Bueno, aquí me encontraba yo, quejándome de la vida dentro del auto. Siento que el ya antes mencionado se detiene y eso me indica que hemos llegado.
Salí del carro sin decir nada y tome mi maleta. Las cosas de la mudanza llegaron junto con nosotros.
Papá tomo sus llaves y abrió la puerta de la "casa" —entre comillas, porque más bien era una mansión —.
-Tu cuarto se encuentra en el segundo piso a la izquierda cariño.
No le contesté , ni siquiera me inmuté en mirarlo, tampoco le di un gracias, solo seguí derecho a mi cuarto, si, sé que estarán pensando << eres muy dura con el>>, pero es que no puedo ni mirarlo a los ojos y no sentir culpa, porque me recuerda a mi madre y no puedo evitar sentirme terrible, porque siento que al fallarle a mi madre, le estoy fallando a él.
Mi cuarto era bastante grande para mi gusto, pero tenía que vivir con ello.
El cuarto era de una combinación de colores, una pared era roja, la otra negra y por último blanco; la verdad me encantaba el color, la mayoría de mis cosas tenían esa tonalidad de colores y me encantaban.
(...)
Ya empezaba la escuela mañana, pero quise dar primero una vuelta por todo el lugar.
Me fui por la ventana ya que ir por la puerta es muy normal y pues como yo nunca en mi vida fui normal...
Me encontraba caminando por la acera cuando de pronto me entra una llamada.
Era Kiara, contesto mientras camino y sigo de largo a quien sabe dónde -creo que te has olvidado de mí- dice Kiara y sé que en estos momentos se está haciendo la dramática. Sonrío.
-¿Cómo se puede olvidar el mundo de Kiara Collins?- digo calmada, pero a la vez con burla.
-es lo que yo me pregunto todo el tiempo- dice arrogante- es broma, sé que no puedes vivir sin mí - dice haciendo la voz como si se fuera a desmayar.
-quisiera que estuvieras aquí para que me alegres un poco la vida- dije pesadamente.
-¿y quién dice que no lo estoy?- no entendía hasta que siento como alguien toca mi hombro.
-Kiara!!!!- digo sorprendida y la recibo con un gran abrazo- ¿me estás espiando o te convertiste en criminal?
-tal vez... - dice inocente - okey no- dice al ver mi cara de terror- te mudaste por el vecindario en el cual vivo, parece que el destino quiere que estemos juntas otra vez.
-Si, tú y yo contra el mundo, amiga- nos reímos, la verdad que las dos cambiamos mucho.
-Bueno, hay que prepararse ya mañana comienzo las clases.
-si, no te preocupes yo mañana te enseñaré todo el lugar.
-okey nos veremos pronto.
-bye- se despidió Kiara de mi.
Llegué a casa y me dirigí a cenar.
La cena fue como siempre desde...Ya saben, nadie habló a excepción de mi tía que siempre intenta entrarnos conversación a papá y a mí, ella siempre trata de arreglar nuestra relación. Terminamos la cena y todos nos fuimos por nuestro lado.
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