Bill le había avisado a Lyra que el juicio se llevaría a cabo esa tarde a las tres, pero cuando ya la hora estaba muy cerca y Jason seguía sin aparecer, comenzó a preocuparse, de manera que le envió un urgente mensaje a su hijo y el inconsciente aquel lo atendió presentándose en su despacho, pero lo hizo con Haziel.
Bill se frotó la frente preguntándose dónde tenía la cabeza su hijo, pero siendo que aquel era un ejercicio inútil, ignoró el hecho y pasó a lo que le interesaba.
Bill decidió que no obtendría nada más de él y le ordenó devolver al niño a donde debía estar, algo muy oportuno, porque unos minutos después los aurores de la plana mayor recibieron una urgente convocatoria de Harry.
James y para variar, llegó peleándose con Rowena, pero como aquello era más o menos normal, nadie les prestó atención, y a quién sí se la prestaron fue a Anthar, pues el venía discutiendo con Lily y eso sí era insólito, de manera que los otros tres Potter presentes clavaron sus ojos en él, y en el caso de Lyra se había levantado con rapidez caminando hacia ellos.
Que James dijese cualquier cosa no era extraño, lo extraño fue el tono helado que utilizó. Anthar era un Black, lo que era sinónimo de volatilidad, así que iba a decir quién sabía qué a James cuando se encontró con los ojos de Lyra y compuso una expresión de vergüenza.
Desde lo sucedido en Francia, y aunque él había estado al pendiente de la pareja, y estaba en el hospital cuando despertaron, después de asegurarse de que estaban bien, se había marchado diciéndole a Lily que no tenía cara para ver a Lyra después de lo que había hecho, eso, por no hablar de lo que su hermano le haría a él cuando se enterase. De manera que en aquel momento sintió como si alguien estuviese comprimiendo su garganta.
La cuestión fue que Jason había hecho acto de presencia justo cuando Lily decía aquello, así que Harry se llevó la mano a la cabeza al escucharlo.
Anthar cerró los ojos por un segundo mientras que Justin y Alexander se movían con sigilo hacia ellos. Aunque sabían que cualquiera tendría poquísima oportunidad en contra de Jason, igual harían el intento de ser necesario, pues a pesar de que todos sabían que había sido un accidente, también sabían que a Jason le importaría poco o nada para cobrárselo lo mismo.
Habitualmente, Lyra era la única que solía ser escuchada por aquel portento de arrogancia, pero en la presente oportunidad, y aunque aun no sabía nada en realidad, su ira era superior al buen juicio.
Los ojos de Jason se abrieron hasta el punto del dolor, porque entre otras muchas cosas, pensó que de la última persona que habría esperado aquello habría sido de Anthar, esto le dio oportunidad a Lyra de interponerse entre ambos.
Jason sujetó a Lyra y, aunque aun le envió una mirada furiosa a Anthar, la apartó de él y miró a Harry.
Editado: 01.09.2025