08 - Se Dice...

☆08☆

Se Dice...

RUE:

Okey. Sé que tal vez no fue la mejor decisión que he tomado en el poco tiempo que llevo en este lado del límite. Acabo de asustar a la creadora de este mundo y puede que tarde en olvidarse mi cara y hasta entonces tendré de qué esperar. O tal vez no. Tal vez tendré que tomar otras…medidas para poder charlar con ella o algo así. Quiera o no, tengo que encontrar una manera de hablar con la madafacker de Laine.

Carajo, ¿cómo se me ocurrió que asustarla sería una buena idea solo para divertirme un poco? Aunque me encantó, lo admito. Y para ser la primera vez que lo intento, no me sale nada mal.

Por alguna razón, a cada no sé qué tanto, hay espejos, con distintas formas: rombos, triángulos, cuadrados. Todos distorsionados, deformes. Parecen falsos, traslúcidos. Y a través de ellos puedo ver el mundo real, un lugar en donde quizás a mi yo de hace meses, le gustaría estar de vuelta. Pero esto ya no es así. Prefiero mil veces estar muerto.

—Creo que ya entiendo todo —su voz me obliga a dirigir la mirada de golpe. No lo vi venir… Me doy la vuelta, me he visto obligado a no hacer como que no lo escuché porque sabe que lo he oído e incluso que he dado un salto del susto que me ha dado—. Eres solo un personaje más que cree que no lo es, ¿verdad? —Por un momento me detengo a analizar sus palabras—. Por eso dices que eres mi hermano. Solo eres una persona más. —Por un momento juraría haber detectado su tono de voz decepcionado, más que otra cosa.

—No soy tu hermano, en verdad solo lo dije para encontrarte —digo antes de que abra la boca para juzgarme—. Es cierto todo lo que te dije: No soy de aquí. Me equivoqué de lugar y necesito que me ayudes a volver. —Los ojos de Connor recuperan su brillo, parece estar alegre de mi confesión.

Que fácil ha sido convencerlo.

—Entonces, ¿si eres alguien que no viene de la imaginación de Laine? —La duda en sus ojos me mira.

—Ajá. —Respondo y me obligo a levantar un poco mis comisuras.

—Entonces tengo un lugar que te puede servir…

Esas palabras me atrapan al instante en que las escucho.

—¿Qué lugar? —Espero con impaciencia su respuesta. Solo me observa y forma su sonrisa.

—Un lugar. —Dice con orgullo de haber pronunciado las palabras.

¿Es una especie de lugar donde hay un juez que decide si puedes quedarte? Eso es lo que me suena con esas palabras.

—¿Qué lugar? —No puedo evitar contener esas palabras en mi boca.

—Se dice que te muestra y te lleva a donde tienes que ir…

Ah, no. No, no, no. Ese lugar me enseñará que debo estar en Soulvale y eso no es lo que busco. Sea como sea, no puedo ir allí sin Jade.

—No creo que me sirva…— voy a tratar de no ser tan imbécil con mis palabras.

A veces puedo llegar a ser idiota con mis palabras cuando menos quiero. Y no quiero que esta sea la ocasión. Aunque sé que no ha sido difícil convencerlo de que no soy de aquí, puede que con el tiempo ya no sea así.

O algo así me imagino. En realidad, no tengo ni idea y no quiero descubrirlo.

—¿Por qué no?—alarga la “o”, fingiendo estar ofendido y me mira—. Creo que sería una gran idea. Y resuelve las cosas que necesites, de seguro que podrás encontrar a tu amigo.

—No dudo que eso pueda ser cierto. Pero, la situación es que si voy, esa cosa me mandará al lugar de donde soy y eso no me ayudaría en este momento. —Hago una pausa. «¿Le digo o no?». Esto puede ponerlo inquieto y no sé si después de esto querrá ayudarme. Pero en esta no vida hay que tomar riesgos, ¿no?— Hay unos seres que me buscan…—vuelvo a tomar una pausa cuando veo cómo sus ojos sorprendidos me miran—, no estaría seguro estando allá. —Por fin lo suelto.

—¿Eres un delincuente, acaso? —Espera mi respuesta, pero yo no tengo una que darle—. No entiendo por qué te buscarían, si no has hecho nada malo. —Parece descolocado cuando lo dice y me mira, esperando a que le diga algo. Creo que de verdad lo he dejado pensando en lo que le dije.

—Pasar los límites está prohibido. Y eso es lo que hice . —Parece que lo he dicho mucho a la ligera, pero no lo es.

Me asusta saber que en cualquier momento pueden aparecer y borrar mi alma en cuestión de segundos. O tal vez me convertirían en uno de ellos, sin remordimiento.

Bueno, no sé si ellos pueden sentir algo cuando hacen esas cosas. Pero da igual como sea: esas cosas hacen lo que deben hacer y nunca se niegan. Deben estar por ahí en algún lugar, buscándome.

—No entiendo nada. —Dice convencido de eso.

—No esperaba que entendieras. —Digo, también convencido de que no entiende nada.

No es de Soulvale no lo entendería, es demasiado por explicar. La única forma de entender es estando allí y mantenerte lo suficiente como para ver que es todo lo que pasa.

Tampoco es que pueda explicarlo yo…

Hay muchas cosas por decir de mi mundo. Podría alterar a este, más que nada porque solo es parte de la imaginación de la chica. No creo que Connor tenga la suficiente conciencia como para entender al mundo real, las cosas que hay en el exterior y no solo lo que crea Laine en su cerebro mientras duerme.