CAPITULO #2
Darek
Me encuentro a unos días de regresar a mi hogar si es que puedo llamarlo así, ya que he estado mucho tiempo fuera de casa. Después de algunos años regreso a casa de mis padres, me mandaron a estudiar a otra ciudad, para que tuviera una buena educación, me estuve quedando en casa de mis tíos, son unas buenas personas, me quieren mucho y yo a ellos, en mi estadía con ellos siempre se comportaron muy bien conmigo. Este último año de preparatoria mis padres han decidido que regrese para pasar más tiempo todos como familia, ya que mi hermano mayor pronto se ira al acabar la universidad.
Ya están todas mis maletas listas, sé que extrañare este lugar pero nada se compara con regresar al lugar donde todo es mío y nadie me dirá nada porque haga tal cosa.
Tengo una familia ejemplar, como en todos los hogares hay problemas, hay altas y bajas pero claro que lo sabemos superar, mis hermanos también son un gran ejemplo para seguir, tienen excelentes notas, practican casi todos los deportes, son unos ejemplos para seguir, por otro lado estoy yo, más conocido como el hijo guapo de los Lindbergs.
En estos momentos estoy esperando a que llegue la hora de ir a una fiesta con mis amigos, iremos a beber un poco a divertirnos y posiblemente esta sea mi despedida ya que los últimos tres días estaré ocupado con los tramites de la escuela, llegare justo a tiempo a mi primer día de clase. Estoy muy ansioso de regresar y ver las cosas que han cambiado y las que siguen igual, ver a mi querida madre y al orgulloso de mi padre.
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Estaba acostado con una gran pereza, cuando escucho el timbre de la casa, me levanto de mala gana para salir de mi cuarto e ir a ver quién es, mientras voy bajando las escaleras checo mi celular.
–Quien está molestando mi paz. –Ruedo los ojos al saber quién de quien se trata, todos los días viene a mi casa a pasar el rato, llego a la puerta y la abro. –Ya te habías tardado –Lo miro enarcado una ceja, me doy la media vuelta para caminar a la concina, escucho que cierran la puerta de tras de mí y me sigue.
–También te extrañe. –dice burlón, veo que toma un vaso para dirigirse al refrigerador y mirar que puede tomar. –Otra vez lo mismo –dice suspirando y bebiendo jugo de naranja.
Niego con la cabeza, me siento enfrente de él. – será difícil cuando me vaya, pero recuerda que para mis tíos eres un sobrino más y puedes venir las veces que quieras.
–Lo sé, como no amarme si soy tan increíble. –Alardea como siempre de su aspecto físico. –Soy hermoso a diferencia de ti yo irradio ternura y belleza –Y aquí vamos de nuevo, sabe perfectamente que por su físico parece una cosa tierna y linda como se hace llamar.
Nos reímos y pasamos a la sala para jugar un rato en la consola. Así nos pasamos toda la tarde, comiendo y bebiendo mientras jugábamos. Feliz es un chico de mi escuela, nos conocimos desde que vine a vivir con mis tíos, era mi vecino luego sus padres se mudaron a un lugar más cerca de su trabajo. A pesar de que se le ve muy feliz lleva una vida un poco dura, sus padres entraron en deudas a causa del alcohol, su padre es un poco violento, está más que claro que paga sus estudios pero aun depende de sus padres ya que no gana lo suficiente para vivir solo. Mis tíos le ofrecieron uno de los cuarto pero no lo acepto ya que tiene una hermana pequeña a la cual no quiere dejar sola, todas las tardes a la misma hora viene a mi casa a pasar el rato ya que su madre regresa del trabajo y usualmente termina peleando así que esta es su forma de escapar, sé que nos haremos falta el uno al otro, cogimos mucha confianza y una gran amistad en estos años, por supuesto que sentiremos la presencia del otro.
Entrado la noche nos disponemos a limpiar todo, para que luego el como de costumbre regrese a su casa ya que su madre salió hacia su otro trabajo como enfermera nocturna.
***
Dariana
Estoy emocionada, gracias a mis buenas calificaciones pude mantenerme en este instituto de paga, con ayuda de las becas que me otorgaron por tan buen cerebro que tengo. Me estiro un poco en mi lugar, estoy en mi escritorio revisando mi horario y las cosas que me faltan por comprar, hago una pequeña lista de lo más importante para luego buscar los precios de cada cosa. Después de unas horas decido bajar a comer alguna golosina de las que hace mi mamá. Mi casa es pequeña pero de dos plantas, los cuartos son algo grandes, tenemos una cocina un poco espaciosa que usaos de comedor igual nos ahorra espacio, así podemos tener una sala grande. Una vez en la cocina rebusco entre los cajones a ver que puedo chuchería puedo comer, encuentro unos bombones que mi mamá preparo hoy en la mañana.
–¡AJA, te tengo! –habla después. –y yo culpando a tu padre.
–Ay pero mami, solo es uno –le muestro el bombón, veo como niega para después pasar a mi lado y quitarme el recipiente con bombones– pero madre…
–Nada de peros –cerro el recipiente para dejarlo en su lugar– Esto es para regalarle a tu tía mañana, recuerda que nos vendrá a visitar.
–Está bien mamá –Suspiro y muevo la cabeza en aceptación. –Lo que tu digas.
–Ven, vamos a la sala –Toma mi brazo para sacarme de la cocina. –Esperaremos a que llegue tu papá con la comida.