Historia de amor

Capítulo 40

En la empresa de la familia McGregor

Bruno: definitivamente nuestro hermano se olvido de la empresa por estar al lado de su esposa. Nada más que esta noche le hare una visita a mi futura esposa.

Emiliano: hablando de eso todavía no me has dicho como es físicamente ella. Aunque yo vi la mía una sola vez y desde ese momento me pareció una joven demasiado interesante.

Bruno: así que también estas interesado en tu prometida. Solamente que no tiene nada de malo que lo haga, ya que será mi esposa y ella es una joven que me transmitió sentimientos con tal solo verla en esa fotografía, pero no te pienso decir como es físicamente.

Emiliano: te recuerdo que no podemos estar en el mismo lugar al mismo y tiempo. Seguramente nuestros compromisos se tendrán que celebrar a diferente hora.

Bruno: espero que el mío sea primero y tú puedes esperar. Nuestro hermano debe de estar enamorado al descuidar de esta manera la empresa.

Emiliano: el no hace nada sin pensarlo. Daniel esta vez hizo algo que no habíamos imaginado y nuestro padre siempre dice que el amor cambia a las personas.

Bruno: yo jamás cambiaria por esa razón. Porque me niego a sentir el amor y solo me casare con ella, pero no puedo evitar sentirme interesado por mi futura esposa.

Emiliano: si estamos interesado debe de ser por algo. Eso significa que existe la posibilidad de que terminemos enamorados de ellas.

Ellos dejan de conversar para empezar hacer su trabajo. Solamente que Bruno al recordar como era su prometida sonríe, ya que para él era hermosa.

En algún lugar de la ciudad

Jade: me has traído a un lugar completamente diferente. Además, me gusta que me sorprendas u esta vez me has traído a una cafetería, eso significa que al fin voy a poder comer mis postres favoritos.

Daniel: no quería que hiciéramos lo mismo todos los días y puedes pedir lo que tu quieras. Ahora solo me delimitare a verte mientras te los come.

Jade: deberías de pedir también. Porque mis postres yo no los comparto y si me pides un pedazo no te lo pienso dar, así que no los compartiré contigo.

Daniel: entonces pediremos exactamente lo mismo. Nada más que debes de aprender a compartir conmigo, ya que me molesta que no lo quieras hacer.

Jade: en otra ocasión lo hare, solo que ahora no y si quieres te puedo dar un pedazo del flan napolitano que pediré para que te des cuenta de que si lo hare.

Daniel: entonces deberás de dármelo en la boca. Sera extraño que lo hagas, ya que no estamos acostumbrados a nada de esto y deberíamos de hacerlo, sabes perfectamente que nuestro matrimonio será completamente normal y al sentirme enamorado de ti veo las cosas diferentes. El amor era lo único que me faltaba encontrar para sentirme verdaderamente feliz y sobre todo mi corazón te reconocí desde la primera vez que te vi, pero yo no me di cuenta en ese momento.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.