ROMANTIC ROUTE - CAPITULO 11 (6-10)

Sasuke- MC, ¿qué es lo que quieres hacer?

(¿Qué ES lo que quiero hacer? En los tiempos modernos, estaba a punto de hacer realidad mi gran sueño. Todavía quiero hacer ropa que le dé alegría a la gente. Eso no ha cambiado. Pero eso ya no es lo único que quiero.)

Respirando profundamente y con determinación, miré a Sasuke.

MC- Lo siento, pero... no voy a volver. He conocido a alguien en este período de tiempo con quien quiero estar por encima de todo.

Sasuke- Ya veo.

El rostro de Sasuke permaneció inexpresivo mientras asentía con la cabeza.

MC- ¿No te sorprende?

Sasuke- No. Te has enamorado de Ieyasu, ¿verdad?

(¿Era sólo una suposición, o...?)

MC- ¿Cómo lo sabes?

Sasuke- Fue obvio cuando los vi a los dos juntos en la reunión de hoy. Y no eres sólo tú. Ieyasu siente lo mismo. ¿No es así?

MC- Sí, así es.

(Soy tan importante para Ieyasu como él lo es para mí. Incluso antes de que lo habláramos, siempre fue amable conmigo a pesar de esa actitud quisquillosa suya. Ha estado preocupado por mí desde que nos conocimos.)

MC- Me ha cuidado tan bien, y quiero hacer lo mismo por él. Él ignora sus propias necesidades y se presiona demasiado, así que alguien tiene que cuidarlo. Quiero estar ahí para él cuando las cosas se pongan difíciles. Y especialmente quiero estar ahí con él cuando las cosas están bien.

(Puedo hacer ropa en cualquier periodo de tiempo, pero el Ieyasu sólo existe aquí.)

Sasuke- Realmente lo amas, MC.

Su tono tranquilo y comprensivo me hizo entrar en razón.

(Oh cielos, estoy actuando como un cachorrito enamorado.)

MC- Lo siento, ¿fui muy efusiva?

Sasuke- Sí, un poco.

Sasuke se encogió de hombros, pero parecía entender.

Sasuke- Estoy feliz de que hayas decidido quedarte en este período de tiempo.

MC- ¿Qué? ¿En serio?

Sasuke- Porque yo también he decidido no volver.

(No me digas que Sasuke también se ha enamorado.)

Sasuke- Lord Kenshin está perdido por su cuenta. No puedo dejarlo. Y le debo mucho, puede que nunca sea capaz de pagárselo.

Con una mirada lejana en los ojos de Sasuke, probablemente recordaba los últimos cuatro años que pasó aquí.

Sasuke- Y si me voy, Yukimura estará en un gran problema. Tendría que ser el único compañero de bebida de Lord Shingen y Lord Kenshin. Eso no sería justo para él.

MC- Eso suena como si fuera un montón de trabajo. Pero una fiesta como esa suena muy divertida. Desearía poder verla.

Sasuke- Sí, es divertido.

Una suave sonrisa rompió la habitual expresión estoica de Sasuke.

(Así que Sasuke ha encontrado gente en este tiempo que lo hace sentir como en casa. Desearía poder agradecer personalmente a Kenshin, Shingen y Yukimura.)

Al llegar cuatro años antes que yo, siempre imaginé que Sasuke debió haber tenido una vida difícil. Estaba muy contenta de saber que no había estado solo todo ese tiempo.

MC- Por lo tanto, vamos a seguir siendo amigos del futuro.

Sasuke- Sí. Una vez que esta lucha se calme, podré pasar a visitarte de nuevo.

(Se refiere a entrar por mi techo.)

MC- Eso suena bien, pero ten cuidado. Las fuerzas de Oda conocen tu cara, así que es peligroso para ti estar en su territorio.

Sasuke- No te preocupes. Soy un...

MC- ¿Ninja? Sí, lo sé.

Sasuke- Sí, así es.

(Realmente confía en sus habilidades ninja.)

MC- Todavía me preocupo por ti, pero siempre espero con ansias nuestras charlas.

Sasuke- Yo también.

Sasuke me tendió la mano.

Sasuke- Bueno, MC, hay que disfrutar de nuestras vidas en el período Sengoku.

MC- ¡Si!

(Puede que estemos en lados opuestos, pero Sasuke siempre será mi amigo.)

Nos dimos la mano mientras intercambiábamos sonrisas sinceras.

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(Es muy tarde. ¿Aún siguen con eso?)

El consejo de guerra estaba tardando lo suficiente para que ambos ejércitos acamparan aquí por la noche. Esperé sola en una tienda silenciosa a que Ieyasu regresara.

(Supongo que debería empacar mis cosas para estar lista para partir mañana. No es que tenga mucho.)

Cuando agarré la bolsa de tela que estaba en un rincón, algo salió rodando de ella.

(¿Qué es esa pequeña alforja? No es mía... Oops, esta debe ser la alforja de Ieyasu.)

Dejé la bolsa y recogí lo que se había caído.

MC- Oh!

Vi algo familiar a través de la abertura en la parte superior.

(¡Él guardó el Wasabi de peluche después de todo!)

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Ieyasu- ¿Qué se supone que debo hacer con él?

MC- Quiero que te lo lleves como amuleto de la suerte.

Ieyasu- ¿Eh?

MC- Tú te encargaste de Wasabi, así que ahora Wasabi cuidará de ti.

Ieyasu- No sigo tu razonamiento.

MC- No importa. Sólo llévatelo. Estuve rezando por tu seguridad mientras lo hacía. Así que tómalo como prueba de esos sentimientos, al menos.

Ieyasu- Uh... Me parece una tontería.

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(Me alegro de que lo guardara, pero ¿por qué meterlo en esta pequeña bolsa?)

Mientras miraba el mini Wasabi, la lona de la tienda se abrió.