Perro de apoyo
Un pequeño perro, camina con un ramo de flores en su hocico. Algunas personas que lo veía le lanzaban piedras, otros lo ignoraban y unos pocos le pusieron un canastito en el cuello para que cualquiera le regala comida.
El animal llegó a una casa y se metió por una ventana que estaba abierta encontrándose en una pequeña habitación llena de flores que él mismo trajo, y todo por la persona que estaba en cama; un viejito que estaba muriendo lentamente.
El señor se alegra de la presencia del perrito, ya que, aunque estuviera muriendo, nadie lo visitaba. Por lo tanto, por un momento se sintió en compañía.
El canino brinca encima suyo, acostándose sobre él y dejándole el canasto de comida y las flores. Lamió toda la cara, sacándole un par de sonrisas al señor. Sin embargo, este termina abrazando al perrito para dar su último suspiro.
El perro se queda con él por un tiempo, como asegurándose de que toda su vida se haya ido para luego salir de la habitación
Ladra en un intento de comunicarse, como si quisiera expresar que el anciano ha fallecido. Después de un tiempo, se aleja y empieza a tomar flores de los jardines por donde pasa.
Siguiendo el aroma que personas como el anciano dejaban, persigue el olor de una muerte solitaria.
IDEA
La lluvia cubría el césped y creaba un aroma agradable, insonorizados los llantos, cubriendo los paraguas negros con agua de lluvia, la fosa se llenaba lentamente de agua y la tierra se convertía en lodo, las gotas resbalaban con el barniz de la caja, el descenso fue lento y lamentable, triste y sin vida, ver como tu vida entera, la persona a la que más amaste descendía lentamente a un hoyo oscuro y sin luz, y que ahí se permanecería por la eternidad, ahí estará hasta que yo muera y ahí estará hasta que mis nietos mueran, no volverá a moverse, no volverá a hablar y no volverá a escuchar, sus sentidos ya fueron arrebatados y su alma se ha ido de su momentáneo encierro en el cuerpo terrenal, su breve encierro, su encierro de unas cuantas décadas, en esa caja ya no estaba ella, ella se convirtió en un recuerdo, una idea.
Podemos imaginar lo que haría en un millón de situaciones y ninguna estrá correcta, porque las personas son tan complejas que nunca llegaríamos a comprender en su totalidad, es imposible guardar en tu cerebro una personalidad, una vida además de la tuya, simplemente no se puede, entonces cuando deja de existir, se convierte en una versión plana y sin vida, en una versión simplificada de su personalidad, en una plástica y simple, tan estúpidamente sencilla que con unos cuantos adjetivos cualquiera podría tener esa misma idea de ella, sin captar sus matices, sus ideas, sus talentos o sus reacciones, podrías convivir años con esa persona y jamás sabrás lo que realmente está pensando, esto no pasa conmigo, yo tengo la personalidad de mi querida tallada en mi cerebro, como si de runas o pinturas rupestres se trataran la tengo en mi cerebro, sé cada una de las palabras que utilizaba, sé cada detalle, cada costumbre que tenía, utilizando la lógica sé cómo se comportaría y como la marcaría cada suceso de su vida, como cambiaría su comportamiento en cada situación, fruto de mi estudio, cuando enfermó yo sabía que su muerte era inevitable, así que aproveché mientras vivía, usé cada cosa que tenía al alcance para entenderla mejor y recordarla tal cual era, usé la psicología, le puse pruebas, le saqué radiografías, tomaba nota de todos sus comportamientos, mientras dormía apuntaba sus hábitos de sueño, la desconecté para ver como agonizaba, esperé hasta que muriera para aprender y entender como el alma se iba de sus ojos, lo entendí todo, necesitaba verla en situaciones agonizantes y cercanas a la muerte, necesita verla desesperada ,necesitaba ver como su rabia la invadía, como realmente era, su paranoia, su mirada de traición, su corazón roto y sus lágrimas incontenibles, ver como su amor por mí se desvanecía por mi traición, ver como nacía un odio hacia mí por su asesinato, pero las ventajas de que ella sea una idea es que puedes borrar algunos sucesos, alterar la historia para ella, eres un Dios para ella, en esa idea tuya, tú dominas el mundo, tú dominas su cabeza, tú dominas sus acciones, yo quise hacerla lo más fiel posible, pero no está mal usar tus poderes de Dios para mejorar.
Después del funeral pude por fin usar estos años de estudio, recurrí a las estadísticas, a las invariabilidades que cree para ella, recreé como si fuera un viaje normal, un regreso a nuestro hogar, imaginarla y crearla en mi mente, volver a verla, la mente es poderosa y logré traerla de vuelta, al menos para mí, tantos años de estudio, matarla valió la pena, valió la pena para que fuera renacida en mi mente, que quedara inmortalizada, que quedara como una idea, porque una idea nunca muere, y nunca será descendida en una caja fría de madera con esa asquerosa tierra lodosa.