Ikigai

Dia 1

Todo ese día me sentía extraña no sabia que hacer o que sentir, todo era tan impredecible, de alguna forma yo sentía que no era cierto, realmente ¿todo terminaría ahí? ¿todo se acabo así de fácil?

Salí a caminar sin un rumbo en especifico, me senté en una banca, me coloque los audífonos y puse labios rotos de Zoé, mi cabeza estaba completamente en otro mundo, sin darme cuenta las lagrimas volvieron, y la gente que pasaba por ahí me veía de una forma muy extraña, al principio ni siquiera me importaba lo único que quería era dejar de sentir y recordar el porque me fui, hasta ese día lo único que había pasado era sufrimiento y angustia, acompañados de noches de almohadas húmedas e insomnio, por que debería de sentirme mal por haber tomado una decisión por mi paz mental, no podía entenderlo en ese momento ni en los días siguientes.

Regrese a casa, un poco más tranquila, me recosté y mire al techo, apague mi celular por si llegabas a llamar, porque una parte de mi si quería que lo hicieras, pero la otra sabia perfectamente que seria volver al mismo hoyo de depresión, y sinceramente no quería más, ya había pasado los ultimos 3 años de nuestra relación aguantando ese circulo vicioso una y otra vez, ¿Acaso era masoquista? O porque aguante durante tanto tiempo todo eso…

Hasta ahora es una pregunta que sigue sin respuesta y dudo que algún día la tenga, no lo se con exactitud, era amor… lo dudo el amor no debería de doler, o si?

Fui a bañarme, aunque ahora que lo pienso no se si eso cuente como baño, solo me metí a la regadera con el agua más caliente que mi cuerpo pudiera soportar, y me quede inmóvil mientras el agua caía, solo podía pensar en que haría, claramente no te dedicaría más segundos de mi vida, no seguiría desperdiciando mi vida por ti, no te guardaría luto ni un segundo puesto que solo te habías muerto para mi, en ese momento solté una carcajada, cualquiera hubiera pensado que ya me estaba volviendo loca pero no, solo recordé una canción que escuchan en mi familia, herencia de mi abuelo, al parecer era de su grupo favorito, y en aquella canción hay un verso que me gusta bastante que fue el que me paso por la cabeza en ese momento “Cuando alguien muere siempre se le mandan flores, y tu ni flores vas a recibir de mi” ese grupo es bastante bueno, las letras de sus canciones son historias y creo que es una de las cosas que más me gustan, se llaman los tigres del norte.

Cuando salí de la regadera por alguna razón escuche mi celular vibrando pero, era imposible ni siquiera lo llevaba conmigo adémas estaba apagado, de cualquier forma no planeaba responderle a nadie solo quería estar sola y seguir pensando muchas cosas, buscando una respuesta a todo eso.

Me cepille el cabello y me puse desodorante, me lance a la cama nuevamente y pretendí dormir todo el día, ya había sido eterno ya no soportaba más, quería que el tiempo pasara más rápido, pero no al parecer el universo había conspirado para que esos días fueran eternos, al menos para mi.

 

Después de estar 100 años mirando al techo tratando de ver formas, llego el atardecer, era un morado precioso y por un instante me olvide de todo el daño y pensé en todas esas tardes que estuvimos en la escuela sentados viendo todos los atardeceres de todos los días, uno tras otro, desperdiciando nuestra vida académica por estar juntos, cielo santo ya ni siquiera podía recordar los momentos buenos que alguna vez tuvimos porque enseguida venían a mi cabeza todos los días malos…

En fin el cielo se apago al igual que la sonrisa que accidentalmente esta apareciendo en mi rostro, volví a la cama y recordé que no había comido nada desde la mañana, así que baje a comer algo, ahora que lo pienso creo que nadie me hablo para comer porque creo que era evidente que no estaba bien, ¿tan mal me veía?

No era que tuviera muchas ganas de comer pero me prometí a mi misma que jamas dejaría que una persona me quitara el apetito de nuevo, porque cuando lo permití no me fue nada bien…

Termine de comer y tome 3 vasos de agua evidentemente me sentía muy sedienta bromeando un poco conmigo misma creo que llore 4 litros de agua en ese día.

Por fin me recosté, ya había sobrevivido el día 1, creo que no íbamos tan mal, pero sabia que no podía engañarme aún tenia ganas de saber que iba a pasar, ¿me llamarías? O realmente todo había llegado a su fin…

Prendí mi celular y puse Kevin Kaarl, ya había llorado bastante pero que importaban 2 litros de agua más, después de hacer mi propia cama de agua casera, me quede dormida sin más...

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.