- Piensas en el 33 - Replicó.

- ¿Ahora? - Cuestiona.

- 333, ¿Enserio? ¿No conoces otro número que no sea el 3? - Respondo riendo y esta vez él se ríe conmigo.

- ¿Algún otro poder del que debería estar enterado? - Interroga.

- Hay otro pero aun no lo domino bien, lo voy a intentar - Digo.

- Ok...¿Y de qué trata este poder? - Pregunta.

- De esto - Respondo en su mente -. ¿Me escuchas?

Derek asiente con la cabeza y le vuelvo a hablar pero esta vez fuera de su cabeza - Genial ¿No? - Pregunto.

- ¿Genial? - Pregunta un tanto enojado y yo bajó la cabeza -. ¡Esto está super! ¿¡Cómo es que no me habías contado!?

- Me asustaste tonto - Respondo pegándole en el brazo.

Después de un rato hablando con Derek, se va a su cuarto y yo me pongo la pijama y me duermo.

...

Estoy en el bosque de noche y escucho voces pero no distingo qué es lo que dicen hasta que me acerco más y terminó en un pequeño claro rodeado de muchos árboles y sombras.

- No eres lo suficiente - Dice una de las voces en la oscuridad a mi derecha.

- Ni tu verdadera madre te quiso - Dice otra.

- ¿Quiénes son? - Pregunto un tanto asustada y a la vez triste.

- Nadie te va a querer, eres una fracasada - Hablan del otro lado.

- Eres una inútil - Siguen hablando.

- No sirves para nada - Escucho que dice la primera voz.

Empiezo a sentirme muy enojada, no pueden decirme así personas que no conozco.

- Salgan de ahí por una buena vez - Grito.

- Si tu lo quieres, cariño - Dicen todos al mismo tiempo y veo que salen personas que no conozco pero se me hacen muy familiares.

- ¿Quiénes son? - Pregunto mientras absorbo el agua de la tierra para poder pelear.

- Somos tus ancestros - Contesta uno.

- Niña tonta, el agua no te servirá para pelear, tienes que sacar tu fuego interno - Habla una mujer.

- Si son mis ancestros ¿Por qué me decían todas esas cosas hirientes? - Pregunto.

- Que seamos tus ancestros no significa que te queramos, niña estúpida - Responde un anciano.

- ¿Entonces qué hacen aquí? - Interrogo.

- Porque tienes que sacar tu fuego - Responde uno.

- ¡Saca tu fuego! - Grita otro.

- ¡Que saques tu fuego te han dicho! - Empiezan a gritar y yo me empiezo a concentrar para encender mis manos.

- Listo, ¡¿Están felices?! - Grito.

- No ese fuego niña estúpida, saca tu fuego verdadero - Vuelve a hablar el anciano.