Capítulo 20

"¡Feliz navidad, mi pequeña hufflepuff!"
 

Elena Walker

Hoy era nochebuena, por lo cual a las 12 de la noche nos daríamos regalos de intercambio y de navidad.

Normalmente estas fechas solo las pasaba con mis hermanos ya que mi madre siempre tiene urgencias en el hospital; pero este año todo fue distinto, no seríamos solo mi familia y ya.

Han decidido que es buena idea pasar esta fecha en grande, al igual que año nuevo. Mis padres se arreglaron, son amigos y han quedado que ambos estarían en casa estas fechas, no solo ellos si no sus parejas, respectivas familias e invitaron a amigos. Los Jones fueron invitados al igual que los Walsh, los Green los LeBlanc, los Rider, entre otros.

Seríamos bastantes en casa esta noche, por suerte le compre un regalo a cada una de las personas importantes para mí.

No quiero darles los regalos a mis hermanos mientras la gente esté en mi casa por lo que estoy buscando el momento perfecto para dárselos.

El momento perfecto para darle su regalo a Verónica es ahora. ¿Por qué? Por qué ira al hospital y no estoy segura si regresara cuando haya gente.

— Vero, antes de que te vayas quiero darte algo.

— ¿Qué pasa?

La tome del brazo y la dirigí a la sala, donde estaba el árbol de navidad. Me agache para buscar la caja con su nombre, cuando la encontré se la di.

— ¡Feliz navidad! —exclame feliz.

Ella sonrió y abrió la caja, era un estetoscopio Littman Cradiology IV, el suyo lo perdió en el hospital hace unos días y por las fechas tardaba mucho el envió. Tuve que ir a más de 4 lugares para poder encontrar el estetoscopio que a ella le gusta.

— No es mucho, ni algo tan caro como lo que tú me diste pero sé que es algo que te gustara —dijo ella dándome una caja—. Feliz navidad, pequeña.

Ella se dio la media vuelta y se fue, iba algo tarde por lo cual no podía distraerla más.

Abrí la caja que me dio y pude ver que era la serie completa de Friends, es mi serie favorita, la deje de ver porque la quitaron de Netflix pero la vi completa más de 5 veces.

Tome la cajita con las series y la lleve a mi cuarto, ahí tome la caja con el regalo de Dylan, era el videojuego de Halo Infinite. Lo compre en preventa ya que aún no sale, sé que le gustara.

Toque la puerta de su habitación y no abrió por lo cual entre, estaba metido en su computadora, mi mirada se clavó a la persona a lado de él, una Karina durmiendo con una de sus playeras puestas.

— ¿Tienes tiempo? —pregunte tímida—. Puedo volver después.

— Oh, ¿qué es eso?

— Venía a darte tu regalo de navidad pero creo que mejor vuelvo en otro momento.

— No, no.

Dejo su computadora a un lado y se paró, camino hacia su armario y saco una cajita pequeña. Se dirigió a mí y me la entrego.

— Feliz navidad enana. Espero te guste, la mande a hacer para ti.

Abrí la cajita y vi un collar con un colguije de una W en ella, era oro.

— Wow, Dylan esto debió costarte mucho.

— Solo lo mejor para mi hermana —dijo sonriendo—. Ya, ahora quiero mi regalo.

Le entregue la caja y vi cómo se le ilumino la mirada cuando vio lo que había en el interior.

— No. Esto te debió costar una fortuna.

— Sabes que se buscar ofertas, aparte el dinero no es problema.

— Ya, te has ganado el título de la mejor hermana del año.

Se escuchó un balbuceo y fue cuando me acorde que Karina estaba ahí tirada en su cama. Me acomode un mechón de pelo detrás de la oreja y salí de la habitación.

Ahora solo faltaba el regalo de Javier, fue el que más trabajo me costó conseguir pero sabía que valdría totalmente la pena.

Fui a la sala y tome la bolsa donde estaba su regalo, lo empecé a buscar alrededor de la casa hasta que lo encontré en la terraza con una cerveza.

— Tomando desde temprano, eh.

— Estoy estresado.

— ¿Por qué?

— No sé si será la última navidad que pasemos todos juntos, no me gustaría que fuera así.

— No te pongas sentimental —dije divertida—. Te traje un regalo.

— Oh, quiero verlo.

Le di la bolsa. El contenido era un jersey del equipo de americano Pittsburgh Steelers, estaba autografiada por todo el equipo.

No lo logre yo sola, tuve que pedirle ayuda a Santiago, realmente fue él quien me consiguió las firmas, no tengo la menor idea de cómo.

— No puedo creer que hayas conseguido esto y yo solo te haya comprado un perfume.

Su regalo lo dejo mi cuarto en la mañana, no dijo mucho ya que estaba emotivo, igual ahorita yo quería decirle unas palabras.

— Te voy a extrañar. Sé que nunca fuimos demasiado unidos pero no será lo mismo despertar y no poder molestarte de camino al colegio, o cubrirte las veces que llegabas borracho, simplemente extrañare verte tumbado en el sillón haciendo nada.