Hubiera sido yo

Capítulo # 15

CAPÍTULO #15

Darek

Me encontraba discutiendo con mi madre, les había contado que los padres de mi compañera que había estado ayudándome con los temas del examen inaugurarían una pastelería a la cual estábamos invitados, mi padre como siempre por el trabajo no iría, Desmond quisa pasaría luego a comprar algo, pero Darién y mi madre irán conmigo, hasta ahí todo estaba normal…como siempre que me quieren mandar, habían invitado a Lucy para que fuera conmigo y claro que ella acepto.

–Pero madre, esa tipa es muy insistente –camino de un lado a otro mientras discutía con mi madre en la sala.

–Es hija de una amiga de la familia, trátala bien –decía mi madre sentada en uno de los sillones, estaba tomando un jugo de naranja.

–No quiero llevarla, aparte ella y Dariana se detestan –ruedo loa ojos recordando todo. –Recuerda que por culpa de Lucy me suspendieron.

–Eso ya quedo arreglado, no me interesa.

–Pero mamá, no quiero llegar con ella, la gente va a malinterpretar –gruño y pongo cara de asco.

–La gente ¿O dariana? –me queda mirando y no digo nada acto seguido niego rápido con la cabeza.

–La gente, Dariana, sus amigos, todos van a malinterpretar –le digo molesto no quería llevarla y no lo haría.

–Tienes que… y lo harás –se pone de pie caminando escaleras arriba.

–No lo hare y me vale que sea hija de tu amiga, eso no la hace agradable para mí.

Después de eso, ella subió ignorándome por completo, aproveche para subir a mi habitación cambiarme de ropa, tomar mi celular para salir de la casa.

Una vez llegué al lugar, me arrepentí, era muy temprano a lo que ella me había dicho, estaba dispuesto a regresar hasta mi moto cuando oigo que alguien dice mi nombre con un tono muy alegre.

–Darek…! –Volteo a verla y viene hacia mi trotando.

–Bonito lugar –Dirijo la vista de donde había salido segundos antes.

–Gracias, pero no te quedes ahí, pasa –Me toma de la muñeca para arrastrarme hacia dentro.

–Apúrate Dari, esos brownies no se cortarán solos –escucho como le grita una señora asomándose desde la puerta detrás del mostrador.

–Ya voy mamá –veo como rueda los ojos y mira hacia todas partes.

–Anda ve, no queremos que señora mamá se enfade –me burlo haciendo que me regale una mala cara.

–Tu humor cada día es peor –Se va por donde la señora se asomo –A y ponte cómodo.

 

Dariana

Me di cuenta de que había llegado Darek gracias al sonido de la moto, la semana que estuvo llevándome a su casa en moto me sirvió para reconocer el ruido que hace, así que salí rápido para buscarlo, cuando acabe de cortar y acomodar los brownies le lleve uno para que los probara. Faltaban algunos minutos para que abriéramos, Aleksander aun miraba feo a Darek mientras que Marco se quedo hablando con el de lo mas normal, Annie, mi madre y yo estábamos terminando de acomodar todo, papá regresaría más tarde porque fue a buscar comida para todos notros.

–Listo chicos ya vamos a abrir –Sale mi mamá con su delantal rosa pastel dirigiéndose a la puerta de entrada.

–Hola desvelo de Dari –Saluda Annie a Darek con cierto tono de burla.

–Hola barbie –Rueda los ojos, me acerco a él.

–¿Qué te pareció? –Me refiero al brownie.

–Diez de diez –dice sonriéndome.

Aleksander se nos acercó quedándose atrás de mí, poso sus manos sobre mis hombros dando pequeñas caricias, se que aun estaba molesto con Darek pero como le había dicho, todo fue un malentendido.

Tiempo después comenzaron a llegar los invitados de mamá, rápidamente ella los acompaño a que eligieran una de las mesas, me levante siendo seguida por Aleksander que aun llevaba uno de sus brazos sobre mis hombros a modo de abrazo, se quedo en el mostrador por el menú y las servilletas para llevarlas a las mesas ocupadas, mientras que yo preparaba unos platos con unos bocadillos salados que preparo mi mamá para la ocasión.

–¿Necesitas ayuda? –Me asusto porque estaba muy concentrada luego escucho una risilla de fondo.

–No…no nece…sito…ayuda, así estoy bien –volteo a verlo y se encontraba recargado sobre el marco de la puerta.

–¿Asustada? –Se queda ahí viéndome a los ojos lo que me pone algo nerviosa.

Con su camisa blanca pegada al cuerpo, con los primeros tres botones abiertos, los pantalones negros, con su chaqueta de cuero y las manos llenas de anillos…claro que me asustaría…no, no estaba asustada, estaba nerviosa y eso aumentaba conforme se me iba acercando. Me quedo sin nada que decir, continuo con mi tarea, luego siento su cuerpo cerca del mío, roma un plato para acomodar las cosas de la misma manera en que yo lo hacía. Me quede sin aliento cuando siento su respiración cerca de mi oído

–Necesito esto –susurra muy cerca de mi y se inclina parea tomar un aderezo que estaba de mi lado. No le pude responder.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.