“Mi nombre es Vince. Vivo en una mansión. Hace años tengo un problema en mis manos. Están sucias y no se limpian con nada. Tienen un color rojo intenso. He probado con agua, alcohol y otros limpiadores pero siguen igual. Las personas se alejan de mi cuando ven mis manos descoloridas. Esta situación me apena bastante. Siempre disfruté de la compañía de las personas, siempre fui muy sociable. Pero con solo verme, se alejan, no me dan la oportunidad de presentarme. A veces me acerco con una sonrisa que muestra mis dientes perfectos y salen corriendo como si fuera a comerlos. Soy bien parecido, no sé porqué huyen de mi. Incluso, lo hacen, aunque esconda mis manos. Siempre tuve un rostro atractivo, eso decían las mujeres. Hay algo que tampoco comprendo, no sé porqué todo se ve tan distinto. Es como si mi visión de las cosas hubiera cambiado. Ahí hay una persona, voy a acercarme. Pero no sé porqué reacciona así. Es como si se asustara de mí. No entiendo porqué hay como una barrera invisible que no me deja ir hacia aquella habitación. ¡No lo puedo creer! ¡Estoy dentro de un espejo! ¡Y en mis manos hay sangre! Ahora entiendo todo, ahora sé porqué huían de mi. Es porque soy un fantasma.”
por Valeria O.
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Escrito el 13/05/2019
F A C E B O O K: “Escribiendo entre las nubes”
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