-Por favor - junté mis manos por tercera vez, intentando convencer a Lily de que vayamos a ver la pelea de William.
Ésta me miró con una mueca - es viernes, se supone que tendríamos que salir, no ir a ver peleas - se cruzó de brazos - lo siento, pero no contarás conmigo ésta vez.
Suspiré rendida y la miré de reojo - está claro que no me dejarás ir sola - le sonreí al ver su expresión de fastidio - por favor, puedes invitar a Hal si te sientes tan insegura. O si tienes miedo - me encogí de hombros.
Lily me miró con sus ojos abiertos - no tengo miedo - se cruzó de brazos y tomó su cabeza - ¿por qué eres tan manipuladora? Está bien iré - dijo rascando su frente - y también Hal.
Rodé mis ojos riendo - genial, dile que nos pase a buscar, yo se donde es el lugar - chillé de la alegría mientras salto encima suya - eres la mejor ¿sabías?
-Cuando hago lo que quieres, si - alzó una ceja mientras golpea mi espalda suavemente para que la suelte.
Le saqué la lengua, mientras me dirijo al baño de la planta baja, dejando a Lily en el living.
Sinceramente si ella no está conmigo, estoy sóla. Porque papá viene muy tarde a casa, si es que no tiene un viaje laboral, y mamá hay veces que ni viene a casa por tener guardia en el hospital. Más de dos veces hemos pensado con Lily, en hacer una fiesta. Algún día será.
Saqué mi celular y marqué el número de William rápidamente.
Ayer luego de salir de la enfermería (está de más mencionar que no le conté nada a mis padres, mucho menos a mi madre), intercambiamos números. Fue sólo porque Lily quería armar un grupo de nosotros tres, y estoy más que segura que en cualquier momento agrega a Hal.
-Kelly, ¿cómo estás? - su voz sonó algo agitada, por lo que alcé mis cejas.
-¿Llamo en un mal momento? - dije intentando sonar monótona.
-Estoy entrenando, dentro de un rato es la pelea - hizo una pausa tomando aire - ¿pasó algo?
Tragué saliva y puse mi mano en la cintura - era para decirte de que iré con Lily y Hal - apreté mis labios al no escuchar nada de su parte - ¿me pasas la dirección?
-Es en el segundo callejón, de la calle Lombard - hizo una pausa - pensé que no iban a venir, creí que bromeabas - suspiró lentamente - cuando llegues di tu nombre al guardia, y que vienen de mi parte. No quiero que estén entre todo el tumulto.
Asentí rápidamente grabando el nombre de la calle en mi cabeza - está bien, y obvio que no bromeaba. Kelly Clark nunca bromea - sentí que tosió en una risa - bueno, casi nunca.
-Entonces los vea allí, y Kelly tengan cuidado. No es un lugar muy bonito - dijo en una pequeña risa.
-No te preocupes, estaremos bien Flecher - dije en una sonrisa - nos vemos dentro de unas horas - y dicho eso corté la llamada mientras abro la puerta para toparme con la cara de Lily.
-¿¡Así que no sabías la dirección?! - dijo histérica.
Reí por lo bajo al ver sus mejillas coloradas - ¿me estuviste espiando?
-No desvíes mi pregunta - me señaló - ¿dónde es?
Me encogí de hombros y me senté en el sofá, apoyando mis pies en la mesa de café - lo verás cuando lleguemos. ¿Hablaste con Hal?
-Si - dijo Lily molesta y de brazos cruzados - si el lugar da mala espina, nos vamos.
Asentí lentamente - igual estaremos en un lugar especial, y no entre toda la gente. ¿eso suma puntos a favor?
-Puede ser - dijo achicando sus ojos mientras se sienta al lado mío - ¿tus papás sabes a dónde iras?
-¿Los tuyos lo saben? - dije en una sonrisa.
-No.
-Ahí tienes la respuesta - reí ante su cara y negué lentamente.
Lily se quejó por lo bajo, y yo me relajé mirando fijamente el techo, esperando a que se haga la hora.
No se porque, pero siento un nudo en el estómago y me sienyo muy nerviosa, al saber que veré peplear a William en vivo y en directo.
Nunca fui a ver boxeo, ni mucho menos en lugar como éste. Es sólo la curiosidad de ver como son las cosas en ese mundo, no es mi culpa sentir curiosidad y la misma adrenalina de los gritos, y golpes.
Como otros, quiero entender la pasión de éste deporte y vivirlo en carne propia. Tengo la impresión que será algo genial.
Luego de comer algo (echo por Lily claro) nos pusimos a conversar sobre el tema Hal. No puedo guardar mis sospechas de que entre ellos hay algo, y me molesta un poco, que Lily no me me quiera contar nada.
El timbre sonó, y apagué todas las luces antes de salir. Cerré la puerta principal en mis espaldas, y maldije por lo bajo al sentir el viento helado golpear mi cara. No tengo ganas de abrir y entrar a buscar un abrigo, por lo que me lo aguanté y me subí al auto con la calefacción encendida.
-Segundo día de vuelta. Y ya me quieren llevar a un lugar de peleas - abrió sus ojos - no las dejaré más solas.
Con Lily reímos, mientras les digo la dirección del lugar.
No nos costó mucho encontrar la calle, ni mucho menos el callejón. Ya que se ve una fila de personas. No voy a mentir, y voy a decir que el lugar da miedo. Está en las oscuras, aunque eso tiene lógica ya que no tiene que ser muy vistoso.
Por lo visto a éstas horas no hay mucha gente circulando a los alrededores.
El edificio en donde se hacen las peleas, se lo ve abandonado y muy maltratado. Aunque en éstas peleas, debe ser normal que se hagan en un ambiente así. Yo lo llamaría clandestino.
Editado: 30.08.2018