historias llenas de franqueza

Capitulo 1~adelaida~

"Como voy a olvidarte, sí fuiste mi razón de vivir por más de trece años donde tras los primeros de enfrentar la vida juntos y separarnos poco después, presenciara en mi cuerpo las señales de un par de milagritos que serían el producto de este amor tan frutífero que tuvimos..." 

- Listo y así queda la última carta para él. Que día tan apacible la verdad, esto es mala señal... - fue más mi demora en presentir la calma que en darme cuenta de que el celular que se encontraba en mi cama boca abajo se hallaba en modo vibración tras recibir una llamada – no puede ser, como fue que lo presencié. 

Me levante de prisa de mi escritorio en lado opuesto del cuarto dirigiéndome al extremo donde se ubicaba la cama para poder recoger mi celular y contestar la llamada. 

- Muy buenas tardes habla la asistente del subdirector del departamento de edición de la editorial, es para recordarle que hoy a las 9:30 de la mañana se realizara una reunión con su persona, espero que llegue a tiempo y un gusto en hablar con usted. – con solo responder la insistente llamada se puede percibir el disgusto de la señorita en su tono de voz con la cual se dirigió a mí. 

- ¡ADELAIDA! – fue tanta mi sorpresa de ver como mi mejor amiga entra de golpe en mi habitación que me quedo quieta mientras mi frecuencia cardiaca se incrementa de golpe, generando una gran preocupación de sobre el por qué reaccionó así en estas horas de la mañana – mujer, ¿qué es lo que esperas ahí parada?, sino comprendes el por qué mi presencia acá en tu cuarto te pido que inmediatamente mires la hora – miro la hora en mi celular y sale que son las 9 de la mañana, si esperar más tire el celular nuevamente a la cama e ir a buscar un conjunto y organizarme para salir rápidamente. 

- Carina, porque apenas vienes a recordarme que teníamos que haber salido hace una hora a la casa editorial para la reunión – corro como loca a todas partes organizando lo de llevar y finalmente adentrar a la ducha. 

- Por si no sabias yo también estaba en una reunión solo que en mi caso llegue a tiempo, era la reunión de padres que suele realizarse cada trimestre escolar, en cambio te pido que hables con Joshua, ya que recibí muchas inconformidades de parte de sus maestros y padres de compañeros por su comportamiento tosco. 

- En cuanto salga de la casa editorial y haga las otras vueltas te aviso para ir por los niños mientras vas a la ceremonia de aniversario de la empresa de tu esposo, se cuán importante es esto para ustedes, pero hoy me quedo con los gemelos y ya mañana si desean pueden llegar como para que disfruten la velada. – finalizo saliendo del baño ya organizada en su mayoría para así poder ir a la reunión. 

- ¿enserio?, ¿segura que no planeas nada raro con los chicos? – se cuestiona la pobre Carina un poco dudosa sobre mi aviso del día. 

- Reina, pues claro que no hare nada fuera de lo normal, si acaso jugar un rato con los chicos charlar y ya. ¿Que podría salir mal en eso? – respondo alzando consigo mis hombros con un gesto relajado. 

- Confió en ti querida, Adela, no te sobre pases con nada y evita que se duerman tan tarde. 

- Relájate Carina, es por eso que luego te salen tantas arrugas en tu piel de porcelana. – menciono mientras agarro mi bolso de mano con los papeles, e celular y huyo del lugar con prisa, dejando atrás una enfadada Carina que desde mi habitación arroja mis almohadas queriendo embestirme. 

Llego con el tiempo medido al garaje y subo a mi motocicleta y a lo lejos despidiéndome de Carina que apenas si se asomaba por la ventana de mi habitación maldiciendo por la mala broma que hice. 

El día se fue tornando algo pesado con un clima algo templado, mis ánimos estaban muy bajoneados y las ganas de dormir me dominaban, había podido llegar a la reunión por pura suerte más sin embargo mi querido y adorado Aron Smith (el sub director del departamento de edición de la editorial ) me reprendió por mi leve descuido tanto en mi imagen personal como con la llegada a la hora acordada de forma precisa, el sub director es alguien que le encanta la puntualidad pero de esa que uno llega con casi media hora antes de la hora estipulada, así que se pueden imaginar que tan desagradable se va tornando. 

La reunión fue eterna, un así logré tomar apuntes para Carina, si no estoy mal son las 6 dentro de poco salen los gemelos de la escuela, a pesar de todo me dio tiempo para llegar a casa y descansar, deje las cosas en su lugar y los apuntes los dejé en el cuarto de trabajo de Carina, salí con calma de la casa y llegué a la entrada de la escuela; al paso de unos 20 minutos no se ve rastro alguno de los gemelos en cambio los demás niños salen de prisa del lugar dejando la zona desalojada en muy poco tiempo. 

- Oigan, silencio que alguien nos puede descubrir - se oye a lo lejos la voz de un chico que por instinto se trata de uno de los compañeros de los gemelos - recuerden no mencionarle a nadie sobre nuestro juego - dicen mientras se aproxima a la salida, pongo el celular a grabar y lo guardo en un bolsillo de mi chaqueta, pero dejando a la vista su cámara trasera. 

- ¿Por qué tanto misterio, niños? - respondo finalmente asustándolos un poco y detallarme que eran varios antes de dirigirme a ellos. 

- hola, señorita Adela, no te preocupes no es nada, ¡hasta luego! - dice uno de los cuatro chicos que conformaba en grupo, al parecer me distinguió desde un inicio, no me da tiempo de responderle nada más ya que huyen del lugar. 

Entro a la escuela y me pongo a indagar por los pasillos y justo por los pasillos de los grados inferiores se escuchan quejidos muy raros, entro al cubículo de donde no provenía los sonidos y me sorprendo al ver quién es, se trata de uno de los amigos de los gemelos, se hallaba amarrado de manos y pies con cordones, empapado, se notaba que sudaba frío al igual que lo acompañaban las lágrimas de desesperación por saber cómo liberarse, sus ojos brillaron al verme; tras liberal al menor de una preocupante baja estatura este accede a hablar. 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.