~Narra Liam~
Salgo de casa confundido, se que suena egoísta pero esperaba que dijera 'iré contigo' pero que idiota, ella no es Emma. A quien engaño me siento molesto y triste a la vez. Es una mezcla extraña lo sé pero no puedo expresarlo de otra manera. Detengo el coche y bajo, camino hacia la arena. Miro el mar si es una prueba del destino no se si la pasaremos, la amo más de lo que alguna vez imaginé pero ambos priorizamos nuestras carreras antes que la relación y eso no es bueno, me siento en la orilla. El contrato está firmado y no depende de mi, el viaje es un hecho y quisiera gritar cuán feliz me hace jugar en un club como "Juventus" pero algo me lo impide, por un momento intento imaginar mi vida sin enredos, sin amor, sin Sarah y solo compruebo que seria vacía. Respiro con pesadez, creer que la soledad me ayudaría en algo es una locura, me levanto y vuelvo al coche, conduzco a casa de mi hermana a pesar de todo sigue siendo mi refugio.
Al llegar bajo y toco el timbre, ella abre y entro. Nos sentamos en el sofá de la sala
-¿estás sola?- pregunto
-si, John llevo a Thomi a casa de su mamá. ¿No quiere viajar?- inquiere
-no lo sé. Pero no quiero hablar de eso- miro la tele la cual está encendida en una película romántica, es mi único escape ante su mirada atenta.
-te conozco Liam, si viniste es porque necesitas desahogarte. Hazlo, estamos solos- se acerca a mi y toma mi mano entre las suyas. Volteo a verla, me contempla con pena
-crei que viajaría conmigo. Se que es egoísta pero no pensé que sus estudios fueran tan importantes. Incluso más que yo- suelto sin rodeos.
-lo sé hermano, si quieres saber mi opinión también me parece tonto pero se cuanto le gusta la medicina- responde
-por ti estudiaba psicología, por ti viajo aquí, pero no puede dejar un año su carrera por mi- digo un poco molesto
-eso es porque yo soy especial- socarronea, pero no es momento de bromear, la miro con fastidio -bien nada de tonterías. Quizás esta muy adelantada por eso no puede dejarlo en pausa- dice pensativa. Suena el timbre, se levanta a abrir antes de hacerlo gira a verme -quizas solo quiere hacerte sufrir. Devolverte un poco de tu propia medicina, tu también lo hiciste en su momento- se encoge de hombros. No lo creo, Sarah no jugaría con algo así.
Al abrir Emma pregunta si la convenció ¿esta aquí? Ella responde que se va a África, me levanto como resorte, tiene que ser una broma, me paro justo detrás de mi hermana, Sarah levanta la vista y me ve. Nuestros ojos se encuentran
-mejor los dejo solos- habla Emma, sube las escaleras y desaparece.
-no tenías que enterarte así- susurra.
-imagino es el pretexto perfecto para no acompañarme- suelto
-no, acabo de enterarme y ...
-ya no importa Sarah- la interrumpo. Salgo de la casa y encamino a mi carro, ella sube al mismo tiempo que lo hago
-hablemos por favor- su voz se quiebra y me siento fatal por tratarla así pero me duele. No sé si pueda soportar un año sin ella, ni siquiera la miro
-en el departamento- respondo. Enciendo el motor -ve en tu auto- Sin decir nada baja, cierro los ojos unos segundos ¡debo calmarme!
Llego al departamento y bajo, Sarah entra a los pocos segundos, luce triste y no me gusta verla así, se sienta en el sofá la imito solo que lo hago en otro más alejado. Mira un punto fijo
-¿quieres terminar conmigo?- cuestiona sin mirarme
-no- respondo fríamente, gira su rostro y me observa
-me siento fatal, por un lado estás tu, la persona que más amo y por otro están los estudios y esas personas que necesitan nuestra ayuda. No sé que hacer, te fallo a ti o a ellos- cubre su rostro con ambas manos.
-haz lo que sientas Sarah, te dije que respetaré tu decisión. Solo depende de ti- remojo mis labios. Odio pasar por algo así quiero que me acompañe claro que lo quiero pero ella no siente hacerlo -mirame- le ordeno, quita las manos y levanta la vista, su labio inferior tiembla y deseo abrazarla con fuerzas -se que ya tienes en claro lo que quieres hacer, solo no te atreves a decirlo. Si temes a que termine contigo eso no va a pasar pero ten en cuenta que allí no tendrás señal en el móvil ni siquiera para un mensaje de texto- me pongo de pie y camino al dormitorio. Doy un portazo, no suelo actuar así pero no puedo controlarme, llevo mis manos al cabello y lo alboroto frustrado. Me llega un mensaje, miro la notificación y veo que es en una red social es Lena *Me acabo de enterar que viajas a Italia. Felicidades, si quieres la fiesta de despedida escribeme* lo dejo sobre la mesa de noche. La puerta se abre
-Ingrid acaba de llamarme, esta muy mal porque Coleman viaja- volteo a verla
-¿él va contigo?- inquiero elevando una ceja , asiente -¿quién los acompaña?-
-solo el doctor Ferrer- dice. La rabia recorre mi cuerpo pero no muestro expresión alguna
-cenare en casa de Anthon- digo caminando hacia la puerta. Me toma de la mano haciendo que me detenga
-no hagas esto- susurra
-creo que necesitas pensar y es bueno acostumbrarnos desde ahora. Luego será así, tu por tu lado y yo por el mio- espeto, salgo de allí sientiendo un dolor en mi pecho. Se que estoy comportándome como un cabron quizás así pretendo que reaccione que un año no pasara rápido.
