Indio... ¡prohibido Morir!

Los Vicios

¿Cómo eran las drogas en la cárcel? ¡Adentro! peor que en la calle, eso lo pasan ¡no joda!, kilos y kilos… con eso te digo todo… ¡KILOS! que tu quedas loco, en plena visita la gente vendía ¡si hay! En ese tiempo había bazuco, hay Rupinol decían, cruz de palo ¡así mismo! y fuman… (Piensa bastante) tu entras a un penal y te llega el olor a piedra que fuman ¡marihuana! toda esa vaina, bueno yo consumía todo eso, yo deje toda esa vaina… porque ¿sabes por qué? (me mira a los ojos buscando encontrar la verdad, buscando encontrar algo que le permitiera ver que yo le creía) Porque si no, me hubiesen matado, por lo menos en el Rodeo yo consumía ¡NO JODA! Bazuco, marihuana, perico, de todas clases… porque estaba era… ¿están entendiendo? Estaba era como decir ¡mal, grave! y yo quería… coño no quería estar más metido en esa vaina y pa´ pasar el tiempo y hacer algo, pa´ poder robar a los presos… y a más de uno robaba, así que un día me pongo con… ¡ah! Con un tipo que se hizo pasar por loco ¡con el! nos pusimos… a fumar, nos pusimos engorilaos y gasté… gasté los reales que yo le daba a mi mujer, al siguiente día… cuando la visita; yo había gastado… ¡gasté todo lo mío! Y el tipo también gasto todo lo de él, y él era jíbaro también, pero gastó lo que él había vendido y empezamos a fumar, fumar y nos fumamos todo; entonces en la mañana ¡coño me baño! Y yo coño… la visita ¡no tengo ni medio pa´ darle a la mujer! (cuenta con arrepentimiento) eso va hacer un peo, porque vienen contando que uno siempre les da, bueno… ¡claro! no se va poner brava porque no le doy, pero va a decir ¡cónchale este agarró el vicio!, una va… entonces vengo bajando las escaleras, yo vivía en el cuarto piso, vengo bajando por el tercero y veo al tipo, al jíbaro que le gaste los reales, al “Gocho” y lo veo y me dio una rabia, el con una cadenota de oro, comiendo el desayuno en la cantina así (explica hinchándose como un pavo real) queso frito, una merengada y me llama, ¿qué paso Indio, quieres una merengadita? Coño me dio una rabia, le dije ¡No! Yo mamando y este mamaguevo desayunándose con mis reales, llegué y le dije ¡no! Una merengada no ¡te vengo es asaltar! pero yo no lo iba asaltar; fue en el momento que me… por él haberme dicho esas palabras, entonces le arranque… le agarre así la cadena (cerrando el puño y frunciendo los labios con ira y rencor) y se la arranqué de una vez, le tiré una puñalada y le quite los reales; lo encendí a puñaladas; le quité los reales y arranque a correr porque yo… lo estoy asaltando en su pabellón donde él vive ¡eso es un delito! Y arranco a correr pa´ mi pabellón, cuando estoy en el pabellón cuatro de los amigos míos se me voltean a mí también, porque esos eran amigos de ese tipo, y empieza todo el mundo… ¡tú tas loco! … ¡Y no! me encerré, empezaron los amigos míos a decir ¡cónchale vale! ¿Por qué lo…? ¡Lo asalte por esto chico! ese tipo como me va a decir que… si quiero… tomarme una merengada, si esos reales eran míos, pero tú se los gastaste me dijeron los otros ¡si vale! pero bueno soy malandro les digo yo y ¡yo peleo con ese tipo vale! Entonces, el tipo me manda a decir que va a pelear machete conmigo, esas peleas eran dos machetes cada uno y le digo peleo como venga (se ríe) yo digo dentro de mi ¡QUE ME MATE! de todas maneras ¡que carrizo!, me quite todo y salí y ese lío, estábamos peleando y se me voltearon los mismos amigos míos, todo el mundo, entonces vienen los que cuidan y paran la vaina y al tipo y lo trasladan en ¡la vaina! lo trasladaron; coño me quite ese peso de encima. ¡No consumo más drogas! Ahí fue cuando dejé… el bazuco por lo menos allá, dije no, no consumo más, porque me van a matar; eso fue un delito ¡claro! Coño estoy asaltando, me estoy metiendo pa´ un pabellón, meterse pa´ un pabellón es… le estas buscando lío a los demás que viven ahí, como van a decir que son chigüires y una vaina así; darle puñaladas a ese tipo… y ya ese tipo había matado por, por medio… al que él le fiaba y no le pagaba en visita lo jodía, lo apuñaleaba, el tipo era malandro; por eso es que yo le agarre rabia, porque era… había matado a un amigo mío también, porque le debía una droga… ahí yo deje el bazuco y la pastilla ¡no! ahí dije… no consumo más, aquí en el Rodeo. Ahí fue cuando me mandaron pa´ oriente… seguí consumiendo… en San Juan igualito (piensa) entonces después dije ¡no! Y… entonces ¡aja! en San Juan cuando nos sacaron que… nos cambiaron de cuarto tomaron el penal, ahí nadie estaba fumando pero… como siempre, a mí siempre me ha gustado el monte, entonces yo siempre cargaba ¿no? y lo cargaba en un doble fondo, el doble fondo es de, de desodorante, esos traen doble fondo y broma, los cargaba ahí; entonces como pasaban raqueta y nos cambiaban de pabellón, nadie tenía era nada… y eso fue el día de los inocentes, el veintiocho de diciembre y nadie fumaba… todo el mundo ¡coño! pero yo lo tenía guardado era pal treinta y uno de diciembre, porque yo todos los treinta y uno de diciembre me hacia un tabaco así grande (diez centímetros aproximados) que me durara veinte minutos decía yo, pa´ despedí el año fumando y recibir el año fumando pero yo solo, a nadie le daba, a mí me pedían y yo les decía ¡nadie me va a pedir! Yo solo fumaba. Nadie tenía, entonces como yo tenía guardado pal treinta y uno ya… todo el mundo sin nada, nada más le dije a los de la celda: van a fumar ustedes conmigo, pero a más nadie le voy a dar, estábamos trancados y los guardias… yo vivía en la celda uno y los guardias estaban al lado ¡cuidándonos! en la puerta, le puse cartones a la puerta pa´ que no saliera la luz, el televisor no se podía tener prendido después de las nueve, ¡régimen militar! le puse cartones pa´ que no saliera nada ¡y todo! Y empecé a fumar dentro de la poceta y hacia así (aspiraba) y metía la cara en la poceta, así pa´ poder fumar, ¡fíjate lo que uno hace! botaba el humo ahí y así estaba… han abierto la puerta los guardias y no me di cuenta, cuando estoy así inspirado fumando, siento un planazo en el culo ¡pum! Cuando volteo era la guardia, dándome golpes, ¡me dieron una paliza el treinta y uno a las doce de la noche! porque era a las doce de la noche que yo fumaba; ahí fue cuando dije ¡no joda! ¡No fumo más hasta que se vaya la guardia! y la guardia duro tres años pa´ irse, y por eso ¡no! entonces cuando salí en libertad fue que otra vez… pero después ¡la volví a dejar!




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