CAPÍTULO 276

CAPÍTULO 276

Bueno... Mi aventura terminó… El final fue bueno para todo el mundo... Pero, para mí, no fue bueno... Todos mis esfuerzos fueron en vano... Diego, te odio... Pero también te admiro… Mierda… después de todo, sí soy un inútil… Abuela, lo siento.

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Aparecimos en un callejón… Se escuchan autos y personas... Regresamos.

Zei parecía una chica humana... No parecía una semihumana… Gracias, Dios supremo.

—Estamos de regreso...- Dijo Diana.

—Daniel, ¿estás seguro de tu decisión?- Dijo Cris.

—Sí… Mi misión terminó... Quiero vivir una vida normal.

El Dios supremo apareció frente a nosotros.

—Bueno, es la despedida. Gracias por todo.

Unas pequeñas esferas blancas aparecieron frente a nosotros.

—¿Qué son?- Dijo Reika.

—Vivirán aquí. No pueden vivir vidas normales con magia. Esas esferas contienen su magia. Si quieren recuperar su magia, deben comerse la esfera. ¿Quedó claro?

—Sí... Gracias.

Guardé mi esfera en mi bolsillo.

—Por cierto...

Nuestra ropa cambió. Se volvió ropa normal de mi mundo.

—Listo, ropa normal.

Mi ropa seguía siendo negra... Perfecto.

—El dinero está en sus bolsillos. Los documentos están en este maletín.

Un maletín apareció frente a mí.

—Muchas gracias… Por cierto, sobre mi cabello…

—Es un cambio natural. Y no te ayudaré con eso, te ves genial con el cabello blanco.

—Pero no es normal...

—Te daré un consejo. Consigue trabajo como modelo. Podrías ganar dinero para tu universidad... Debo retirarme... Por cierto, hoy es 16 de febrero. Estamos en el año 2037... Feliz cumpleaños, Daniel. Adiós.

El Dios supremo desapareció y tomé el maletín.

Tengo 18 años... Empecé mi aventura con 16 y terminó con 18.

Es raro... Me siento raro... Mis sentimientos de tristeza se están mezclando con sentimientos de felicidad… Solfrar perdió… Los mundos están a salvo... Estoy feliz... Pero extrañaré a mis amigos... Lo siento, era lo mejor.

Diana entendía mis sentimientos y me tomó de la mano.

—Comencemos de nuevo, Daniel. Una nueva vida.

Cris puso su mano en mi hombro.

—Es cierto. Daniel, los mundos están a salvo. Comencemos de nuevo.

Zei me abrazó por la espalda.

—¡Por favor, enséñame este mundo!

Reika me tomó de la mano también.

—¡Empecemos de nuevo!

Sonreí... No estoy solo... Gracias por su apoyo.

—Por cierto, Daniel…

Diana me dio un beso en la mejilla y me sonrió.

—Feliz cumpleaños.

Diana... Gracias... Muchas gracias... Tu apoyo me hace sentir mejor.

—Sí… Gracias.

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Lo primero que necesitamos es conseguir un lugar en donde vivir.

Encontramos unos departamentos cerca de una escuela. La ubicación es perfecta. Solo debemos caminar unos minutos para llegar a la escuela.

—¿Ustedes quieren rentar tres de mis departamentos?

Nos reunimos con la dueña del edificio. Sí, es muy sospechoso que un grupo de chicos decidan rentar tres departamentos y sin adultos.

—Escuche, sé lo que piensa. "Son muy jóvenes para vivir solos". Mi abuela murió y me quedé solo. No tengo familiares.

—Mis padres murieron asesinados por esos demonios caníbales.- Dijo Cris.

—Mi familia también.- Dijo Diana.

—Mi hermana y yo también perdimos a nuestra familia.- Dijo Zei.

Reika asintió.

—Lo siento... ¿Tienen los documentos…?

Le entregué una carpeta con documentos.

—Están todos. Necesitamos tres departamentos. Que estén juntos, por favor.

Le entregamos una gran cantidad de dinero a la dueña.

—Esto cubrirá dos años de renta.

—S-sí, gracias.

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—Es todo...

Diana y yo terminamos de guardar la comida en el refrigerador… Tuvimos que comprar televisión, computadora, teléfonos, camas... El Dios supremo nos dio demasiado dinero. Gracias.

—Terminamos de mudarnos... Estoy cansada.

—Diana... ¿Realmente quieres vivir conmigo? ¿No quieres vivir con Zei y Reika? Yo ya puedo controlar mi lado pervertido, pero no sé si...

Diana me tomó de la mano... Su mano se siente suave... Muy suave.

—Daniel, sé que no somos novios, pero...

—Diana… Sé que te rechacé antes, pero... Pero ahora... Bueno... Lo que trato de decir es que... Yo te rechacé porque no quería tener harem... Pero ahora... Tal vez podamos intentarlo... Quiero vivir una vida normal... Y formar una familia es parte de esa normalidad que busco... Aún sigo un poco traumado... Sonia me hizo demasiado daño... Pero confío en ti... Así que... ¿Te gustaría salir conmigo…?

Diana comenzó a llorar... ¡¿Eh?! ¡¿Dije algo malo?!

—¡L-lo siento! ¡¿D-dije algo malo?!

Diana me acarició la mejilla.

—Estás volviendo a ser el mismo de antes.

Ella comenzó a besarme... La normalidad que tanto busqué… El harem nunca me interesó… Solo quiero ser feliz con una sola chica… Solo una.

Diana es una chica amable... Tengo suerte de tenerla... Supongo que esta es mi recompensa por todo el sufrimiento que pasé.

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La escuela... Regresé… Qué nostalgia.

Mi nuevo uniforme es rojo... Prefiero los uniformes blancos, pero no puedo quejarme.

Estaba parado frente a la entrada de un salón… La ceremonia de ingreso terminó… Espero que mis compañeros sean personas buenas.

Tomé aire y entré al salón.

La profesora estaba en el salón… Tardé demasiado en el baño.

—Lo siento por llegar tarde. ¿Puedo entrar?

—Solo llegaste un minuto tarde, no hay problema. Entra.

Ella me ha dado clases antes… Ella trabajaba en mi otra escuela… Supongo que se cambió a esta escuela.

—Gracias.

Cerré la puerta y me dirigí a un asiento vacío al final de la última fila... Asiento cliché junto a la ventana... Perfecto.