Nublado

"Cuánta fuerza puede tener el tallo de una flor en medio del tornado, serán tantas sus ganas de vivir?"

Zurí empezó su rutina como siempre, esta vez, faltaron pasos, pasos tan pequeños que ni siquiera pudo notarlos, no dobló las cobijas (ya que "no le daba tiempo") , no pudo elegir adecuadamente su conjunto de ropa del día y casi olvida el color rojizo de sus mejillas, pero habia un paso, que no podía perder... cuando abrazaba a lotto y le rellenada sus trastes de comida, se despedía diciéndole adiós con la mano a través de la pequeña ventana en su apartamento.

Esta vez el trabajo se sentia más pesado, se percibía más gente pero en la lista de cobros, ni siquiera habían llegado a la mitad de ventas de lo del día anterior, un amigo del trabajo se acercó a ella:

~oye estás bien? [Con un tono realmente preocupado]

-si, por qué ? [Respondió zuri mientras sacaba una botella de agua de su mochila y bebía una aspirina]

~ bueno ... es que otra vez estas tomando aspirina... sufres de migrañas?

-aaah ... no jajaja ... bueno si... últimamente me duele mucho la cabeza .

~ Será por que no comes, zuri, te pasas, de todos eres la unica que no toma su hora de comida, a penas y te comes lo que te invitamos, antes traías tu comida y ahora ni eso, qué paso o si no quieres gastar, puedes comer de lo mio pero tienes que comer.

-jajajajaja Noooo como crees, solo no siento hambre y a veces no me da tiempo de prepararme algo , casi siempre me compro algo saliendo del trabajo o como antes de venir y como bastaaaante por eso no siento hambre, no te preocupes, y mañana voy a traer mi comida.

Estaba mintiendo, ella a penas y desayunaba para ir a trabajar, a penas y tomaba agua o café al salir del trabajo , pero por alguna razón sentia vergüenza de decirlo y que su vida se notará muy desastrosa o como si de alguna manera se viera mal.

Se quedo sin familia muy pequeña, asi que no sabia lo que significaba pedir ayuda, siempre se tenia a ella misma; algunas personas de su ciudad, conocidos de sus padres, la ayudaban, pero las cosas mas difíciles las tuvo que enfrentar sola.

Pasaron 2 meses.

Ahora era incapaz de tender toda su cama, un mes completo con la cama destendida, las mismas sábanas con polvo , dejo de salir a comprar las cosas que le gustaban, pero seguía tratando de verse linda antes de salir, seguía despidiéndose de lotto a través de la ventana y seguía cuidando muy bien de él.

Pasaron otros 2 meses.

Esta vez llego sin arreglar al trabajo, sus compañeros notaban que ahora su semblante era diferente, usaba gorras todo el tiempo y sudaderas largas.

Hacia muy bien su trabajo, pero ya no disfrutaba nada... ni las platicas y muy rara vez se reía, un día de esa semana gris, llegó a casa y lotto ya no estaba... fue cuando todo el departamento, toda su esencia , se ahogo.