Capítulo 14

—Vamos Blake no es tan malo—Hablaba Nadine detrás de mi.

—Esto esta muy mal, es pésimo,llevo solo dos días aquí y él me ha humillado esta mañana ha tirado mis cuadernos y ni siquiera le he hecho nada, prefiero ahorcarme con un fideo que pasar tiempo con Black—Apresure mis pasos.

—Por lo menos les exigio a todos que no te hicieran bullying —Sus palabras me detuvieron en seco, giré sobre mis talones para mirarla de frente—Hoy en la mañana les dijo a todos que se detuvieran y si el dice algo se cumple—Eso explicaba porque nadie además de él me había molestado, ¿Pero por qué? tal vez el queria tener el privilegio de ser el único que pueda joder mi vida.

Volvi a retomar mi camino, tenia hambre, al llegar al comedor, me di cuenta de algo había olvidado mi billetera, ¿Por qué tengo que ser tan despistada?, si sigo así un dia de estos olvidare ponerme las bragas .

Le puse excusa a Nadine que no tenía hambre y que la esperaría en la mesa, busco una mesa y encuentro una en el fondo, camino hasta ella y me siento, pasan cinco minutos y Nadine sigue aún en la fila del almuerzo, me recuesto en la mesa utilizando mis brazos como almohada.

Senti que alguien tocaba mi hombro, levante mi cabeza y me encontre con un par de ojos celestes, Gus puso una bandeja con comida delante de mi y se sento a mi lado-Vi que no tenias comida y decidi traerte algo.

—No tengo hambre—Miento, mi estómago moria por darle una mordida a esa hamburguesa.

—Tienes que comer—Giro los ojos, agarro la hamburguesa y le doy un gran mordisco, se siente tan deliciosa—Sabia que tenias hambre, lo puedo notar en tu cara de exitación al comer la hamburguesa -Se rie.

Sigo comiendo en silencio bajo la atenta mirada de Gus lo cual ya me esta incomodando.

—Perdón me tarde un poco la fila estaba larga—Nadine se sienta y observa con curiosidad a mi acompañante —Al parecer ya hiciste un nuevo amigo, por cierto ¿Pensé que no tenias hambre?—Señala la bandeja que esta frente de mi, la cual ahora esta vacia, solo sonrio como una niña que acaban de descubrir haciendo una travesura.

Nadine pone toda su atención a su comida, ninguno de los tres dice alguna palabra lo cual es incómodo bueno lo es para mi.

—¿Alguien sabe dónde puedo conseguir un trabajo?—Decido hablar por fin captando la atención de ambos.

—¿Para qué quieres un trabajo?—Pregunta Gus.

Normalmente le respondería con un comentario sarcástico pero hoy no estoy de humor 

—Necesito algo para distraerme y también quiero tener algo de dinero extra—Me encogí de hombros.

—Puedes distraerte conmigo—Comenta Gus. Giro los ojos ante su comentario—Conozco dos lugares en los cuales están buscando empleados puedo pasarte las direcciones, dame tu número telefónico para que te lo pasé.

—¿No puedes escribir la dirección en un papel? —Niega—¿Esto es una excusa barata para obtener mi número de teléfono? —Gus lleva una mano a su pecho y se hace al ofendido.

—Me ofendes que digas eso, no es una excusa barata es una de las mejores siempre funciona y si quería obtener tu número —Sonríe —Y bien, ¿Me darás tu número? —Niego—No me dejas otra opción.

De su bolsillo sacá un teléfono que reconozco enseguida, reviso el bolsillo de mi camisa, en definitiva ese es mi teléfono, intento arrebatarle el aparato pero él es más rápido y me lo impide, el sonido del teclado telefónico me permite saber que está llamando a alguien, segundos después un teléfono empieza a sonar, de su bolsillo sacá el objeto del cual proviene el sonido, cuelga la llamada y me entrega mi teléfono no sin antes decirme que más rato me pasará la dirección, se levanta y se va.

Miro en dirección donde Nadine estaba, pero no hay nadie ¿ En qué momento se fue?, ni siquiera me avisó que se iría, mi teléfono empezó a vibrar seguro era las direcciones que Gus me pasaría, observé la pantalla pero no era así, era una videollamada de Michelle, pensé que seguiría molesta pero parece que ya se pasó su enojo.

Conteste la videollamada, la pantalla se movía de un lado a otro, haciendo que la imagen se vea borrosa, una muy agitada Michelle se encontraba a través de la pantalla.

—¿Por qué corres?—Preguntó.

—Saltamontes... Este no es un buen momento no puedo hablar estoy escapando —Habla entrecortada por el cansancio.

—Pero si tú fuiste quién me llamó—Escucho como murmura un débil cierto— ¿Michelle de quién estás huyendo?.

—Esto es culpa de Oliver , llegué a mi casa y no lo encontré, empecé a buscarlo por todo el barrio y adivina donde lo encontré, estaba fornicando con una gata y ¡¡Sin protección!!, Al verlo entré en pánico pensé la pendeja de Blake aún no puede ser abuela entonces tome a Oliver y empecé a correr entonces apareció la dueña de la gata y empezó a correr detrás de mí, y así es cómo llegamos hasta aquí—Habla con voz débil.

—Michelle ese no es Oliver—Sus pasos se detienen en seco y frunce su ceño.

—Por supuesto que es Oliver, eres una pésima dueña no reconoces a tu propio gato—Le doy una de mis clásicas miradas de eres una idiota—Te lo voy a probar, este gato es blanco, es siamés y tiene un collar que tiene su nombre—Observo el collar del gato—Este collar ¿rosado?... que dice Pelusa... Prueba que soy una idiota y este no es Oliver...bueno saltamontes si no te hablo más tarde es porque me encerraron por robar un gato. Adiós—Cuelga la llamada.

El resto de clases que faltaba paso muy rápido, Gus me había pasado ambas direcciones por WhatsApp, coloqué la primera dirección en el GPS y empecé mi camino hacia el lugar indicado.

Al llegar al lugar se trataba de una cafetería, era algo rústica pero elegante, entré al lugar, el olor a galletas y chocolate caliente llego a mis fosas nasales, me acerque al mostrador donde se encontraba una señora de edad, su cabello estaba tornado de un color gris, en su rostro ya se notaban unas cuantas arrugas, sus ojos eran grandes de un color café oscuro, al verme me dedico una enorme sonrisa.