Hija de dos mundos

Capítulo 8: "insomnio"

Estuve toda la noche pensando en todo lo que me estaba pasando, antes no había tenido la oportunidad de procesar todos estos cambios, pero ahora me doy cuenta que son demasiado importantes para mí, que no es un simple cambio, es más que eso, es un cambio de vida, de planeta, de cuerpo, de cultura, de lenguaje, de comidas, de todo, todo estaba cambiando y no había tenido la oportunidad de comprenderlo hasta ahora.  

Era increíble como todo eso que en un inicio parecía tan irreal, tan lejano y tan fácil se hubiera volcado y de la nada se volvió real, se volvió difícil y se volvió el hoy, todo cambio tan rápido y sin darme cuenta se volvió mi presente y mi futuro, se volvió mi hoy y mi mañana, se volvió lo que soy y lo que seré, se volvió mi ahora y mi vida, todo lo irreal que parecía pasó a ser parte de la existencia misma. Está es la vida que llevo ahora, es muy distinta a la que llevaba, tiene tantas cosas novedosas y curiosas que me cuesta creer que esto es real, me cuesta pensar que tendré que partir de cero conociendo este lugar, me cuesta imaginar cual es mi propósito aquí y me cuesta creer que esto es lo que soy.  

Aquí me doy cuenta de tantas cosas y realmente tengo miedo, de no adaptarme, de cambiar, de aceptar, de lo que seré y de lo que jamás fui. No soy quién creía y que esa vida que llevaba, esa vida humana tan humana como la que creía ser, era solo una ilusión, una de esas que parecen tan reales, pero se desmoronan con un simple soplido, de un día a otro eso que llamaba vida cambio y se volvió confusa e irreal, con cosas que siempre creí como un invento de los escritores, pero no era así, no creía posible que todo eso existiera, hasta me hizo pensar que más de todas esas creaciones eran verdades, porque simplemente acepte todo esto sin cuestionar, me imagine tantas cosas que solo aquí podrían ser posibles y no le di importancia a la vida que llevaba, simplemente acepte este cambio, porque que jamás pasó por mi mente que sería más difícil de lo que había imaginado.  

Y toda esta nueva vida, es distinta. Tendré que acostumbrarme a eso, porque ya nada será como antes. La vida es una de esas cosas que jamás he logrado comprender, pero sea cual sea el giro que esta dé he aprendido a aceptarlo, es lo que he intentado hacer desde que todo se volvió confuso, solo lo aceptaba, pero ahora me doy cuenta que eso aún no está resuelto, aún me faltan cosas que aprender, aún hay vacíos que necesito llenar y preguntas que necesito responder, falta mucho aún para aceptar todo lo que está pasando y hasta ese entonces tendré que lidiar con todos estos cambios.  

En la Tierra, toda mi vida, hice las cosas por mi cuenta, yo me conseguí trabajo, yo aprendí a cocinar, yo compré mis cosas, no necesitaba a nadie más que a mí, yo aprendí todo lo que sé y siempre ha sido así, pero aquí no me siento capaz de aprender todo sobre este mundo, siento que sobrepasa mis límites. En la tierra todo era más simple, conocía el idioma y ya con eso podía conocer, aprender y leer, pero aquí es mucho más que eso, aquí no me basta con conocer el idioma, no me basta con saber sus nombres, no me basta con conocer el planeta, aquí todo se ve más complejo y se me imagina que más allá de todo eso que mencione hay muchas cosas más que desconozco.  

En la tierra mis padres eran eso y nada más, jamás los necesite ni los extrañe, yo ya sabía todo lo necesario para subsistir, pero acá, acá ellos vivían, acá los necesito, acá me di cuenta que todo lo que sé no me sirve y todo lo que tengo que saber es demasiado, necesito ese apoyo incondicional para salir adelante, pero no están aquí.  

Antes estaba ansiosa de conocer todo lo que me esperaba en Oxul, quería saber cómo era, lo que tenía, su gente, quería ver si era tan increíble ese futuro galáctico que me esperaba, pero ahora ver que lo estoy viviendo me asusta. Quizás bien dentro mío era lo que siempre supe o lo que siempre quise, conocer un planeta habitado de seres, pero jamás imagine que yo sería uno, jamás abría imaginado tal cosa.  

Pero ahora está es mi realidad y no la puedo cambiar, es el hoy y no el mañana, y ese hoy lo estoy viviendo aquí, porque las cosas así se dieron y es lo que tengo que aceptar en un mañana.  

Mire el reloj y eran las 9.00am, la noche paso volando y ni dormí, por más que lo había intentado, así que me levanté y me serví desayuno, luego me senté en el sillón y seguí pensando, necesitaba resolver todo eso lo antes posible, ya no podía permitir que mis emociones se interpusieran a mis acciones.  

Mis pensamientos se vieron interrumpidos por unos golpes en la puerta, me levanté somnolienta hacia el umbral y la abrí.  

— Hola Ene, verdad que venías hoy, a eso de las clases, pero no creo que sea el momento —dije finalizando con un bostezo.  

— Nat, te ves cansada y de todas formas no puedo enseñarte en esas condiciones  

— Es que no dormí anoche —dije mientras se me cerraban los ojos de golpe y perdía el equilibrio.  

— ¡Cuidado Nat!, no te vayas a caer —dijo mientras me afirmaba para que no me cayera —ven acá —dijo mientras entraba.  

— Ya puedo caminar, no te preocupes —dije mientras caminaba en zigzag al sillón.  

— ¿Por qué no dormiste anoche, Nat?, los oxtrilitas somos mucho más sensibles a la falta de sueño.  

— No lo sabía ese es el problema no lo sé y no sé nada de aquí —dije perdiendo el control.  

— Tranquila, respira hondo y escucha —prosiguió diciendo —poco a poco vas a ir conociendo todo, pero tienes que calmarte, Nat.  

— Lo lamento, no debí hablarte así —dije avergonzada.  

— No te preocupes, la ira es uno de los primeros síntomas que nos afectan al no descansar. Ahora si quieres puedes contarme lo que te sucede —dijo mientras se sentaba en el sillón de al frente.  

— Es esto, todo esto, siento que es mucho para mí, y los recuerdos…  

— ¿Qué recuerdos? —dijo Ene un poco alterado.  

— Es que ese es el problema no recuerdo nada de este lugar, quizás si recordará algo todo sería más fácil, pero no es así.  

— ¡Ah!, era eso —dijo más relajado.  

— Pero no es solo eso, siento que no soy capaz de asimilar tanto, Ene.  

— Sé que te sientes confundida, pero poco a poco te vas a acostumbrar a toda esta locura —dijo serio.  

— Además extraño a mis padres —añadí. 

— Eso no es malo, todos en algún momento extrañamos a las personas ausentes —dijo bajando la vista.  

— Y tú que sabes de eso, solo lo dices para hacerme sentir mejor, pero aunque suene duro, yo no, jamás los extrañe, para mi siempre han sido dos desconocidos que me dejaron en adopción —dije mientras una lágrima recorría mi rostro.  
 



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En el texto hay: misterio, secretos, seres cosmicos

Editado: 13.07.2020

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