Pasamos la siguiente semana entre entrenamiento y el viaje a caballo, ha sido un viaje lento porque llevamos cargamento, cada vez que podemos nos paramos a entrenar, estamos a punto de cruzar el muro de la frontera de ciudad oscura, al llegar vemos la guardia del rey vigilando en la parte baja de la muralla.
—¿Cuál es el motivo de vuestra visita?—Pregunta uno de los guardias.
—Venimos a los juegos del rey—Contesto mirándolo fijamente.
—¿Tenéis claras las reglas de ciudad oscura?
—Si las tenemos presentes.
—Hay un camino largo de la frontera a la ciudad, podéis pasar, suerte con los apestados.
Ciudad Oscura esta en el centro de un terreno lleno de pantanos, los arboles que nos rodean son de color negro como el carbón y tienen espinas en las ramas, parece que todo alrededor esta muerto, sin vida, no se escuchan los pájaros y el suelo esta cubierto de barro, excepto por algunos caminos, además existen los apestados que son vampiros sin ningún control sobre la sed de sangre, humanos a los que los vampiros mordieron y que vagan por ahí sin ningún rumbo. Ninguno de los vampiros inmortales se quema a la luz del sol.
Caminamos durante medio día siguiendo las indicaciones del camino, hasta que al anochecer llegamos a un claro para descansar y darle agua a los caballos.
—Dafne coge las espadas y vamos a empezar con el entrenamiento de hoy.
Recogí las espadas y nos alejamos para entrenar con Roy y Talon. Estábamos practicando en lo que escuchamos algo moverse con rapidez.
—¿Qué ha sido eso?—Le pregunté a Talon.
—No lo sé—Contestó Talon.
—Shh callaros que no puedo oír nada— Dijo Roy.
De repente, de la nada, aparecieron varios apestados.
—¡Acuérdate de los entrenamientos Dafne!—Grita Roy.
Uno se me acerca por detrás, me giro y le clavo la espada en el abdomen, mientras Roy le corta el cuello a otro, oímos las voces de nuestros padres y sabemos que también estan luchando, Talon se transporta inmediatamente hacia donde ellos estan para ayudarlos, quemándolos con fuego azul, yo me giro y apuñalo a otro en el ojo con una daga, pateo a uno antes de que muerda a Roy por la espalda.
Siguen viniendo más, parece que nunca van a acabarse, son fáciles de matar pero no si viene en grupo, estoy segura que vienen derecho hacia nosotros como si alguien les hubiese indicado donde estamos.
Uno me muerde en la pierna mientras termino con los últimos que quedan.
—¿Dafne estas bien?—Pregunta Roy.
—Sí, pero me ha mordido uno.
—Ven acércate—Dice Roy preocupado y me lleva hacia unas piedras para sentarnos.
Se pone de cuclillas frente a mi para cerrar la herida con magia, Roy al ser solo medio brujo no puede usar muy seguido la magia.
—Ya esta cerrada, no deberías usar mas la magia por hoy Roy o te cansaras— Comento a Roy.
—No te preocupes por mi Dafne, deberías preocuparte mas por esa herida que podría haberte matado.
—Pero no lo ha hecho.
Nuestros padres están a salvo, Talon sabe defenderse mejor de lo que esperaba.
Seguimos nuestro camino y volvemos a encontrarnos con mas grupos de apestados, es muy extraño que viajen todos en grupo algo muy malo tiene que estar ocurriendo. Una vez que llegamos a la ciudad nos dirigimos hacia el castillo del rey, los concursantes tienen derecho a alojarse en el castillo.
—Hijos hasta aquí llegamos con vosotros, vamos a estar quedándonos en alguna posada de por aquí, prometedme que vais a cuidar el uno del otro—Dice nuestra madre.
—Te lo prometemos mamá—Asegura Roy.
El castillo esta hacia el fondo de la ciudad, en la zona mas apartada, casi un kilometro de distancia, al llegar nos encontramos un muro, mas pequeño que las enormes murallas que rodean casi todo nuestro reino y hay varios guardias ubicados en el portón de la entrada.
Nosotros ya nos hemos cambiado y llebamos puesta la armadura de los participantes del torneo, además de una capa que nosotros hemos añadido para cubrir mis orejas redondas todo el tiempo que sea posible. La mayoría de inmortales tiene las orejas acabadas en punta, excepto algunas criaturas extrañas que habitan en el reino.
De repente las puertas del castillo se abren y sale un hombre por ellas como si nos estuviese esperando.
—Sois más participantes del torneo por lo que veo, seguidme—Dice aquel hombre extraño.
Le hacemos caso y nos adentramos hacia unos jardines inmensos y el castillo se puede ver rodeado de ellos. El castillo esta construido con cuarzo negro, es muy elegante, pero a la misma vez parece sacado de una película de terror, no sé si terminaré haciéndome a la idea de que este va a ser mi hogar por un tiempo.
—Mi nombre es Lorcan y soy el representante del rey y vuestro entrenador en los juegos, el rey esta de viaje estará aquí la semana que viene, de momento os llevaré a vuestra habitación para que os instaléis.
Y así lo hace nos lleva a una pequeña salita que parece un comedor con una mesa en el centro y hay varias puertas alrededor, mientras examinamos el lugar descubrimos que son las habitaciones, cada una con su baño propio, nos encontramos en el piso superior del la parte este del castillo.
—Mañana en la noche será la celebración de inauguración de los juegos en la sala del trono y pasado por la mañana empiezan los juegos, instalaros—Dice Lorcan y sin más desaparece de la habitación.
En ciudad Oscura no se permite entrar mas especies de inmortales aparte de vampiros y humanos, aunque se hace una excepción con los que participan en el torneo, esta prohibida la magia dentro de sus fronteras y también las transformaciones en los metamorfos.
Cuando inspeccionamos el lugar descubrimos que cada puerta es una habitación con un vestidor lleno de ropa y un baño propio para cada uno, nos cambiamos y después nos vamos a recorrer el castillo.
El castillo esta dividido en varias alas, tiene tres plantas y varias torres, además de una sala de reuniones que es también comedor y la sala del trono donde se celebran las fiestas, es un lugar inmenso.