Una semana después.
Desde la llegada de Calix y su padre las cosas en la academia estaban algo tensas, mi padre había informado que me mandado a los calabozos por insubordinación y por haberme escapado del instituto una semana, pero no pudo explicar los golpes en mi rostro por lo cual estaba bajo investigación, ya que sabían que el fue el que me trajo a la academia, claro que me preguntaron pero no dije nada al respecto. Aun que Calix sospechaba que fue lo que sucedió no me reprocho nada ni insistió que le dijera que fue lo que paso, cosa que agradecía. Me encontraba con las chicas buscando un vestido para la boda de Alexander, solo faltaba yo que escoja uno, entre a un local y mi celular sonó al ver el mismo sonreí al ver que era un mensaje de Calix y comenzamos a chatear.
Sonreí al saber que me imaginaba en un vestido rojo, sin dudarlo empecé a buscar de ese mismo color, estaba dándome por vencida ya que todos lo que veía eran largos y no me gustaban. Mientras seguía en la búsqueda del mismo, pude ver uno que me llamo la atención era corto, la falda no era tan bolada y se ajustaba al cuerpo lo necesario sin contar que tenia perlas del mismo color en el torso, sonreí y busque a la vendedora, al probármelo supe que era el indicado por lo cual lo compre y le saque una foto para mandársela a Calix.
Pude ver que no le llegaban los mensajes por lo cual, sonreí negando divertida guarde el celular y pague el mismo, con las chicas fuimos a comer mientras que hablamos de cosas triviales disfrutando del día. Cuando nos quisimos dar cuenta ya era hora de volver a la academia por lo cual nos pusimos en marcha, al llegar todas guardamos el vestido y nos dimos un baño para luego ir a almorzar en la tarde teníamos un entrenamiento por lo cual debíamos estar preparadas para lo que sea, ya que el que iba a dirigir el mismo era nada más que mi padre y el coronel Gari, sin contar que Calix iba a estar ahí, sonreí al pensar en él con una corbata del mismo color que mi vestido.
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Nos encontrábamos en el campo de entrenamiento, esperando a los comandantes en jefe mis hermanos estaban un poco más atrás ya que siempre debíamos formar filas de hombres y mujeres de mayor a menor, por lo que implicaba ser una de las primeras. Pude ver como entraba mi padre, junto a Alexander, el coronel Gari y Calix, el cual me sonrió, me mordí el labio tratando de ocultar mi sonrisa, pero al sentir su mirada penetrante solo agache la cabeza algo avergonzada y si ese chico lograba que me sintiera así.
● Atención Cadetes... -grito Leonardo y todos nos formaron rectos mirando hacia al frente a la espera de las instrucciones- Como sabrán hace unos días tenemos el orgullo de tener al Coronel Gari de la estación de Rusia junto al Sargento Gari y su escuadrón, hoy van a demostrar como se entrena aquí.
● Señor, Si Señor... -gritábamos todos sincronizados, pude ver al chico el cual vencí dos veces que me miraba con el ceño fruncido.
● El Coronel Gari dará unas palabras... -dice mi padre dejándole el lugar al hombre que al verme me sonrió.
● Cadetes, como lo dijo el Coronel Miller estamos aquí ya que un escuadrón de aquí fue mandado a una misión en nuestras instalaciones y fue invitado a quedarse con nosotros un tiempo... -habla tranquilo pero serio al mismo tiempo, busca entra todos a mis compañeros y al verlos asiente con la cabeza- Debo mencionar que me llamo la atención ya que fueron puestos a varias pruebas y cada una de ellas fueron superadas, incluso se enfrentaron a mi mejor escuadrón y lo han vencido.
Puedo ver a mi padre con el ceño fruncido, sus puños están blancos de la fuerza que esta haciendo y puedo notar desde aquí que su vena esta a punto de explotar, me rio en mi mente porque se que lo que esta diciendo el Coronel Gari no lo hubiera hecho publico si no estuvieran ellos más que nada porque yo soy parte de ese escuadro y puedo estar segura que pensó que iba a falla e incluso morir en el intento, maldito estúpido me dan ganas de reírme en su cara pero me contengo, porque un Gari no ha dicho quien era el líder del grupo y solo quiero ver la reacción de Leonardo.
● Sin más preámbulos quiero que suban los cadetes Junior, Escobar, Torres, Gutiérrez -dice el padre de ternurita y mis compañeros van subiendo a saludar a los comandantes- Y a su líder la Cadeta Miller...
Puedo notar la mirada penetrante de Alexander que esta asombrado por lo que dice el coronel Gari y al subir puedo notar la mirada de odio de Leonardo le sonrió mostrándole que puedo ser mejor que todos los cadetes e incluso mejor que él. Luego de unos minutos más nos dirigimos hacer el primer circuito junto al equipo de Calix, que al pasar por al lado mío toma mi mano para susurrarme un "te extrañe hermosa" no le contesto solo me muerdo el labio, puedo notar la mirada fulminante de Cooper y ver su cara supe que escucho lo que me susurro Calix más me concentro en ponerme el equipo, lucho con la mochila que contiene el peso extra para correr los 20km cuando siento que me ayudan con el mismo y unas manos en mi cadera, me giro rápidamente encontrándome con el chico de ojos claros que hace que mi corazón lata con fuerza, me sonríe acariciándome los hombros.