Incierto

CAPÍTULO 1

Capítulo editado

 

Si  es  bueno  vivir,  todavía  es  mejor  soñar,  y  lo  mejor  de  todo,
despertar





























 

Tres años después.

 

—¡Krissia!, Cariño, no corras así, te puedes caer — Le decía su madre en un tono preocupado, la niña que pronto entraría en la adolescencia corría animada tras su pequeño hermano, con seis años era como un rayo para escabullirse.

—Pero mamá, Kaled no se deja atrapar, y ha tomado mis gomas — Se queja poniendo sus manos en jarras.

—¿Qué te he dicho de correr como si fueses un caballo descarriado? — Muchas veces le ha dicho que no se exponga a peligros, al parecer en un oído le entra y en otro le salen los consejos que le propina. Krissia fastidiada de sus repetitivas palabras suspira sonoramente, desde aquel fatídico día su mamá no la deja hacer deportes “extremos” cansada de que no pueda hacer lo que ella quiere, se va del jardín ha en cerrarse en su cuarto. El único consuelo es su hermano, él la adora y hace lo posible e imposible para que sea feliz.

—Deberías dejar que la niña se divierta, ya verás que pronto desearás sacarla de su cuarto — Con burla en su voz  le habla Mauro a su esposa. Cosa que no le agradó ni una pizca.

 

 

 

 

 

 

 

 

Cinco años después,
(Actualidad)
 

Estoy que muero de aburrimiento, mi casa es un total desierto mi hermano en el instituto, papá trabajando, mamá en el partido de basketball de mi hermano menor, y yo, yo pues aquí, sola con la soledad que abarca mí corazón. La razón por la cual no asistí al instituto fue por una maldita fiebre que gracias a Dios ya no tengo.

Son las tres de la tarde y como aún no he almorzando decido preparar unos emparedados, algo difícil de hacer para alguien que no sabe cocinar. Pongo unos vídeos en YouTube, para distraerme.

Un bostezo involuntario escapa de mis labios, creo que es hora de tomar una siesta, a paso lento subo uno a uno los peldaños de la escalera, ya en mi cuarto, mi cama me espera con los brazos abiertos, (En éste caso con las sábanas abiertas).

- Kris, pequeña despierta - Esa voz está perturbando mi sueño, no quiero oír nada, me giro y con una almohada tapó mi cara.

- ¡DESPIERTA PEDAZO DE MIERDA!- Quitando mi escudo afelpado, grita sonoramente esa tediosa voz, justo en mí oído. Coños, me sobresalto a tal grado que caí de culo, el suelo esta frío, mí trasero se congelará y me quedaré sin trasero.

¿Quién osa a despertarme así? Levanto la vista y me encuentro con mi hermano, quien está muriendo por soltar una carcajada, pero la retiene mordiéndose el labio inferior, qué infeliz.

- Se puede saber, ¿Qué haces en mi habitación? Y ¿Por qué me gritas? Sabes, para tu información no estoy sorda - Mi voz suena sería, justo como quería, él me ve con cara de “Le-hablo-y-me-disculpo-o-mejor-me-voy-y-regreso-luego”.

- Verás hermanita - Empezó a hablar con dulzura, eso quiere decir que necesita un favor -Quisiera saber, si te apetece salir conmigo, no has visto que bella está la noche, además creo que estás aburrida luego de pasar todo el día encerrada en casa, desde luego si no tienes nada mejor que hacer - Lo sabía y se aprovecha de que nunca tengo nada que hacer (Bueno, aparte de las odiosas tareas).

-Ya tengo planes, lo siento - Miento descaradamente, pero vamos, me gusta verlo suplicar, él es épico, además casi nunca súplica por nada.

Cierto día quería que le hiciera un dibujo, a él le quedan horribles, no soy una experta, pero algo logro hacer. Yo le dije que no, lo cual no aceptó como respuesta (Él nunca acepta un “no” por respuesta)  Por toda una semana pasó tras de mi, hasta se arrodilló y me hizo una propuesta que no pude rechazar, aún recuerdo esas bellas palabras que no he vuelto a escuchar: - "Oh, Kris linda, bella, preciosa, hermosa, la mejor hermana que puede existir, me harías el gran honor de hacer un sencillo dibujo, para esta pobre alma que sólo busca un — Está bien, Key, haré tu dibujo — Yo estoy dispuesto hacer cualquier cosa por ti, lo que tu desees, también te daré una caja de esas cosas que tanto te gustan, ¿cómo se llaman? — Sopesa unos segundos y luego dice: — Mmm, Panditas, sí, creo que así se llaman" —




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