Llevo mediahora aplicando la ley del hielo, sé que ha pasado media hora porque miré el reloj hace un rato y ahora de nuevo ¿me creerían si les digo que esta chica no se da por vencido?
¡siii! todo se lo debo a mi mala suerte y a mi bocota.
Debí haber dicho que no quería su presencia a mi lado. Así de sencillo.
-.... lo mejor es eso ¿no crees?- Juro que todo el tiempo ha estado haciendo un monólogo de yo no sé qué cosas. Lo peor es que no la miro ni le contesto pero ella continúa hablando, como si realmente ambas estuviecemos participando en la conversación.
Me pregunto si hay algún tipo de alimento que la gente haya probado en estos días y yo no me enteré. Algo así como “alimentese aquí si va a dirigirle la palabra a Norma. Especial para soportar su rechazo y volverla loca.”
-..... pero cuando le dije que no, se enojó y empezó a ladrar.- Una media sonrisa se forma en mis labios ¡valla que es insistente! la chica se ríe como si me hubiera contado el mejor chiste de todos y yo no he entendido ni media frase completa de todo lo que ha dicho.
Niego con la cabeza y me rindo, ya no puedo esconder la sonrisa. Pero es que, diganme ¿quien soporta de esta manera que lo ignoren? ¿quien es capaz de sostener un monologo de media hora fingiendo que su interlocutor le está prestando atención?
Esta vez la miro directamente.
-¿Te diste cuenta que no preste atención a nada de lo que dijiste verdad?- La chica, Tania según recuerdo, abre grande los ojos y se sienta erguida sonriendo grande.
-No te imaginas cuánto aprecio a la gente sincera. Por supuesto que lo note. No pienses que soy boba pero pasa que mi….- Narra una historia de cómo su hermano le dijo que podía quedarse en su departamento luego de enterarse que su pareja la engañó y que su supuesta “mejor amiga” se negó a ayudarla. ella tampoco tenía amigos, así que decidió que el haber adoptado los perritos justo en el momento que lo hicimos y luego habernos encontrado aquí es algo así como una señal divina.
no puedo evitar girar los ojos ¿señal divina? ¡si claro!
Al notar mi gesto su rostro se entristece un poco y casi llego a sentirme culpable. CASI. Porque al parecer esta joven tiene algún problema con la tristeza. no dura ni dos segundos “triste”
-creo que tendré que acostumbrarme a tu sinceridad, es algo bueno pero a veces resulta algo incómodo. ¡No te preocupes! ¡me acostumbraré!- Posa una mano en mi brazo.
¡¿a qué horas suena el despertador maldita sea?!
Esto tiene que ser una puta pesadilla.
Miro el cielo ¡¿por qué?! me pregunto ¡¿qué carajos he hecho mal para que me pasen estas cosas!? ¡maldición!
-Debo irme- digo poniéndome de pie y levantando a Horus conmigo, pero este se enoja un poco al alejarlo de la diversión con su hermanito y empieza a ladrar. Vuelvo a suspirar. Si sigo suspirando tanto mis pulmones pronto tendrán una sobrecarga de aire si eso existe.
¡Paciecia!¡paciencia!¡necesito paciencia! porque creo que en los últimos meses agoté hasta la última gota que me quedaba.
-¡Norma!- me detengo dándole la espalda a esa chica que al parecer está lo suficientemente loca como para intentar entablar una conversación conmigo-Sé que puedo parecer molesta, pero realmente me alegraría saber que voy a tener-hace silencio por un segundo-ya sabes… algo de compañía cuando venga al parque- Parece nerviosa. Suspiro de nuevo. sé que no debería hacer esto pero ¡bueno! últimamente mi vida se ha enredado tanto que probablemente estoy demasiado mareada como para tomar cualquier decisión acertada.
Me giro por fín, ella mira el suelo, en algún momento levantó a su mascota y la tiene entre sus brazos, parece una niña pequeña, sola y perdida. Justo como yo hace tiempo y aunque parece tener mi misma edad creo que la vida la venía tratando bien hasta que se estrelló con la realidad.
La gente en su vida la traicionó
-¿vives lejos?- Pregunte
Editado: 09.10.2023