Habían pasado varios días desde la.salida al pueblo de Elizabeth y Nagi. A partir de ese día ambos empezaron a pasar más tiempo juntos. Ese dia, como muchos otros, fueron juntos a leer algunos libros a la biblioteca. Era el mejor lugar en el cual ambos disfrutaban.
- Nagi, mira esto
- Mmm ¿De qué trata ese libro? "100 métodos para vencer a los monstruos" Mmm
- ¿No te parece interesante? Lo encontré en uno de los estantes de ahí
- Los estantes de ahí, es...es un libro de la sección sobre el mundo humano
- ¿Un libro sobre el mundo humano? ¿Hay más libros como este en la biblioteca?
- Creo que se usan como referencia, nunca leí uno de ellos
- Entonces ¿Qué te parece si leemos este? . Me pregunto si habla de los invisibles - Ella miró página por página buscando algo que llamara su atención sobre el tema - Aqui está. ¡Aquí! La forma de derrotar a un hombre invisible
- Jajajajajajaja ¿Quieres derrotarme?
- No es eso, quiero saber si el método es correcto o no. " Los hombres invisibles odian a los perros. Huiran de inmediato si ven a uno, incluso si es bonito". Eso es lo que dice ¿Es cierto?
- Para nada, de hecho me encantan los perros - respondió Nagi sonriendo.
- En ese caso este libro está completamente equivocado
- Bueno...es que los humanos escriben estos libros y los llenan de cosas que ellos imaginan. Todo es falso
- ¿Y esto? "Por más que hayan desaparecido, los hombres invisibles siempre se reflejan en los espejos"
- Falso, si pueden vernos entonces no hemos desaparecido. Desaparecer significa eso, no poder vernos de ninguna forma.
- Este libro está lleno de tonterías
Pero Elizabeth siguió pasando las páginas hasta que se detuvo en otra que llamó su atención
- Oh vaya...las debilidades de los vampiros
- ¿Cuál será la debilidad de Ray? - dijo Nagi pensativo - ¿Qué dice esa página?
- "Los vampiros son debiles ante el ajo, si ven un diente de ajo huiran" ¿Ajo? ¿Qué es eso?
- Será algo que existe en el mundo de los humanos. Nunca oí hablar de eso.
- Entonces no podemos saber si es cierto o no. Pero mira Nagi, las debilidades de los vampiros son muchas. Es una lista bastante larga. Cruces, agua bendita, cosas hechas de plata, la luz del sol, los ríos, el fuego, las estacas.
- Son muchas
- ¿Los vampiros son...tan debiles?
En ese momento Ray apareció como si de un fantasma se tratara. Su voz sonó molesta
- Cuántas tonterías. Ya me preguntaba yo quiénes serían los idiotas que hacían tanto ruido en una biblioteca, veo que son ustedes. Y cuantas tonterías además - Como siempre su porte era de una elegancia magestuosa. Atractivo en exceso, era el centro de todas las miradas femeninas del lugar. Salvo Elizabeth quien nunca sintió ese tipo de atracción. - No hagan tanto ruido en la biblioteca, todos ustedes los de clase baja en especial...
- Vaya Ray ¿Con qué estabas aquí? Oye dime ya que estás aquí ¿Lo que dice este libro es cierto?- dijo Elizabeth
- ¿Qué?
- Dice que los vampiros tienen muchas debilidades. - continuó ella
- Idiotas, casi todo en esa lista son puros rumores. No crean esas cosas
- ¿Casi? ¿Casi todo? - Elizabeth lo miró sorprendida - Oh entonces ¿Algunas cosas son ciertas?
- Los de clase baja no necesitan saber esas cosas - contestó fríamente
- Será que los de clase baja somos más listo que uds "clase alta" - respondió ella desafiante
- Elizabeth - murmuró Nagi tímidamente
Ray la miró extrañamente. Luego acercó su mano a la cabeza de ella violentamente. Por un momento creyó que él la golpearía pero solo le revolvió el cabello.
- Oye, basta
Nagi los miró con una expresión entre tímida y extraña. Luego sonrió. Pero Ray lo miró molesto y le dijo
- ¿Por qué te estás riendo tú?
- Es la primera vez que te veo Ray actuar así. Siempre pensé que eras un chico duro pero sabes comportarte como una persona normal.
- Oye - dijo Ray - No te equivoques. Solo soy así con ella
- ¿Eh?
