Capítulo-13

Esme

Mery envió a Jungkook un mensaje de texto indicando que pronto llegaríamos, luego de unos segundos el respondió diciendo que nos esperaba en la entrada del lugar.

Mi cumpleaños había pasado ya hace una semana y mi calendario no me permitió pasarlo con mi hermana, la manera en que lo celebré fue con un pequeño pastel frente a una pantalla haciendo un live junto a las chicas y nuestros fans. Mis padres se encuentran en Estados Unidos así que me llamaron y enviaron mensajes de felicitación.

Mery aunque antes contaba con más tiempo libre ahora es casi imposible encontrarla, usualmente está en la universidad, en casa, pasando tiempo con Tae-Hyung entre otras cosas.

Ahora su vida es más ocupada.

Mientras Mery pagaba la tarifa del taxi, observe el establecimiento el cual se encontraba con muchas personas haciendo fila para poder entrar, dirigí mi mirada hacia la fila esperando encontrarme por ahí a Jungkook.

Cualquiera de las dos hubiésemos podido venir en un automóvil, pero mi hermana prefirió usar el transporte público.

– ¿Ya vistes a Jungkook? – Mery se acercó a mí.

– Aun no.

– Le enviare un mensaje de texto – tomo su móvil y empezó a escribir.

Luego de un momento observamos a Jungkook dirigirse hacia nosotras, el llevaba cubre bocas al igual que nosotras ya que no podíamos ser descuidados, agregando el riesgo que teníamos de ser vistos – ¿Entramos?

Traía el cabello un poco desordenado y esto lo hacía verse más genial de lo usual. Su vestimenta era casual, camisa manga larga negra y pantalones negros, por alguna razón cualquier vestimenta que el use puede lucir sostificada.

Sus  ojos se entrecerraron en el momento en que sonrió, tengo que admitir que tiene ojos lindos al igual que él.

– Pero la fila es larga – hablo Mery – además Esme es menor de edad ¿Cómo entrara ahí?

En la mayoría de estos lugares se tiene prohibida la entrada de menores de edad y aunque en américa  ya tengo la mayoría de edad, aquí aún no la tengo y en los otros sitios que he podido entrar es con la ayuda de Lee Kang Woo, así que mi entrada a este lugar no es 100% segura.

– De eso ya me encargue – contesto Jungkook dirigiendo su vista hacia mí.

Su respuesta me sorprendió por un momento.

– Ok.

Caminamos hacia la entrada, Jungkook dijo algo al guardia y logramos entrar sin algún problema.

Note que en el local había muchas personas tomando y bailando las canciones que el DJ ponía.

Jungkook se hacía paso entre las personas hacia unas escaleras que llevaban al segundo piso. Ellos caminaban de prisa y Mery notó que me quedaba atrás por lo que me cedió su lugar e hizo que yo siguiera los pasos de Jungkook.

Entramos a una sala donde se encontraban pocas personas, al parecer era la zona VIP – Jungkook se acercó a la mesa que se encontraba en una esquina de la habitación, tomamos asiento y alguien se acercó a nuestra mesa.

– ¿Tomaran algo? – pregunto un chico de estatura alta, cabello oscuro y de ojos atractivos.

– ¿Te parece bien una Coca-Cola? – pregunto Jungkook dirigiéndose a mí.

La verdad es que tenía la ilusión de probar algo de alcohol, Mery había prometido que al cumplir la mayoría de edad y pudiera tomar alcohol, ella debía de estar presente y este me parecía un buen momento para hacerlo.

Pero no tuve otra opción más que contestar – Si, está bien.

– Para mí un Monkey Gland  – hablo Mery

– Entonces sería una Coca Cola, un Monkey Gland y una cerveza – dijo Jungkook. Observe que el chico asintió y se retiró.

Una Coca-Cola no era lo que tenía en mente, pero podía iniciar la noche con ello, cuando tenga un momento a solas con Mery se lo recordaré.

Jungkook y Mery hablaban mientras que yo observaba a mí alrededor. Las paredes eran de un color oscuro y unos discos dorados decoraban el lugar.

En el segundo piso la música no era tan alta así que no golpeaba nuestros oídos ni interrumpía las conversaciones y eso me gustaba, el que fuese más tranquilo.

El sonido de una llamada interrumpió la conversación entre Jungkook y Mery.

Mery observo su móvil y se levantó de su asiento para contestar la llamada.

Jungkook me sonrío y yo le devolví el gesto – ¿puedo hacerte una pregunta?

Asentí con un poco de curiosidad por saber lo que preguntaría. – Últimamente me he estado preguntando esto. Además de los juegos ¿Qué otras cosas te gustan?

– ¿Cosas que me gustan? – Asintió – Me gusta leer uno que otro libro, escuchar música y dormir supongo.

Tenía algunas otras cosas que me gustaban como mis Sugar Crush como diría Rita pero sería extraño que se lo mencionara. Principalmente porque uno de ellos es un integrante de BTS.

– Umm, ¿qué tipo de música escuchas?

Sus preguntas me tenían un poco desconcertada, era la primera vez que el preguntaba por mis gustos.

– Usualmente escucho mucha música en inglés de artistas como Adele, Ed Sheeran, Taylor Swift, Cold play, Harry styles, un poco de español y otro poco de kpop – ¿BTS? – Si, entre otros, mis listas son bastante variadas.

Espera un momento.– ¿Cómo sabes que me gusta escuchar su música? – Y verlos – pensé.

– Bueno – encogió sus hombros – Me gustó autografiar tu regalo de cumpleaños.

¿Mi regalo? Mi corazón está empezando a palpitar un poco más rápido desde hace un minuto. ¿Cómo podría responder sin demostrar mi lado fanático?

– Ahh, supongo que Mery te lo menciono.

– Si, en realidad es un regalo de parte nuestra, sería una sorpresa que te daríamos hoy, también tengo algo más – dijo rebuscando algo dentro del bolsillo. – Espero te guste.

Me entrego una pequeña cajita de color Rosa, la abrí y me encontré con un hermoso brazalete. Creo que este ha entrado como uno de los mejores cumpleaños de toda mí vida. Lo cogí cuidadosamente y lo observe detenidamente, traía un pequeño adorno de conejito. El conejito Cooky de BT21 o sea él en versión pequeña y animada.