Capitulo13: SIN RASGOS ASIATICOS

Miré al director con la boca abierta, pestañeaba sin parar, estaba atónita, sorprendida, perpleja.

— Eres perfecta. — el director me tomo de las manos y me levantó.

¿Soy perfecta? ¿Para qué? ¿Por qué de pronto me vuelvo perfecta?

— Ojos grandes, sin rasgos asiático… Debo estar soñando. — él me miraba y precisaba los detalles de mi rostro

— Disculpé…. ¿Qué quiere decir? — dije tímidamente.

Lo único que necesito ahora es escapar y no volver. ¿Debía correr y no mirar atrás?

— Señorita, la necesitamos. Usted debe ser An Gel. La mujer que tenía en alma y vida el corazón de él. — señaló precipitadamente a Xiaowu. — Serás su primer amor.

— ¡¿QUÉ?! — Voltee a ver a Xiaowu, haciendo señas con los ojos para que intente que me liberen de ello.

— ¡¿Qué?! — dijo él perplejo.

— ¡¿Qué?! — respondí una vez más.

— ¡¿Qué?! — dijo el director sin entender la situación.

— ¡¿Qué?! — Xiaowu repitió con un tono burlón.

— Ya basta, llamaré a la agencia para que me dé el permiso. — dijo el director.

Dios.

¿Alguna vez perdieron un objeto preciado? Como un libro, un peluche, una pulsera. Bien, sentía que perdía tiempo, lo cual en este preciso momento era lo único que para mí era preciado.

Intentaba recordar todo aquello que había olvidado, intentaba ver rostros y recordarlos. ¡PERO! Simplemente no avanzaba como quería.

Según recuerdo, irónicamente, fui centrada y paciente cuando empecé con mi negocio, pero… Por qué no puedo lidiar con esta situación.

— Listo, el gerente dio el permiso. Vamos muchacha, no será difícil.

Me arrastraron al cambiador, me pusieron ropas largar y tradicionales chinas. ¿Me veo extraña? Quizá… Debido a mis rasgos americanos no se vea bien en mí y sea un completo fracaso.

Salí del cambiador con la miraba al suelo, apretando los labios, jamás en mi vida tuve tanta desconfianza de mi misma como ahora.

Levanté la mirada y vi la ropa de Xiaowu, eso quiere decir que es él.

Xiaowu me miraba con una expresión de preocupación.

— ¿Cómo me veo? — di un suspiro esperando una respuesta desalentadora.

— Te ves bien… — dijo Xiaowu sonriendo tiernamente.

Mi corazón se saldría del mi pecho si recordara esa expresión… Pero como la olvidaré después de pestañear no tiene sentido que se agite.

Seguí las órdenes del director. Me explico que debía decir y como debía hacerlo, me moví exactamente como me dijo.

«La historia se basaba en un hombre que por accidente se encuentra con una bruja y está al ver que él era bueno intenta hacerle el bien, pero una bruja jamás puede hacer el bien y me vez de eso casi lo mata. La única solución es volverlo un inmortal o dejarlo morir. Él decide vivir para ver al amor de su vida, pero a él lo dieron por muerto y ella regreses a su país natal a casarse con algún noble.»

Sí, será ese amor fatal que se fue. Qué loco, ¿no?

— ¿Entiendes? Solo debes sonreírle y hablar de alguna cosa feliz, sonríe cuando llegues a ese estanque. — observé el camino por el que debíamos ir.

— Bien. —dije nerviosa.

Intentaba contener mis nervios, pero sé que estaré bien.

La grabación comenzó y Xiaowu camino junto a mí.

— ¿Estas nerviosa? — me preguntó.

— Sí. — sonreía avergonzada. —  Pero ¿Por qué no tenemos diálogo? — pregunté.

Ya estábamos por llegar a la fuente.

— De hecho, si lo tenemos, pero… Es mejor hacerte sonreír que aprender un diálogo sin sentido. — dijo él.

Él estaba cansado, se sentía. Nos detuvimos en la fuente, y sonreí ampliamente, como si me estuviera contando algún chiste. De pronto vi que Xiaowu dio un último respiró y de desvaneció cayendo sobre mí y yo en enseguida cayendo a la fuente.

Bien, este es uno de esos momentos en el que un héroe secundario salva la escena rescatándome a mí y al protagonista. Pero esta escena no estaba planeada así que nadie me podía salvar.

Empuje a Xiaowu para que no cayera al agua. Por suerte un joven que actuaba de soldado lo sostuvo antes de caer, por supuesto yo no corrí con la misma suerte y caí al agua empapándome de la cintura para arriba.

— ¡XIAOWU! ¡XIAOWU! ¡XIAOWU! — Gritaban todos.

Me levanté y alguien me dio la mano para poder ponerme de pie totalmente.

— ¿Esta bien? — dijo la señorita.

— Sí, gracias. — asentí.

¿Debía hacer una reverencia? Aún no entendía bien cuando se hacía la reverencia, pero aun así la hice.

— No, no. No es necesario. — me levantó.

— Disculpé. ¿Sabe dónde puedo cambiarme? — pregunté titiritando.

— Oh, ven por aquí. — ella me guío.

Volteé a ver a Xiaowu. Espero esté bien.

«LO MEJOR DE LA VIDA NO SE PLANEA SIMPLEMENTE SUCEDE CUANDO MENOS LO ESPERAS»