Capítulo 17.

Consejo:

No saques conclusiones apresuradas, las cosas en la novela pueden cambiar en cualquier momento.


 

Besar a Stars ¿Cuántas veces soñé con éste momento? ¿Cuántas veces deseé que él me viera entre todas sus fans?

La Valeria que conoció a un Stars salvador habría chillado emocionada con el beso pero ahora no sé que pensar.

No voy a mentir, mi cabeza explotó al sentir sus labios sobre los míos, mi corazón se aceleró como nunca antes cuando comenzaron a moverse de manera suave y tranquila, sus labios suaves son mejores de lo que me imaginé miles de veces pero… no solo siento emoción,  también me siento engañada conmigo misma al pensar que había superado a Stars.

No estoy disfrutando el beso, su mirada de indiferencia mezcladas con sus palabras hirientes cuando tenía quince años se reproducen en mi cabeza sin parar, causando que me aleje unos centímetros  para mirarlo a los ojos, estos de un verde claro me miran con curiosidad y en esas milésimas de segundos me doy cuenta de que no entiendo como alguien tan bello, que lo tiene todo y parece ser tan distinto, tan bueno, me lastimase sin importarle cuanto juré amarlo.

Así que sorprendiéndole le devuelvo el beso volviendo a juntar nuestros labios, pero sin meter al corazón en esto. Pensando con la cabeza fría, imaginado un momento en donde le diré quien soy y lo mucho que me lastimó, la venganza por algo que parece tan insignificante puede parecer absurda, pero no lo es para mí. Él corresponde el beso con calma, con miedo de que me aleje. Sus manos van hasta mis mejillas acariciándolas levemente.

Un carraspeo logra sobresaltarnos y ambos miramos hacia la puerta abierta del camerino donde Isaac Wesley nos mira con los brazos cruzados.

Mierda.

Stars desordena su cabello incómodo y yo quiero desaparecer en este momento. No sé si las relaciones entre jurado y concursante están prohibidas pero de seguro que sí, por el simple hecho de que ese miembro del jurado pueda darle ciertas ventajas a esa persona.

—Golpeé la puerta unas cinco veces, pensé que estabas ocupado pero no de esta manera.

—Isaac…

—Tranquilo Stars, tú me cubriste una vez no pienso decirle a nadie lo que vi —Los ojos oscuros de Isaac se encuentran con los míos—. Solo les doy un consejo, sean más discretos y usen el pestillo. Lo último que necesitan es que alguien los vea así.

Aparto la mirada sonrojada, Stars posa su mano en mi espalda y contengo el impulso de sacarla de un manotazo.

—Gracias, amigo.

—Venía a decirte que tenemos reunión con la productora.

—Voy en un minuto.

Isaac asiente y sale de la habitación, yo suelto un suspiro aliviada.

—Oh maldición —Digo apenada—, él no debió ver eso y tampoco puede volver a ocurrir.

—Belle… no hay problema, Isaac no dirá nada —Se acerca para agarrar mi mano y sin poder contenerme me aparto—. No hagamos esto de nuevo.

—No estoy haciendo nada, Stars. No te equivoques, eres guapo pero no mi estilo.

Bien, necesito hacerme la difícil, no tendrá nada sencillo conmigo y cuando él se enamore de Belle lo bajaré de esa nubecita estúpida en la que ha estado toda su vida.

—No me conoces —Dice llevando sus manos hasta los bolsillos delanteros de su jeans—. Dame una oportunidad, una cita mañana.

Creo que se olvida de nuestra salida por hamburguesas, pero él tiene razón eso no fue una cita.

—Mañana salgo con Nick.

Él parpadea sorprendido.

—¿Lewis? ¿En serio?

Eso me enoja y poniendo las manos en mi cadera lo defiendo.

—Él es muy lindo, por lo menos me pidió una salida —Digo y él frunce el ceño —, es todo un caballero.

—¿Te gusta, Lewis?

No respondo, porque lo que quiero hacer es soltar un “¡Sí!” en toda su carita bella de estrella.

—Lo estoy conociendo, déjame decirte que me cae mucho mejor.

—Lo haces de nuevo, estás haciendo prejuicios sobre mi ¿A caso no te estoy pidiendo una cita también?

—Él no me besó.

Él bufa cansado.

—Tu me provocas muchas cosas Belle —Da media vuelta y en su mesa donde esta el espejo busca un bolígrafo, rompe un papel y anota algo, camina junto a mi y me extiende el papel—. Es mi número.

—No lo quiero.

—¿Qué te hice? —Pregunta y quiero reír en su rostro—, pareces odiarme.

Para evitar soltar unas cuantas malas palabras agarro el papel que me extendió de mala gana.

—Te mandaré un bonito emoji, nos vemos Stars.

Camino hasta la puerta y su voz me detiene.

—No olvides que me respondiste el beso, intentas actuar indiferente pero creo que te enoja que yo te guste.

Aprieto los dientes.

—Ególatra —Digo antes de salir apretando la hoja en mi mano con fuerza. Aspiro hondo porque mi humor no es agradable y deberé soportar a Zamara toda la tarde aún antes de ir a casa.

—¿Dónde demonios te metiste? —Pregunta cuando llego a al escenario, Lydia está con ella.

—Baño.

Ella rueda los ojos.

—Belle, en tu ausencia nos pusimos de acuerdo con el tema que van a interpretar.

—¿En serio? —Pregunto emocionada—. ¿Cuál será?

—Queremos apostar en alto —Dice Zamara sonriente—. Seremos princesas, recrearemos una escena de la película de Frozen —Abro los ojos sorprendida—. “Finalmente y como nunca" De Anna y Elsa, obviamente yo seré Elsa.

Lydia asiente sonriente.

—Es una canción divertida y potente, hacia la parte final sus voces deberán destacarse por la letra diferente de la canción, creo que si manejamos eso podemos ganar.

Asiento de acuerdo.

—¡Hora de practicar! —Chilla Zamara y sé que se viene los dolores de cabeza.

🎵🎵🎵 

—Tu madre está tardando —Dice Esther y yo asiento impaciente.

—¡Allí viene! —Digo entre emocionada y aliviada.

El auto estaciona frente del Colegio, Esther sube primero en la parte de atrás y yo la sigo.