Amanecía la mañana siguiente a hacer el amor. MC y yo estábamos sentados juntos, viendo salir el sol. Acababa de contarle mi pasado y mi primer encuentro con Lord Nobunaga.
(Nunca pensé que sería capaz de contarle estas cosas a alguien. Pero fue más fácil de lo que pensaba)
Hablar con MC era tan cómodo como una conversación conmigo mismo. Acurrucada en mi regazo, escuchaba en silencio.
HIDEYOSHI- Yo había muerto una vez, y fue Lord Nobunaga quien me devolvió a la vida. Por eso decidí dedicarle mi nueva vida. Haría lo que fuera necesario para hacer realidad su ambición.
MC- Ahora lo entiendo.
HIDEYOSHI- Pero nada está saliendo como lo había planeado. Mira lo que estuve a punto de hacer.
No podía olvidar la batalla de ayer y a los campesinos que habían sido conducidos para ser masacrados. Débiles. Asustados. Indefensos. Cuando vi sus caras, fue como verme en un espejo.
HIDEYOSHI- Yo quería un mundo en el que nadie tuviera que ver jodida su vida sólo por haber nacido así. Sin embargo, estuve a punto de matar a un montón de gente manipulada por su "baja" condición.
(Creo que nunca hubiera superado la culpa y el arrepentimiento que sentiría)
HIDEYOSHI- Si no hubiera conocido a Lord Nobunaga, podría haber estado allí en esa batalla del otro lado. Y si no hubieras estado allí, si no me hubieras detenido, yo...
(MC me salvó de nuevo)
HIDEYOSHI- Pasé tanto tiempo regañándote anoche que olvidé decirte lo agradecido que estoy por lo que hiciste.
Envolviéndola con mis brazos, la abracé con más fuerza.
HIDEYOSHI- Gracias.
(Mis palabras favoritas. Ahora, no me parecen suficientes)
MC se dio la vuelta y puso una suave y delicada mano en mi mejilla.
MC- Aww. Pero en realidad, lo hice por mis propias razones. Uno, no quería que murieras. Dos, no quería ver como esos idiotas arruinaban tu sueño. Y ahí, lo más importante, sólo quería verte.
HIDEYOSHI- ¿Lo hiciste...?
MC- ¡Lo suficiente como para superar mi miedo a correr hacia un campo de batalla!
(¿Acaba de decirme MC que su principal motivo fui yo?)
Sonrió, y ni siquiera el sol de la mañana podía compararse a ella en luz o belleza.
MC- Gracias por contarme todo lo que hiciste. Ahora estoy aún más enamorado de ti.
HIDEYOSHI- Espera un momento. ¿Seguro que estabas escuchando lo que dije? Salí de esa historia sonando fatal.
MC- ¿Eh? ¡Sonabas genial!
HIDEYOSHI- Yo, eh, eh, ¿qué estás diciendo?
(Le cuento el peor momento de mi vida, ¿y eso es lo que piensa?)
Quería discutir, luchar contra el bochornoso calor de sus cumplidos en mis mejillas. Pero su serena seguridad rompió algo en mi interior.
MC- Hideyoshi, has tenido que luchar por todo lo que tenías. Pero lo has conseguido. Mírate. Empezaste como portador de sandalias y ahora eres la mano derecha de Nobunaga Oda. Tus hombres confían en ti, tienes como cien ex muy dulces... lo que realmente me molestaría si fuera cualquier otra persona. Como sea, el punto es que te amo como eres. Y amo quien eras. ¡Te quiero!
HIDEYOSHI- Simplemente no puedo competir contigo, MC.
(Me está halagando, y ese tipo de cosas no son fáciles de oír para mí)
No pasó un día sin que recordara de dónde venía y cómo veía el resto del mundo a mi gente, a mi clase. Pero no me sentía mal por mi origen cuando MC se reía conmigo. Cuando MC sonreía, no me angustiaba por las malas decisiones que había tomado.
(Nunca oculta lo que siente, a menudo es imprudente, pero siempre lo respalda con esa increíble fuerza interior. Ni siquiera había soñado que existiera alguien como ella. Mucho menos que sería yo quien la encontraría)
HIDEYOSHI- Eres la mujer más increíble que he conocido.
MC- ¿Yo? ¡Estábamos hablando de ti! Oh, ya lo pillo. ¡Esta es tu adulación patentada! Bueno, no hace falta que me ganes, ya estoy ganada.
HIDEYOSHI- No seas tímido. Deja que lo diga yo.
Dulcemente, empezó a apartar la mirada. Sosteniendo sus cálidas mejillas entre mis manos, apreté mi frente contra la suya.
HIDEYOSHI- No estoy seguro de que lo sepas, pero me has salvado una y otra vez.
MC- ¿Como aquella vez que recibí un puñetazo por ti? Oh, espera, ¡eras tú! ¡Estás siendo tonto, Hideyoshi!
HIDEYOSHI- ¡Eso mismo! Eso es exactamente de lo que estoy hablando.
MC- No lo entiendo.
HIDEYOSHI- Dejo que muchas cosas me afecten. Pero tú vienes y, con una sonrisa o una broma, haces que las cosas vuelvan a brillar. Y creo que ni siquiera te das cuenta de que lo haces.
(Conocerte fue una de las mejores sorpresas de mi vida. Puede que la vida merezca la pena aunque sólo sea para seguir sorprendiéndome)
HIDEYOSHI- Solo otra persona ha cambiado mi vida de forma tan positiva.
MC- Un momento, Hideyoshi, no me estarás clasificando con Nobunaga, ¿verdad? ¡No digas eso! ¡Puedo oír los gritos de los fans de Nobunaga por todo Japón en este mismo momento!
HIDEYOSHI- ¿A quién le importa lo que piensen? Es lo que yo pienso de ti.
MC- Entonces, deberías saber que tú también me has salvado, Hideyoshi. Cuando llegué, odiaba este lugar. Tenía miedo y pensaba que todo era horrible. Pero encontré muchas cosas y mucha gente que me gustaba, y todo eso ocurrió porque tú estabas a mi lado.
HIDEYOSHI- ¿Yo hice eso?
MC- La razón por la que soy capaz de reír y bromear así es gracias a ti.
(En todo este tiempo nunca supe la influencia que tuve en su vida)