Infectados

S E I S

Al caminar por las extrañas calles llenas de polvo y algún que otro químico seco me hace preguntarme lo que en verdad sucedió ahí. Folletos y algunas hojas de periódico están esparcidas por las agrietadas calles, los edificios, casas y otras instalaciones están en las mimas condiciones. Sigo caminando observando a mi alrededor fascinada, esto solo demuestra que la humanidad si vivía antes fuera de los muros y que por alguna razón algo o alguien acabo con esta libertad que, en ese entonces, ellos poseían.

Entro en una instalación parecida a un laboratorio: sus pasillos son blancos o así se veían antes de que la humedad y el tiempo se encargara de agrietarlas. El moho también hacia presencia en cualquier lado a donde fuese que fuera. Además de los miles de insectos y objetos extraños que me encontraba por el camino. Un cable desprendido del techo detuvo mis pasos, se notaba que por el tiempo este estaba todo corroído pero aun así seguía duradero. En su punta los cables yacían desprendidos echando pequeñas chispas que caían y se desvanecían en el charco de agua. Tomando un gran impulso salte sin tocar el agua que estaba segura que si la tocaba seria en este momento, un costal de carne achicharrado. Eso me hacía pensar en que la cuidad no estaba tan deteriorada como yo creía. Es decir, había electricidad.

Empuje la puerta blanca con una pequeña ventanita en la parte superior haciendo una mueca de desagrado cuando esta chirrió sonoramente. Del otro lado  un gran laboratorio me dio la bienvenida. Sorprendentemente está en buen estado y eran pocas las cosas que estaban rotas y desordenadas. Camine abriéndome paso entre las camillas y blancas paredes hasta llegar a una zona más curiosa.

Una especie de sala extensa con tanques llenos de un líquido verde. Me acerque hasta lo que parece ser uno de los tanques, dandome cuenta cuando estuve de frente de lo que parece ser una cámara de criogenización. O eso  es lo que me parece ver cuando justo cuando en el panel a su lado hay la silueta de un cuerpo con sus estadísticas. Paso mi mano por el cristal sorprendiéndome de ver detrás de este un rostro humano. Miro sus estadísticas y veo que no está vivo cuando la linea que marca su pulso no se mueve, es una linea recta. Me asusto al acercarme mas cuando sus ojos se abren y se conectan fijamente con los míos. Posa su mano en el cristal sonriéndome débilmente, dice algo que no puedo entender debido a que la cámara es insonora. Golpeo el cristal intentándolo romper pero él niega perdiendo la sonrisa. Sus ojos se vuelven una especie de azul violáceo y tras soltar su último suspiro sus ojos se apagan. De su boca sale una especie de humano que traspasa el cristal tras tocarlo. Intento alejarme pero la pequeña nube azulada entra por mis fosas nasales, llevo mis manos a mi cuello sin poder respirar. Mis ojos se hacen pequeñas rendijas mientras que mis pulmones arden reclamando el aire. De pronto siento una corriente eléctrica pasar desde la columna vertebral hasta recorrerme todo el cuerpo y así sucesivamente hasta que todo se detiene. Mis pulmones vuelven a su normalidad pero algo en mi cambio, ya no es lo mismo. Agarro un pedazo de cristal del suelo observando mi rostro, jadeo cuando veo mi reflejo: una yo más joven y con tersa y blanca piel me da la bienvenida, además de que mis violetas ojos ahora son como una especie de azules.

— ¿Raven? —escucho una voz lejana pero mis ojos siguen fijos en mi reflejo estupefactos con lo que ven ¿Cómo es posible?

— ¡¿Raven?! ¡¿Estas bien?! —la voz de Benjamín se hace más clara seguida de su tacto en mi hombro. Grito por el repentino dolor que me recorre tras el toque de benjamín. El cristal se resbala de mis dedos haciéndose pedacitos en el suelo, pero antes de que este se estrelle mis ojos vuelan rápidamente a mi reflejo sorprendiéndome aun más: Mis ojos azules se desvanecieron volviendo a ser los mismos violetas de antes. Sigo gritando por el dolor de su tacto  en mi hombro, jadeo y pataleo. Todo es como una especie de sueño: Tan irreal…

No se cuanto duro pero de un momento a otro su voz se desvanecio como todo a mi alrededor. Me vi rodeada de un campo de trigo que solo me recordó a los amarillos y hermosos ojos de Hades. Toque suavemente el trigo riendo de las cosquillas que este hacia en la palma de mi mano. Mi risa desaparecio cuando un ruido a lo lejos llamo mi atencion. Mis ojos casi se salieron de su cuenca ante lo que vi: La cuidad…ahora estaba como nueva.

Personas, autos, niños y los edificios, todo estaba como antes. Sin darme cuenta me vi telestrasportada al centro de la avenida donde observava todo a mi alrededor facinada. ¿Que estaba sucediendo? Me pregunte cuando note que esto no podia ser la realiadad. Yo sabia como estaba y no se parecia nada a esto.

O eso fue lo que pense antes de que el ruido de algo fuerte rezonara por todo el lugar. Todos se detuvieron curiosos de aquel ruido. Voltearon sus cabezas buscando el lugar de donde provenia pero nada se veía. Hasta que de nuevo el mismo ruido resono aun mas cerca. inmediatamente las aves salieron volando de sus nidos huyendo de lo que se avecinaba.

Un Meteorito…

O lo que parecia ser una bola gigante de tierra rodeada de fuego que se abria paso en el cielo y que se acercaba de una manera alarmante a la cuidad. Entre en panico intentando deternerla pero era como si yo fuese un fantasma, todo lo que tocaba me atravesaba y por mas que alertaba a todo el mundo nadie me escuchaba.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.