DRAMATIC ROUTE - CAPITULO 11 (1-5)

HIDEYOSHI- No puede ser...

Kyubei solemnemente pasó el haori a Hideyoshi, quien lo miró fijamente.

HIDEYOSHI- ¿Lord...Nobunaga...?

(¿Qué le ha pasado a Nobunaga? ¿No puede estar muerto...? ¡No puede estarlo!)

Tomé la mano de Hideyoshi, sintiendo como si el mundo se hubiera derrumbado a nuestro alrededor. El susurro de Hideyoshi apenas escapó de su garganta.

HIDEYOSHI- ...esto no es posible. No puede. No puede dejarme. Esto no puede estar pasando...

(Hideyoshi. ¿Qué hago? ¿Qué digo?)

No hubo palabras. Hideyoshi miró fijamente al haori que tenía en sus manos como si pudiese llamar a su dueño. Pero todo lo que llegó fue un viento helado que anunciaba la noche, y un temor tácito.

...........

La noche llegó rápidamente. No es que el sol nos hubiera dado calor al final del día. El primer paso fue acampar para que los hombres pudieran descansar. Hideyoshi supervisaba todo con gran eficiencia.

(Todo lo que cada uno de nosotros puede hacer ahora mismo es concentrarse en sus tareas actuales.)

Para mí, eso era asegurarme de que los heridos de la unidad de Nobunaga fueran tratados y alimentados.

MASAMUNE- ¡MC! Me alegro de verte.

MC- ¡Masamune! ¡Estás aquí!

Masamune entró en el campamento, liderando su ejército con él. Desmontando de su caballo, se me acercó primero.

MASAMUNE- Recibí el mensaje sobre Nobunaga. ¿Dónde está Hideyoshi?

MC- En la tienda más lejana. Dijo que necesitaba discutir qué hacer a continuación.

MASAMUNE- Veo que no estás con él.

MC- Quiero estar con él, pero casi siento que me interpondría en su camino...

MASAMUNE- No. Sé lo que está sintiendo. Ahora mismo, va a necesitar de la gente. Hideyoshi está en un infierno ahora mismo. Vamos a necesitar a todo el mundo, haciendo todo lo que podamos, para sacarlo de ahí.

(¿Masamune? Debes estar hablando por experiencia.)

Seguí a Masamune hasta la parte trasera del campamento, donde encontramos a Hideyoshi.

MASAMUNE- Siento haber tardado tanto en llegar, Hideyoshi.

HIDEYOSHI- Es bueno que vinieras, Masamune.

Hideyoshi estaba sentado, hablando con un subordinado. Nos vio a Masamune y a mí en cuanto entramos. No estaba seguro en qué estado esperaba encontrarlo, pero me pareció normal. Al menos, parecía normal por fuera.

MASAMUNE- Tengo una idea general de lo que está pasando, pero quiero oírlo de ti.

HIDEYOSHI- Lord Nobunaga ha... desaparecido.

MASAMUNE- Sí.

Masamune mantuvo sus respuestas cortas, animando a Hideyoshi a decir más, como para ayudar a medir el humor de Hideyoshi.

HIDEYOSHI- He explorado lo que quedaba del campamento principal. Fue destruido. Quienquiera que lo haya atacado se ha ido. No había nada cuando llegamos, excepto lo que quedaba de la retaguardia. Los hemos acogido. Interrogué a todos los que pude. Todos dieron respuestas similares. Un ejército, vestido todo de negro, atacó. En algún punto del caos, perdieron de vista a Lord Nobunaga.

MASAMUNE- ¿Cuán probable crees que sea que el ejército pertenezca a la mente maestra que Mitsuhide estaba buscando? Kennyo, ¿cierto?

HIDEYOSHI- Es Kennyo. No hay duda de ello. Un guardia informó que un hombre gritaba- Esta es la ira del Lord Kennyo.

MASAMUNE- Eso lo deja claro.

MC- Acabábamos de descubrirlo. Estábamos tan cerca de él.

(Ahora, Nobunaga está en manos de Kennyo.)

Mi estómago estaba en un nudo de frustración. Me sentí casi enferma.

MASAMUNE- Nos han estado observando durante un tiempo, supongo. Debieron saber que dividiríamos nuestras fuerzas para enfrentarnos a Kenshin y Shingen. Así que esperaron a tomar a Nobunaga cuando sus defensas estaban más débiles.

HIDEYOSHI- El objetivo de Kennyo es innegablemente la venganza contra Lord Nobunaga.

(A estas alturas, Nobunaga ya estará...)

Sellé ese horrible pensamiento.

(No podemos apresurarnos a sacar conclusiones. Hay un número de factores a considerar primero.)

HIDEYOSHI- Ieyasu y Mitsunari deberían estar de camino hacia aquí. Espero que lleguen mañana. Masamune, me alivia que estés aquí. Te confío todo a ti.

Con una breve mirada en la dirección de Masamune, Hideyoshi se puso en pie.

MC- Hideyoshi, ¿adónde vas?

No me contestó. Caminó hacia la entrada de la tienda.

MASAMUNE- Espera, Hideyoshi.

Masamune agarró a Hideyoshi por el brazo mientras intentaba pasarnos.

HIDEYOSHI- ¿Qué pasa?

MASAMUNE- Vas a salir a mitad de la noche a buscarlo, ¿no?

HIDEYOSHI- ¿Y qué si lo hago?

(¡Eso es demasiado peligroso!)

MC- Hideyoshi, sé que quieres encontrarlo. Yo también, pero está muy oscuro para encontrar a alguien. ¡Kennyo pudo haber dejado hombres, trampas, cualquier cosa! Es más seguro esperar hasta la mañana.

HIDEYOSHI- No puedo. Es imposible.

(Sé que es difícil esperar en esta situación, pero ¿imposible?)

MC- Hideyoshi, buscar en la oscuridad es imposible. ¿Y cuándo fue la última vez que descansaste?

HIDEYOSHI- No puedo relajarme, no puedo descansar, y no puedo dormir hasta que vuelva a ver a Lord Nobunaga.

Ahora estaba claro que la calma que había mostrado exteriormente no se parecía en nada a lo que sentía por dentro. Pero ese dolor finalmente se filtró, mostrándose en su atormentada expresión.