Humanos Contra Demonios

CAPÍTULO 4: Abuela

Humanos contra demonios.

CAPÍTULO 4

Mi abuela era la única familia que tenía. Mi madre murió cuando nací, a mi padre lo asesinaron cuando tenía 5 años. Solo éramos ella y yo. Mi abuela trabajaba limpiando casas para pagar mis estudios, yo me esforzaba estudiando para que estuviera orgullosa de mí. Ella siempre me decía que sea un chico bueno, los chicos buenos siempre son recompensados en la vida. Ella murió de un infarto y yo me quedé solo. Ahora que la tengo delante de mí, no sé qué hacer.

—¿R-realmente eres tú?- Digo nervioso.

Me acerco a ella.

—¿Dani? ¡Eres mi Dani!- Dice mi abuela sonriendo.

Nos abrazamos y empiezo a llorar demasiado... Realmente la extrañaba... Ella es la única persona que amo.

—¡Creí que nunca te volvería a ver!

—¡Te extrañaba, Dani!

—¡Pero, ¿por qué estás tan joven?!

—¿Joven?- Dice confundida.

Me suelta y observa sus manos. Se asusta demasiado al verlas.

—¡¿Qué me pasó?!

Le tomo una foto con mi teléfono.

—Mira, eres tú.

Le enseño la foto.

—S-sí, soy yo cuando era joven. ¿Por qué me veo así?

Mi abuela observa a mis compañeras.

—¡¿Quiénes son ellas?! ¡¿Por qué estoy viva?!

—Tengo mucho que explicarte, pero en secreto.

Volteo a ver a mis compañeras.

—Lo siento, chicas, pero esto es muy secreto.

—¡No te preocupes, Daniel!- Dice Alex.

—¡Yo debo ir con mi hermana para decirle sobre tu gran logro!- Dice Liz.

Liz se va corriendo del lugar y tomo de la mano derecha a mi abuela.

—Ven, te explicaré todo afuera del pueblo.

Mi abuela y yo salimos de la casa. Mi abuela se asusta cuando salimos.

—¡¿Qué es este lugar?!

—Actúa normal, te lo explicaré afuera del pueblo.

Mi abuela y yo caminamos por el pueblo y ella parece estar muy asustada, está temblando de miedo.

—No te preocupes, todos aquí son personas buenas... Creo que lo son...

Supongo que lo son... Eso espero.

°

°

Salimos del pueblo y nos alejamos lo más lejos posible.

Nos detenemos y suspiro.

—Es seguro aquí, te lo diré todo.

Saco mi teléfono y veo mis llamadas.

—Este número debe ser de él.

—¿De quién?

—De Dios.

Le llamo y contesta inmediatamente.

—Sé lo que pasa, tienes permitido contarle todo a tu abuela, pero solo a ella.

—¡Gracias!

—Y, Daniel, no revivas a más personas de otro mundo, por esta vez te lo permití porque se trata de tu abuela.

—¡Gracias, Dios!

—Y le daré dos tipos de magia a tu abuela, para que se proteja. Ese mundo es muy peligroso, adiós.

Cuelga y un brillo rodea a mí abuela.

—¡¿Eh?!- Dice asustada y nerviosa.

El brillo desaparece.

—¡Dime lo que está pasando!- Dice mi abuela asustada y desesperada.

—Abuela, Dios me mandó a este mundo para salvarlo.

—¿D-Dios?

—Sí, este mundo es el mundo 1, el mundo de la magia y los aventureros. Nuestro mundo era el mundo 15, el mundo de la tecnología.

—¿M-mundo 1?

—Escucha, cuando moriste, me quedé solo, vendí todas las cosas de valor que tenía para pagar tu funeral. No conseguía empleo. Sin dinero, no podía sobrevivir...

Suspiro y la miro a los ojos... Tengo una expresión de tristeza... Estoy decepcionado de mí mismo.

—Intenté suicidarme.

—¡¿S-suicidarte?!

—Lo sé, soy de mente débil, no soportaba más mi situación e intenté suicidarme.

Bajo la cabeza y mi abuela me observa con una mirada triste.

—Dani...

—Pero ahora tengo una misión.

Levanto la cabeza.

—Cuando estaba a punto de suicidarme, Dios apareció frente a mí y me dio un propósito en la vida. Me trajo a este mundo, me dio el poder de usar magia y me pidió que derrote a los demonios que hay en este mundo. Un demonio muy poderoso aparecerá en unos tres o cuatro años y destruirá el mundo. Si este mundo desaparece, los demás también desaparecerán.

—¡I-increíble!

—Eso pasó ayer... Me pasaron muchas cosas interesantes, pero hoy fue increíble.

La abrazo con fuerza.

—Aprendí un hechizo de resucitación y te reviví... Aunque no sé por qué estás tan joven.

—Te lo agradezco... Aunque me hubiera gustado despedirme de tu padre.

La dejo de abrazar y me alejo un poco de ella confundido.

—¡¿De mi padre?!

—Cuando morí, aparecí en una gran casa, en la casa estaba tu padre y mis padres. Nos abrazamos y hablamos. Una mujer con alas entró a la casa y me dijo que a los muertos se les daba la oportunidad de renacer cuando ellos querían.

—¿Y mi madre no estaba?

—Dani... Ella... Ella hizo cosas muy malas cuando estaba viva y se convirtió en un demonio.

—¡¿En un demonio?!

—Lo siento, pero es la verdad.

—¿Mi madre... un demonio?

—Después de hablar todo lo que debía con mis padres, ellos se despidieron de mí y tomaron la decisión de renacer.

—¿Y mi padre?

—Tu padre y yo tomamos la decisión de esperar hasta que mueras para renacer... Bueno, hasta que un círculo apareció bajo mis pies y me trajo a este mundo.

—Mi padre debe estar triste ahí solo.

—Solo no está, podíamos salir de nuestra casa, había muchas casas a nuestro alrededor, nunca estábamos solos... Era como una gran ciudad.

—Se oye como un gran lugar.

—Lo era.

—Bueno, ¿quieres quedarte conmigo o quieres regresar?

—Me quedaré contigo, este lugar se ve interesante, siempre quise salir de viaje y vivir aventuras.

—Aunque estas aventuras son peligrosas y podemos morir.

—Tienes una misión muy importante, si Dios te confió esta misión, tú debes hacerla.

—¡Lo haré!- Digo sonriendo.

°

°

Le conté a mi abuela sobre los tipos de magia y sobre el gremio.

—¿Yo también tengo un tipo de magia?




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