Cap. 40 Las lágrimas del silencio

Después de varios minutos Jason decidió intentar establecer comunicación con Altair, aunque no estaba muy seguro de cómo respondería y ni siquiera de si lo haría.

• Altair…
• Creo que lo mejor sería desaparecer —dijo en un tono apagado
• No digas tonterías. ¿En verdad nos harías eso a quienes te amamos?
• Ustedes aman al Altair que era hace años, pero ese murió en aquel apestoso calabozo

Jason fue consciente del enorme dolor que estaba experimentando el chico en aquel momento, y sabía además que no había nada que pudiese decir que cambiase las cosas, así que esperó a ver si agregaba algo más, porque también sabía que una de las mejores terapias era hablar.

• Cuando me secuestraron yo era poco más que un niño, pero aquel lugar y el bastardo que quería matarme, destrozó no solo mi cuerpo, sino mis sueños, y la única cosa que me mantuvo respirando no fue el deseo de salir de allí, no fue la esperanza de ver de nuevo a mi familia o de recuperar mi vida, porque a diferencia de Ben que en lo único que pensaba era en sacar a Sandy de allí, o en ver de nuevo a sus padres y al resto de su familia, lo único que me mantuvo a flote fue el deseo de matar a aquel hijo de perra —dijo con ira
• Y lo hiciste
• Sí, lo hice, pero eso no me devolverá los cinco años que me robaron, no me devolverá las risas, las noches de sábado junto a los míos, las navidades y cumpleaños que me perdí. Tampoco me devolverá el pedazo de alma que destruyeron ni la humanidad que me quitaron, así como tampoco cambiará el hecho de haberme convertido en lo que ahora soy.
• No eres…
• ¡Lo que no soy, es un ser humano! —exclamó
• Altair…
• ¡Soy un asesino sin alma ni consciencia!
• Escucha… —pero ahora se interrumpió él mismo recordando un par de cosas

Inicialmente Jason había mantenido a Altair alejado de la emergencia temiendo que pudiese atacar a los heridos que llegaban bajo custodia, pero si bien Altair lo había notado y le había dicho que no iba a atacarlos. y en realidad casi no iba a la emergencia, Jason sí había notado que cuando estaban en algún enfrentamiento, el chico no había hecho ni un solo preso, sino que había despachado en forma sanguinaria a todos y cada uno de los que se atravesaron en su camino. No obstante, Jason había pensado que aquello era apenas natural teniendo en cuenta por lo que Altair había tenido que pasar.

• ¿Ahora entiendes? —preguntó Altair haciéndolo salir de sus pensamientos
• Lo que entiendo, es que estabas dolido, molesto y es natural

Sin embargo, cuando Altair se giró y Jason vio sus ojos, supo que estaba muy lejos de comprender nada, y más lejos aún de resolver lo que fuese que estaba atormentando a su sobrino, pues de nuevo sus ojos habían adquirido ese tono traslúcido que era signo inequívoco de un dolor más allá del dolor mismo.

• No voy a cometer la enorme necedad de decir que sé cómo te sientes, porque lo más lejos que puedo llegar es a imaginarlo —le dijo

Aquello era una soberana mentira, porque si había alguien que podía decir sin mentir que sabía con exactitud cómo se sentía Altair, ese era él y no porque hubiese pasado por la misma experiencia, sino por su capacidad para ver y sentir las emociones ajenas. Sin embargo, era importante no minimizar ni desestimar los sentimientos del chico, porque en su actual estado de vulnerabilidad, eso no lo conduciría por buen camino.

• Pero lo importante aquí no es lo que yo sepa, sino que para nosotros sigues siendo nuestro Altair —puntualizó, pero él emitió una risa fría muy alejada de la suya
• ¿De veras? —preguntó en tono sarcástico —Sé que no eres estúpido, y si bien es posible que los demás no lo hayan notado, estoy seguro que tú sabes quién mató a esos hombres, y no, no estoy arrepentido, porque merecían morir como lo que eran, unos animales
• Entiendo, pero eso no te hace menos humano
• Abre los ojos, lo que estás viendo, y aunque ciertamente sigo respirando, no soy más que un cuerpo sin alma
• Te equivocas, Altair, si has actuado de esa forma es precisamente porque la tienes, porque te hicieron daño y el deseo de venganza, aunque esta no nos devuelva lo que perdimos como bien dijiste, es algo natural e inherente a todo ser humano.
• Tu lógica falla, porque tal vez sea así para un ser humano común, pero sabemos que nosotros no lo somos, me fue otorgado un poder que ha quedado demostrado que no merezco, porque se supone que un Elerie siente compasión y la necesidad de cuidar y salvar vidas, no de suprimirlas sin remordimiento
• De ser así, el universo anda muy equivocado, porque me conoces lo suficiente como para saber y haber comprobado en innumerables ocasiones que no soy precisamente compasivo con los criminales
• ¿Me crees estúpido?
• Ciertamente no
• Entonces no me trates como si lo fuese —dijo con la ira brillando en sus ojos —Sabemos cuántas veces has salvado a quien no merecía ser salvado, y no has matado a nadie que haya rendido su varita, mientras que yo ni siquiera les doy la oportunidad