CAPÍTULO 10: NO ME LO PUEDO ESPERAR

Lera da a luz a una niña sana a la que pone como nombre Ohla. Lera ya es madre, el mejor regalo que le ha podido dar la vida y dar su marido. Tener su niña en brazos por primera vez y a la misma vez ver como le ha cambiado la vida y el aspecto de ver la vida también. El gran amor incondicional que siente nada más que ver a su hija entre sus brazos. 

Meses después, Ohla crece muy rápido, tiene un pelo negro liso, los ojos de color verde como su padre y unos hoyuelos que le salen cada vez que sonrie. Es la niña más querida en todo el reino.

Lera todos los días cuida de su marido Andryi, cada vez parece estar mejor de aquella tortura tan cruel que sufrió, pero el tiempo le ha dado la esperanza de tenerlo aquí en la vida. Lera acaricia su cara cada vez que va a cuidarlo y a darle de comer.

_Ojalá me escucharas....el médico dice que te pondrás mejor, ojalá que algún dia despiertes y puedas verme de nuevo y conocer a tu hija. Espero que esta mala racha se acabe pronto y volvamos a ser la familia que siempre hemos querido tener_dice llorando.

Lera sale de la habitación, apenada, pero resignada al ver que su marido lleva meses sin despertar de ese coma provocado por el gran dolor que le había provocado aquella máquina además de las fracturas de la muñeca. Sale desde la ventana y ve a la gente feliz, con una gran armonía social, con más igualdad entre todas los habitantes.... .

_Madre, Padre, conseguí volver la ciudad a como estaba antes. A la Edad de Oro, en la que ningún habitante sufre y en la que todo el mundo era bondadoso, aunque ya no estamos en la misma edad, la llamaré la Edad de Plata, porque nadie sufre en la ciudad, pero en esta época existen gente que quieren hacer mucha maldad, por lo que no he podido poner del todo las cosas como antes.

Lera cuida de su pequeña, siente paz por todo lo que hace por su ciudad, pero...lo que no se espera es que su marido despierta. Cuando se lo comunican, Lera sale corriendo a toda velocidad hasta el dormitorio del castillo. Entra por la puerta y Andryi la mira.

_Lera....¿Cómo están las cosas? ¿Seguimos casados o tu familia no nos dejan?

_No te preocupes por nada, nosotros somos los reyes ahora. Lesya está en la cárcel y todo el que haga injurias a otro también. Te he echado mucho de menos, he llevado lo mejor posible este reino siguiendo todo lo que he aprendido de tí. Andryi....debes saber una cosa, cuando te llevaron al potro, no me dieron tiempo para decirte algo muy importante.

_¿El qué?

_Espérate aquí, voy a la habitación de al lado._Lera trae a la niña de 6 meses de edad y Andryi la ve acercándose.

_Esta es nuestra hija, se llama Ohla.

_Dámela, que la coja entre mis brazos._Andryi se queda sin palabras al ver  a su hija entre sus brazos, todo esto era un shock muy grande para él.

_Se parece a tí_dice Lera_Las cosas han pasado tan rápido, que apenas pude decirte que estaba embarazada. Pero ahora lo más importante es que estás bien y que pronto seremos la familia que todo este tiempo hemos deseado.

_Lera, antes de que me pasara esto, quiero decirte que siempre he estado enamorado de tí y que nunca cambiaria nada de lo que ha pasado, incluso me alegro, porque por fin puedo estar con la persona que me hace tan feliz cada día. Gracias por el regalo tan grande que me has hecho, que es esta preciosa hija. Espero darte todos los días el cariño que te mereces y darte la felicidad que nunca has tenido.

_No hace falta que me digas nada, yo lo se. Espero darte todo el cariño, mi amor y felicidad también todos los días de mi vida. 

Los dos se acarician la cara y se dan un beso. 

Tras la recuperación, Andryi es proclamado Rey de Krassa y Capitán del ejército de Krassa. La leyenda dice que fue un matrimonio excelente y que hizo historia. 

Con los años tuvieron más hijos, el varón fue proclamado rey y así sucesivamente hasta la actualidad. Su legado es bastante importante aquí en esta ciudad, son los reyes más importantes que han existido desde entonces, porque se produjo más igualdad entre todas las personas. Llevo intentando comprender como el libro de leyendas que siempre me ha dado mi madre ha llegado a mis manos después de tantos siglos. Y descubrí, que yo, el que escribo este libro, soy descendiente de muchas generaciones pasadas de esta realeza...... .

Lo único en que pienso es en que me gustaría seguir los pasos de mis antepasados. De ser amable, gentil, modesto y bondadoso con las personas, y de ayudar y apoyar para parar todas las injusticias que estén en mi mano para que en este mundo sea un lugar mejor habitable entre todos. 

FIN