Incógnita o Deseo

4- Algo totalmente nuevo

Tuve un pequeño dejabu al escuchar su voz. No fue uno fuerte, sino que senti que ya conocia esa voz.

Su voz era fuerte y muy decidida. Solo me quede en silencio.

—¿Sabes porque estas aquí? —Continuo al ver que no dije nada.

—Supongo. solo... solo no quiero mas  amenazas hacia mi y mi madre.

—Si eso es lo que quieres —Se incorporo y apoyo sus codos en el escritorio —puedes empezar entregándote a ese bastardo. Ese ayudaría bastante.

Oh.

Lo mire mas directo, no había ni una pizca de diversión en su rostro, seguía igual, queriendo asesinarme con los ojos. no quiero imaginarme cual era mi expresión porque eso  fue... ¿Directo? porque lo ha sido desde que puse un pie aquí. Al final dijo en ese tono frio:

—Han llegado reportes de personas asesinadas. Seis, para ser exactos. Cuatro fueron agentes de aquí y—Hizo una pausa y quito sus ojos de mi—... y los otros dos fueron mis amigos. Personas que no tienen nada que ver en esto.

Wow. Esto es peor de lo me puede imaginar.

—Todos los cuerpos tenían notas, notas azules. —Continuo él.

Al mencionar eso mi curiosidad subió mas de lo necesario. Ese es justo el color que me han llegado a mi

—Pero... ¿Porque...? —Intente decir.

Levanto rápidamente su mirada, ahora con mas odio. Eso hace que me vuelva mas pequeña en el sillón.

—¿Y aun lo preguntas? ¿Es enserio?

Iba a responder, pero el se puso de pie, le dio la vuelta al escritorio pasando por mi lado y se dirigió hacia un estante con libros. Busco en uno de los pequeños cajones y saco una bolsa plástica que decía: Evidencia. Se dirigió nuevamente a su asiento mientras intentaba abrir la bolsa. Cuando logro abrirla, saco de ella un par de notas de... Color azul. 

—Míralas.

Me las extendió y las cogí rápidamente.

Quede perpleja con lo que decían. Eran amenazas:

 

"Va a correr mas sangre si siguen con sus investigaciones".

 

"No empiecen a querer correr cuando apenas saben gatear".

 

—Esas la dejaron junto a tres  cuerpos de policías -Murmuro mientras yo leía. —Mi padre siguió investigando y siguieron las muertes y amenazas

Seguí leyendo otras dos amenazas hasta que llegue a la ultima:

 

"¿Seguiran buscandome? Suerte con ello.

Recuerden que yo puedo jugar muy, muy sucio.

PD: Dile a tu hijo que ame las anécdotas de sus amigos, eran muy mujeriegos"

 

Y esa llego a mi puerta a las diez de la noche. Al otro día encontraron los cuerpos de mis amigos en un almacén abandonado.—Termino. La rabia y tristeza clara en su rostro.

Oh Dios...

No. Esto es mucho peor de lo que imagine hace unos minutos.

Sentí mi corazón latiendo a toda velocidad. Probablemente fue miedo. Las palabras no me salían. Mire al techo y cerré los ojos ¿Por qué tanta sangre? ¿Por qué esa maldita obsesión? Si ese psicópata me hubiera querido para lo que sea que quiera hacer, ya lo hubiera hecho.

Lo que mas me duele es que mi hermano no tenia el porque de morir. No se lo merecía. Y en esa misma posición un recuerdo me lleno la mente:

 

—¡Chicos! ¡Ya basta con sus gritos! —Grita mi madre.

Estábamos discutiendo sobre quien partiría el pastel —Estábamos de cumpleaños numero 15—. Mama siempre nos ha dado un cuchillo a ambos, pero esa noche hicimos una apuesta, el que ganara lo partería el mismo. Obviamente caleb gano pero yo quería hacerlo con él de todas formas.

—Escuchen. Por eso no quería que hicieran sus estúpidas apuestas—Dijo mientras nos acercábamos a ella, reprochándonos con la mirada.

—Si, pero aun así la hicimos y este minion —Dijo caleb mientras me revolvía el cabello—no quiere aceptar su derrota.

Este "minion" te dice que hiciste trampa.

Se que era mentira, pero tenia que defenderme con lo mas estúpido que se me ocurriera ¿No?

No me reprochen...

Cada vez te pones mas mentirosa, Claire, eso es muy malo—Miro a mama—Creo que hay que llevarla a un psiquiatra ¿Cierto mama?

Y así empezó nuestra mini discusión sobre quien debía ir a un manicomio primero, mientras mama encendía las velas del pastel. Al final, lo hicimos juntos—como siempre—porque mama obligo a caleb, claro.

 

Volviendo a la realidad, me  di cuenta de que ya tenia una lagrima por mi mejilla. Abrí los ojos y la limpie rápidamente, lo unico que me faltaba era desplomarme delante de un chico que me mira bastante mal.

—Solo quiero ayudar en lo que sea —Asegure.

—Ese es el problema, si nos ayudas posiblemente ese asesino se dará cuenta y no tardaría en matar a mas personas. Es obvio que tiene una obsesión extraña contigo.



#32434 en Novela romántica
#8677 en Thriller
#4882 en Misterio

En el texto hay: misterio, fbi, amistad amor

Editado: 23.08.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.