- ¿Solo con Elizabeth? - dijo Nagi - ¿A qué te refieres?
- Los vampiros adoramos las cosas hermosas y su apariencia es una de las cosas más bellas que he visto. Por eso no la mataré. Jamás podría destruir algo tan hermoso - Ray miró a Elizabeth como un depredador al asecho - Elizabeth ¿Te gustaría ser mía?
- ¿Qué?
El rostro de ella reflejo la sorpresa y el de Nagi la preocupación. No imaginó que Ray, quien pertenecía a la más altísima de las clases de la oscuridad, se interesaría por Elizabeth. Si ese era el caso entonces él estaba perdido ya que de ninguna manera podría competir con alguien como Ray.
- ¿Qué? - Elizabeth creyó oír mal - ¿Qué dijiste?
- Los zombies no sirven para nada. Pero tut eres hermosa. Si solo tengo en cuenta tu apariencia pasarás mi prueba. Te daré permiso para estar conmigo
- ¿P-permiso? - ella lo miró y por un instante la encandiló su belleza varonil. La más de las altas razas, Ray era realmente hermoso
- Ray ¿Hablas en serio? - pregunto Nagi con un nudo en la garganta - ¿En verdad estás diciendo eso? - la mirada del hombre invisible era dura, por un momento se volvió amenazante
- ¿Qué significa esa mirada amenazante Nagi? Es una mirada inusual para alguien que odia pelear como tú. Normalmente no me harías caso ¿No? - decía burlista Ray
- Tú eres el que actúa de forma extraña. Nunca antes habías dicho cosas como éstas. - Nagi se mostraba muy molesto y eso a Elizabeth le llegó al corazón.
- Nagi - susurró ella
- Acabo de explicar mis razones - contestó Ray - Su apariencia es exquisita, su belleza es comparable a la de las sirenas. Me encantan las cosas hermosas. Y si quiero algo lo consigo. Haré lo que sea para conseguir lo que quiero. En este mundo, la admiración es poder absoluto. La fuerza que puede vencerlo todo. Y yo tengo ese poder.
- Entonces ¿Por qué no eliges a otra persona? - dijo Nagi
- ¿Qué?
- Uno pensaría que el gran Ray puede conseguir cualquier cosa que quiera. Para alguien como tú, Elizabeth no puede ser la única elección ¿No? - Nagi estaba muy molesto - No puedes elegir a Elizabeth, no es...solo una chica linda
Ray lo miró a los ojos en silencio unos momentos. Luego sonrió misteriosamente
- ¿Quién era el que actuaba extraño? - dijo Ray - De todos modos la única que puede elegir es esta chica.
- Oh...pues... - dijo ella
- Si eres mía te prometo que estarás a salvo durante toda tu vida. Puedo protegerte de cualquier otra raza. Además puedes contarle a todo el mundo que estás con un poderoso vampiro - Nagi reflejó tristeza en su mirada - Es obvio que me elegirás ¿No?
- Elizabeth, puedes decir lo que quieras. Su propuesta es tentadora lo se, sería lo mejor para tí. También lo sé...pero si no te gusta, solo tienes que decirlo.
Ray rozó suavemente el cabello de ella logrando llamar su atención. Nunca esperó oír algo semejante, tampoco había pensado en los beneficios que podría tener estando junto a Ray que pertenecía a la más alta clase. La de los vampiros.
- Nagi - dijo Ray - No quieras distraerla. ¿Por qué tendría alguna razón para rechazarme? Vamos dilo, di que quieres estar conmigo -Ella miró a Nagi y luego lo volvió a mirar a Ray.
Elizabeth recordó los momentos pasados con Nagi, realmente se había divertido. Nagi era muy sensible, era un chico gentil y confiable. La veía a ella como una persona y no solo como una cara bonita como Ray. Además había elegido a Nagi antes y lo volveria a hacer. Las veces que fuesen necesarias.
- No, no puedo estar con Ray. No puedo elegirte por más que me ofrezcas esas cosas. Lo siento
-¿Qué?
Era evidente que Ray no estaba acostumbrado a perder ni a ser rechazado ya que se le desfiguró el rostro.
- Elizabeth - susurró Nagi
- Es que...aunque me hayas dicho que te pertenezco...no entiendo a qué te refieres pero...no suena nada agradable. Si te refieres a ser tu amiga...