Conduzco a casa de Anthon, confío en él es la única persona con quien puedo hablar sobre cualquier tema sin pena. Al llegar bajo y toco el timbre
-¡eh bro! Que sorpresa, pasa- se hace a un lado. Nos sentamos en el sofá, miramos un partido en silencio. Baja el volumen -vamos amigo dime ¿qué tienes? Te conozco- dice serio. Respiro con pesadez
-deberia estar feliz por el pase pero en lugar a eso me siento mal porque Sarah no quiere acompañarme- suelto de golpe
-¿por que no?- inquiere confundido
-porque debe viajar a Africa a ayudar a las personas alli-
-¿debe hacerlo?-
-es lo que quiere y no voy a obligarla-
-no sé que decirte bro, si te duele o molesta debes dejárselo en claro- habla pensativo
-le dije que lo piense pero ya se su respuesta. ¿Tu como estas?- inquiero
-bien bro, un poco cansado - responde
-¿por que?-
-Nestor se ensañó conmigo, dejo todo en cada entrenamiento pero no parece ser suficiente- respira con pesadez, frunzo el entrecejo
-soy testigo de que dejas el alma en cada partido- digo seguro
-trato de dar lo mejor de mi pero siempre me cambia en el entretiempo- suelta molesto
-deberias hablar con el y preguntarle el motivo- replico
-si voy a buscar la manera de que me de una explicación. Mejor hablemos de algo más agradable -
-si no tienes planes cenemos aquí o vamos a algún sitio-
-claro bro, como quieras podemos pedir comida y jugar a la play o ir por ahi- se encoge de hombros
-la primera opcion- digo. Ambos reimos, coge su móvil y llama a una roticeria para hacer el pedido.
~Narra Sarah~
Liam sale del departamento y mis ganas de llorar aumentan, no va a terminar conmigo pero ni siquiera nota el daño que me causan sus palabras, gestos y actitudes. Quizás siempre será el mismo, el chico perfecto con una vida sin conflictos donde todo se hace como él lo desea. Necesito caminar, tomar aire o de lo contrario enloquecere. Me detengo justo en un kiosco entro y compro un chocolate, no puede resolver mis problemas pero es delicioso.
Luego de comerlo regreso al edificio, me dirijo a la habitación Milo me observa y camina tras de mi. Lo cargo en brazos
-confieso que no pensé en ti pequeñito- hablo apenada. Se acurruca en mi pecho -no se que hacer, que es lo correcto- mis ojos se cristalizan -no quiero que se moleste conmigo de hecho ya lo esta pero ... siento rabia...- el sonido de mi celular interrumpe mis pensamientos, es una video llamada de mamá
-hola mamá- la saludo
-hola cielo- dice alegre
-¿cómo estas?- pregunto
-bien, comenzando con los preparativos para el cumpleaños de Mateito- responde
-que bueno, ya no falta demasiado- digo
-es mejor hacerlo con tiempo- sonrie -esta vez será de 'Rayo McQueen' -
-es muy bonito-
-¿qué tienes cielo?- inquiere preocupada
-nada mamá, solo estoy agotada-
-dime ¿que tienes? No creo que estas así solo por cansancio-
-no sé que hacer mamá- digo sincera
-¿a que te refieres exactamente?- frunce el entrecejo
-Medicos Sin Fronteras ha lanzado un proyecto donde estudiantes de medicina con el mejor promedio deben viajar a Africa para ayudar a esas personas pero a Liam lo transfirieron a un club de Italia y debo escoger que hacer, dejar mis estudios a un lado y acompañarlo o alejarme de él y viajar a República Democrática del Congo- respiro con pesadez
-se que es difícil pero debes hacer lo que dicta tu corazon- responde
-ese es el punto ni siquiera yo sé que es lo que quiero hacer- bajo la vista y veo a Milo dormir sobre mis piernas
-estoy segura de que harás lo correcto mi amor, confío en ti- la miro rápidamente y ella sonrie ¿cómo está tan segura?
