Jade: este día esta pasando demasiado rápido. Solamente que no puedo creer todo lo que ha pasado desde que me case contigo y me siento bonita cada vez que me miras.
Daniel: es que tu lo eres. Pero la esposa de un McGregor siempre será respetada, así que solo te debes de concentrar en ser feliz a mi lado.
Jade: seguramente quieres que vivamos el resto de nuestra vida amándonos y estoy de acuerdo con eso. Ahora me pregunto donde me llevaras esta noche.
Daniel: lo sabrás hasta que lleguemos a ese lugar. Nada más que esta noche te pondrás un hermoso vestido que mande a pedir especialmente para ti.
Jade: espero que el vestido sea de mi grado. Porque si no lo es no me lo pienso poner, ya que sabes que tengo gustos demasiado diferentes para vestirme.
Daniel: eso lo sé a la perfección. Seguramente te gustara y debemos de ir a nuestra recámara para que lo veas y si quieres también nos puede acompañar tu nana.
Nana: no será necesario que lo haga. Además, ustedes están recién casados y cuando mi niña me necesite siempre estaré a su lado y este no seria el momento, ya que esta con su esposo.
Daniel: sabe que a mi lado esta segura. Necesito prometerle también que seré un buen esposo para su niña y que no debe de preocuparse por su felicidad.
Nana: sé que la hará feliz y sobre todo no tengo ninguna duda de que lo será. Pero le recuerdo que necesita ser respetada y sabe perfectamente lo que tiene que hacer.
Daniel: por supuesto que lo sé. Además, utilizare todo el poder que tengo para destruir todo aquel que no lo haga, porque si ella derrama una sola lágrima lo pagaran.
Jade: no quiero seguir escuchando más sobre ese tema. Pero mi nana lo único que tiene que hacer es descansar y me despido de ti nuevamente, ya que necesitamos subir a nuestra recámara.
Nana: quiero que te vayas tranquila y que no te preocupes por mí. Ahora únicamente veré como eres feliz y sabes que siempre quise que lo fueras.
Jade: esta será para ti una segunda oportunidad para que fueras feliz. Estoy segura de que en tu vida aparecerá un buen hombre del que te enamoraras.
Nana: mi tiempo para encontrar el amor hace años que se terminó. Ahora deben de irse y cada vez que quieras verte estaré a tu lado.
Jade: te recuerdo que a nadie se le puede negar la oportunidad de amar y te prometo encontrar para ti un esposo. Espero que no te sorprendas cuando te lo presente.
Nana: seguramente no encontraras a nadie. No quiero que intentes hacerlo, porque me acostumbre a estar sola y lo que menos me imagino es compartiendo mi vida con otra persona.
Ella solo mira cuando su niña sonríe. Ellos se despiden de su nana y cuando lo hacen se levantan de sus asientos, Daniel toma la mano de Jade y de esa manera se dirigen rumbo a su destino. Ellos a los pocos minutos llegan y Jade se acerca a su cama al ver su vestido.