Daniel: sabes que eso seria imposible. Recuerda que en nuestra familia todavía existen las buenas costumbres y deberías de olvidarte de esa idea.
Bruno: no puedo creer que seas precisamente tú el que lo este diciendo. Nada más que parece que te olvidaste que te casaste con tu esposa en muy poco tiempo.
Daniel: yo no hice lo que tienes planeado hacer. Solamente te recomiendo que te cases primero con tu futura esposa para que nadie te diga lo que tienes que hacer.
Bruno: entonces necesitare hacerlo para que nadie impide que este a mi lado. Está si seria una buena solución y Emiliano es el único que no quiere conocer a su prometida en persona y el sabe que si no quiere casarse no lo hará.
Emiliano: la conoceré el día de nuestro compromiso. Pero no quiero hablar de ella, ya que prefiero guardar todos mis pensamientos para mí.
Daniel: así que también están enamorados y me imaginaba que habían aceptado su matrimonio de una buena manera. Eso significa que ustedes también conocieron el amor.
Bruno: solo vinimos a presentarnos con tu esposa y como ya lo hicimos será mejor que nos vayamos. Porque no queremos seguir interrumpiéndolos.
Ellos se levantan de sus asientos para después despedirse de hermano y también de Jade. Ellos cuando están de nuevo solos Daniel se acerca un poco más a su esposa.
Daniel: fue demasiado agradable la visita de mis hermanos. Nada más que hace años no teníamos la oportunidad de hablar de esta manera.
Jade: debe de ser lindo haber tenido hermano. Además, como fui hija única no tuve la oportunidad de tener más hermanos y me imagino que por eso también mi vida se volvió algo solitaria.
Daniel: sabes perfectamente que vamos a tener una familia. Jamás me conformare con tener un solo hijo contigo y sobre todo muy pronto tendrás a nuestro primer hijo entre tus brazos.
Jade: no deberías de pensar en eso si no en nuestra futura boda. Pero cuando nos casemos por la iglesia siento que las cosas cambiaran entre nosotros.
Daniel: te prometo que no cambiara nada. Seguiré comportándome de la misma manera contigo y siempre te demostrare cuanto te amo.
Jade: quiero que seas así conmigo. Solamente que jamás debes de olvidarte de tus promesas, ya que deberás de cumplirla y hare que las cumpla.
Daniel: no es necesario seguir hablando de esto y si quieres que te siga profesando mi amor lo seguirá haciendo. Ahora deberías dejarme pensar que necesito decirte.
Jade: pienso que no seria necesario que sigas pensando. Porque el amor no tiene nada que ver con la razón y nosotros lo sabemos muy bien.
Ellos siguen conversando y Jade no dejaba de sonreír igual que Daniel. El tiempo simplemente siguió su curso hasta que al fin había llegado el día de su boda religiosa y ella no podía dejar ver su reflejo en el espejo. Jade se veía feliz y sobre todo se sentía bien al sentirse así.