-temo equivocarme-
-de los errores se aprende Sarah, nadie sabe que es correcto. Solo hacemos lo que creemos que es lo mejor, todos nos equivocamos alguna vez en la vida. Habla con Liam se que entenderá y respetará lo que decidas- asegura
-gracias mamá, te quiero. Siento molestarte con mis problemas-
-claro que no, espero ayudarte hija. Te amo- finalizamos la llamada. Miro en Instagram si hay alguna historia de Anthon o Liam pero no suben nada, dejo el aparato en la mesa. Suena el timbre, acuesto a Milo en la cama y encamino a abrir
-hola Sarah- saluda Isaac
-hola-respondo sorprendida, no esperaba verlo
-¿cómo estas?- inquiere preocupado
-bien ¿y tu?-
-tu no luces muy bien. No lo digo porque te veas mal es decir estas fantástica como siempre pero veo en tus ojos que algo te afecta ¿es por el pase de Liam?- inquiere
-si, es por eso- respondo
-¿puedo ayudarte en algo?- me apena no invitarlo a entrar pero no quiero más problemas con Liam
-la verdad es que no. Se supone que sólo yo tengo la solución- digo
-¿no quieres viajar con el?- pregunta
-si lo dices así suena mal, no es que no quiera pero...- pienso unos segundos en contarle o no a cerca del viaje y no me parece prudente comentarlo y mucho más afuera del departamento
-¿pero?-
-no estoy segura - finalizo
-si quieres saber mi opinión puedo dartela- dice serio
-claro-
-imagina unos segundos tu vida en Italia donde no conoces a nadie y solo esperaras a que llegue Liam. Haz una lista de las ventajas y desventajas que tienes allí, luego repitela con lo bueno y malo y decides ir o quedarte-
-gracias, eso seguro será de ayuda- respondo. Él sonríe
-debo irme, quede en verme con Deborah y ya voy tarde- dice divertido
-Isaac perdona que interfiera en tu vida pero ¿tu y Erin ...
-ella regreso a Los Ángeles y es libre de estar con quien quiera al igual que yo- se encoge de hombros. Deja un beso en la mejilla y se aleja cierro la puerta y busco un papel y bolígrafo, escribo de un lado la palabra 'Italia' y al otro 'Africa'
Bajo la primera anoto *estar junto a Liam, pasar tiempo con él, no extrañarlo, tener tiempo libre para leer y conocer la ciudad, hechar de menos a Emma y las chicas, dejar mis estudios. Bajo la segunda apunto *extrañar a Liam, estar lejos de Emma y las chicas, no ver a Milo, no poder comunicarme con ellos, ayudar a todas las personas, salvar vidas, superar mis miedos e inseguridades. Miro la lista que acabo de hacer y la releo unas diez veces, debo tener una respuesta para cuando él regrese.
Miro la hora y veo que han pasado tres horas desde que se marchó, lo extraño necesito tanto sentir sus brazos rodearme, oír una vez más decir cuanto me ama. La puerta se abre y él ingresa
-hola- saluda serio
-hola- respondo
-olvide decirte que Lena me escribió hace un par de horas- habla quitándose su chaqueta negra -no le respondí si te interesa saberlo- me paro frente a él y lo miro fijamente
-actuas como un niño haciendo berrinche para conseguir lo que quiere, me molesta que me trates así cuando yo jamás te obligaría a que me sigas. No te pediría que dejes tu carrera, tu pasión por mi. Te conocí así y no pienso cambiarte, en cambio tu quieres que viaje contigo y nada más. Sin importar lo que siento, durante horas he pensado en ti, en esa gente en los demás pero no logro concentrarme en que quiero realmente- hablo rápido, mi pecho sube y baja
-¿Quieres saber que es lo que quiero yo?- pregunta, yo asiento -que estés a mi lado, te amo como nunca antes lo imaginé. Por un momento imaginé mi vida sin ti y ¿sabes que vi?- niego con la cabeza -oscuridad, me sentí vacío. Pero tú crees que es egoísmo y puede que lo sea pero no quiero alejarme de ti. Sabes, haz lo que quieras, seguramente estarás muy ocupada atendiendo gente y pasará rapido- suelta de golpe
-asi sería si decido viajar a Africa, me la pasaría ayudando a esas personas . No saldría a fiestas- espeto
-¿desconfías de mi?- eleva una ceja
-no, no lo hago. Si así fuera viviría pegada a ti- replico
-entonces luego no reclames si salgo o no- se cruza de brazos
-no intentes sobornarme con algo así, sabes que ni siquiera podré enviarte mensajes- me molesta lo que hace -no quiero discutir-
-dime que es lo que haras- me observa serio y siento ganas de llorar, no solemos pelear. Trago en seco y siento un nudo en mi garganta, antes de responder tomo su mano y la presiono, buscando el valor para hablar.